El coleccionista amigo de Camb¨®
El Museo Mar¨¦s y el Archivo Fotogr¨¢fico de Barcelona reivindican al escen¨®grafo y anticuario Oleguer Junyent
Al estallar la guerra civil en Barcelona se produjo la incautaci¨®n de muchas de las colecciones privadas de arte, pero no la de Oleguer Junyent (Barcelona, 1876-1956). Cuando los miembros de un grupo anarquista subieron a su casa y estudio ¡ªsituados en la calle Buenavista 22¡ª los estaba esperando sentado en el sill¨®n de su despacho rodeado de su impresionante colecci¨®n y su biblioteca. Tras ordenar el que dirig¨ªa la patrulla a sus hombres requisarlo todo descubri¨® sobre la mesa un ejemplar del libro Roda el m¨®n i torna al Born. ¡°Este libro lo ten¨ªamos en casa¡±, le dijo a Junyent. ¡°Pues lo he escrito yo¡±, le contest¨®, con lo que el brigadista mand¨® detener r¨¢pidamente lo que estaban haciendo sus compa?eros y les orden¨® que abandonaran la casa.
El libro lo escribi¨®, en efecto, el escen¨®grafo del Liceo, pero tambi¨¦n decorador, coleccionista, anticuario, fot¨®grafo amateur Oleguer Junyent al a?o siguiente de terminar su vuelta al mundo que realiz¨® entre 1908 y 1909 recorriendo pa¨ªses como Egipto, India, China, Jap¨®n o Canad¨¢ para volver al Born, donde viv¨ªa. Se vendi¨® en cap¨ªtulos coleccionables y fue un aut¨¦ntico best-seller de la ¨¦poca popularizando el pareado que todav¨ªa hoy se dice, aunque no se sabe muy bien que significa.
370 de las fotograf¨ªas (80 de las cuales son copias digitales de los positivos estereosc¨®picos) que realiz¨® Junyent durante su viaje pueden verse en el Arxiu Fotogr¨¢fico (hasta el 14 de octubre), que conserva m¨¢s de 2.500 de las im¨¢genes que realiz¨® el polifac¨¦tico escen¨®grafo emulo de Willy Fog tras cederlas su familia en 2014. Las im¨¢genes est¨¢n colocadas con el mismo recorrido que realiz¨® el intr¨¦pido barcelon¨¦s. A la vuelta del periplo Junyent lleg¨® con un buen n¨²mero de dibujos, croquis y acuarelas, ¡°las realiz¨® para encontrar inspiraci¨®n para sus producciones oper¨ªsticas en el Liceo, pero esconden un alto sentido antropol¨®gico y art¨ªstico¡±, destaca Rafel Torrella, conservador del AFB y comisario de la muestra que puede verse en este centro. Tras exponerlos pasaron a ser material para su exitoso libro, uno de cuyos ejemplares puede verse en una de las vitrinas de la exposici¨®n, junto a la caja donde conserv¨® el resto de su vida las placas fotogr¨¢ficas.
El Museo Mar¨¨s muestra (hasta el 7 de enero) al Oleguer Junyent coleccionista, centr¨¢ndose en la relaci¨®n con otros coleccionistas como Frederic Mar¨¨s. Y lo hace a partir de una selecci¨®n de las obras que contin¨²an en posesi¨®n de los descendientes de Junyent, como son un extraordinario ejemplar de casi dos metros de San Miquel Arc¨¢ngel realizado en madera policromada por Luisa Rold¨¢n, La Roldana, en el siglo XVII; un pin¨¢culo de retablo del siglo XIV de Arnau Bassa, hijo del famoso Ferrer Bassa, un joven que falleci¨® en Barcelona por la peste negra; una espl¨¦ndida tabla de Llu¨ªs Borrassa, nueve tallas de v¨ªrgenes que pasaron de manos de Junyent a las de Mar¨¦s o una arqueta amatoria producida en Barcelona en el siglo XV, procedente del monasterio de Yuste, del entorno del emperador Carlos V y que Junyent adquiri¨® a su buen amigo Arthur Byne, el marchante que acab¨® vendiendo gran parte del patrimonio espa?ol a magnates estadounidenses como William Randolph Hearst.
Seg¨²n la investigadora Clara Beltr¨¢n la colecci¨®n de Junyent es la t¨ªpica del coleccionista de la primera mitad del siglo XX, ecl¨¦ctica, integrada por obras de muchas tipolog¨ªas y ¨¦pocas pero sobre todo medieval y tallas de V¨ªrgenes. Aunque el conjunto que m¨¢s destacaba era la colecci¨®n de m¨¢s de 300 arquetas que consigui¨® reunir, que sus descendientes ofrecieron a la ciudad tras su muerte, pero por falta de medios no se compr¨® y acab¨® en manos de otro coleccionista, Bartolom¨¦ March y a?os despu¨¦s acab¨® dispersa.
En la exposici¨®n del Mar¨¦s se muestra documentaci¨®n en la que aparece tambi¨¦n otro de los coleccionistas del momento como es Llu¨ªs Plandiura, que formaba parte del mismo c¨ªrculo de amigos y con el que compart¨ªa proveedores. Pero Junyent era amigo, sobre todo, del pol¨ªtico Francesc Camb¨®, al que asesor¨® cuando creo su extraordinaria colecci¨®n de pintura europea. La amistad y cercan¨ªa entre ellos queda reflejada en las diez acuarelas realizadas a bordo del Catalonia el yate de recreo que ten¨ªa Camb¨® y con el que navegaba por el Adri¨¢tico, el J¨®nico y el Egeo, sobre todo cuando la coyuntura pol¨ªtica no soplaba como al prohombre quer¨ªa. Junyent le acompa?aba casi cada a?o. En la muestra tambi¨¦n pueden verse las fotograf¨ªas de los amigos conversando y comiendo pl¨¢cidamente a la puerta de la finca de Junyent en Llucalcari, Mallorca, o los dibujos del perfil del barco o el camarote decorado por Josep Maria Sert o de muchos de los acompa?antes y amigos de Camb¨®.
Universo particular
El mundo art¨ªstico de Junyent no se ha perdido. Se conserva en su estudio situado en la calle Buenavista de Gr¨¤cia, donde todo est¨¢ tal y como el dej¨® tras fallecer hace m¨¢s de 60 a?os y que sus herederos, personificados en Sabine Armengol se han empe?ado en darlo a conocer. Por eso lo abren al p¨²blico de forma directa o a trav¨¦s de Casas Singulares que permite acceder a grupos reducidos a este universo particular. All¨ª es f¨¢cil revivir las tertulias, fiestas, lecturas de poemas y novelas, contemplaci¨®n de obras de arte y asistir a conciertos en los que era posible o¨ªr la peculiar voz de Conxita Badia. En ese mundo est¨¢ buceando Clara Beltr¨¢n que prepara su tesis doctoral sobre este importante personaje, que tras las dos exposiciones es menos desconocido.
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