Porno junto al Lago
El Sal¨®n Er¨®tico de Madrid, organizado por los creadores del de Barcelona, celebra su primera edici¨®n en la Casa de Campo
Un t¨®rrido calor de verano cubre la Casa de Campo. Rozan las 17.00. Varias chicas preparan unas piraguas para surcar el Lago. Un grupo de gente hace cola para entrar en la piscina Un ciclista solitario pedalea por un camino de arena. En medio de ese paraje, se oye el murmullo de una sesi¨®n de electr¨®nica. La m¨²sica emana del Pabell¨®n de Cristal, donde ayer arranc¨® el Sal¨®n Er¨®tico de Madrid (hasta el 11 de junio; hoy, de 12.00 a 01.00 y ma?ana de 12.00 a 22.00; entradas desde 18 euros). ¡°Despu¨¦s de 25 a?os de historia del Sal¨®n en Barcelona, es un placer estar en la capital¡±, anunciaba la estrella del porno Nacho Vidal a la entrada del evento.
¡°Os pod¨¦is acercar, p¨²blico de Madrid, no muerden. Igual salpican, pero no muerden¡±. Con estas palabras anima un DJ al p¨²blico a juntarse al escenario donde una pareja empieza a desnudarse. ¡°Hay 16 espacios con actuaciones para todo tipo de p¨²blico: hombres, mujeres, gais, lesbianas¡ Para todas las personas, todos los g¨¦neros y todas las condiciones sexuales¡±, aclara la directora art¨ªstica del evento Bibi Norai, que recibe con cors¨¦. Se queja de lo complicado que ha sido celebrar el Sal¨®n en la capital: ¡°Llevamos d¨¦cadas intentando desembarcar aqu¨ª, pero no ha sido f¨¢cil¡±, cuenta. En 2007 se celebr¨® un evento er¨®tico, pero nunca se repiti¨®. ¡°Ahora, por fin, nos han dejado venir¡±, a?ade Norai.
¡°No hace falta ni aclararlo: aqu¨ª viene todo tipo de p¨²blico¡±, dice Norai llev¨¢ndose la mano a la fusta que cuelga de su cintura. ¡°Antes ven¨ªan m¨¢s hombres, pero actualmente es un p¨²blico ecl¨¦ctico: parejas, j¨®venes, mayores, amigos¡¡±. La ¨²ltima edici¨®n del Sal¨®n Er¨®tico de Barcelona atrajo a 28.000 espectadores. La organizaci¨®n, que es la misma que el de Madrid, no espera esos n¨²meros de su incursi¨®n en la capital: ¡°Esperamos que esta sea la primera edici¨®n de muchas¡±.
Anais e Isabel, ambas de 40 a?os, son amigas y es la primera vez que vienen a un sal¨®n er¨®tico: ¡°Por curiosidad. Me parece interesante, sobre todo las tiendas¡±, dice Isabel. En algunos de los 58 expositores -entre los que hay productoras porno, cabinas de masajes er¨®ticos, o stands de redes sexuales, como Bakala.org, o de asociaciones como Fundaci¨®n Tri¨¢ngulo- venden dildos, lencer¨ªa, lubricantes, esencias, cockrings¡ La reconocida boutique er¨®tica Amantis (Pelayo, 46 y varias sucursales m¨¢s) ha instalado un c¨¦sped y colocado unas plantitas en su espacio que contrastan con los gemidos que surgen de un escenario aleda?o. ¡°A la tienda viene todo tipo de gente: desde se?oras de 70 a?os hasta chavalitos punkis de 18¡±, dice Oscar Ferrali de Amantis, ¡°pero creo que algunos de nuestros clientes se van a perder el sal¨®n porque les puede parecer demasiado expl¨ªcito. A¨²n queda mucho por hacer¡±. Por eso tambi¨¦n ejerce de divulgador sexual y da un taller sobre juguetes er¨®ticos Juego, luego excito.
Esas sesiones se imparten en el Aula de Sexo, donde en ese momento est¨¢n impartiendo un taller de felaci¨®n y cunnilingus. ¡°Hay q valorar el momento¡±, explica un educador con un micr¨®fono. En el peque?o escenario un hombre ofrece sexo oral a una mujer. La clase est¨¢ casi llena y todo el mundo muy atento. ¡°Hay chicas que despu¨¦s de la estimulaci¨®n oral les gusta muy r¨¢pido pasar a la penetraci¨®n. A otras no les gusta tan brusco. Los gemidos y la comunicaci¨®n son clave en el sexo¡±, comenta el narrador. Cada hora la tem¨¢tica cambia en el aula y se pasa de hablar sobre c¨®mo disfrutar del sexo anal a descubrir los misterios del squirting.
¡°Creo que los shows est¨¢n m¨¢s enfocados a los hombres¡±, comentan las dos amigas Anais e Isabel mientras miran a los dos chicos semidesnudos que est¨¢n en escena en los proleg¨®menos de un espect¨¢culo de porno gay. ¡°Pero en los productos ¨Clencer¨ªa, geles, consoladores¡- hay mucha variedad para las mujeres¡±, a?aden. Tienen planeado quedarse hasta tarde: ¡°Nos han dicho que despu¨¦s esto se anima; a medida que se acerca la noche, el tono va subiendo¡±.
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