¡®CabaretA¡¯ reivindica todo lo que no sea pol¨ªticamente correcto
Este teatro-concierto c¨¢ustico, divertido y en clave femenina se ver¨¢ en la Muntaner del 19 el 30 de julio, dentro del Grec
CabaretA. Con una A may¨²scula al final para dejar claro el esp¨ªritu femenino que lo ha creado, lo ha musicado y lo interpreta. La actriz Maria Molins y la pianista B¨¢rbara Granados han fabricado este delicioso espect¨¢culo que mezcla con iron¨ªa el teatro con el concierto, que se r¨ªe de todo el mundo, que rompe la cuarta pared ense?ando pechuga, que critica tantos conceptos perversos pero pol¨ªticamente correctos de nuestra sociedad y que rinde sencillos homenajes a cuatro referentes de nuestra cultura: Maria Aur¨¨lia Capmany, Guillermina Motta, Mary Santpere y ?ngel Pavlovsky. Todas mujeres. Estar¨¢n en la Muntaner, dentro del Grec, del 19 al 30 de junio, durante una hora y 20 minutos. En oto?o, ya tienen gira asegurada.
"Maria ten¨ªa ganas de hacer co?a, de alejarse de papeles dram¨¢ticos", explica B¨¢rbara Granados. "Yo he estado tres a?os fuera de la escena por un puto c¨¢ncer y he aprovechado para hacer canciones cachonde¨¢ndome de todo: de la hipocres¨ªa de los 'que te mejores', de los d¨ªas mundiales de tal o cual cosa, de los lacitos solidarios que acaban olvidados... Y me he quedado muy a gusto". Tanto, que no dud¨® en dar salida a todo ese esp¨ªritu, de la mano de Molins, en una obra c¨¢ustica, divertida e impregnada de ese humor que B¨¢rbara denomina, abiertamente, "tumor negro".
"El espect¨¢culo empieza con una canci¨®n donde se explica qu¨¦ veremos en el escenario", advierte Molins. Es una sucesi¨®n de n¨²meros cantados y narrados (teatro-concierto, de hecho) con frescura y con mala leche. Joan Maria Segura Bernadas, el director, es quien da coherencia a todo ello mientras que la banda sonora, en directo, la ponen los m¨²sicos Dick Them y Miquel Malirach ("un chico para todo", dice Molins: "?Toca, canta y hace de actor!"). Un 80% de las canciones son originales de Granados.
La reivindicaci¨®n de una Barcelona canalla que ha desaparecido trae la escena el Paralelo de los a?os 20 y 30. La sala, de hecho, dispone peque?as mesas en la parte delantera la platea, como en los teatros de hace un siglo, y la protagonista baja del escenario, como una vedette, y se divierte con el p¨²blico. "Hasta ahora no lo hab¨ªa hecho nunca, pero le he cogido el gusanillo y me hace gracia sentarme en las piernas de un espectador, por ejemplo", advierte, con una sonrisa p¨ªcara. La voz poderosa, seria, respetuosa de Maria Aur¨¨lia Capmany de Dones, flors i violes, interpretada por el mismo Malirach (el chico para todo), introduce una canci¨®n cabaretera al cien por cien: "Habla de una mujer que tiene picores y, est¨¢ claro, buscar¨¢ a alguien que la alivie...", se excusa Maria Molins.
Pero hay mucho m¨¢s. CabaretA va pasando por diferentes ¨¦pocas sin abandonar el tono de comedia. "Mary Santpere cantaba Coca?na, una canci¨®n que ha generado El traficante, donde hablamos de las drogas", explica B¨¢rbara Granados. Y hay referencias, tambi¨¦n, a la pol¨ªtica: "?Es que nos cuelan cada cosa!", dice Molins. Y a la precariedad de los artistas, y a la homosexualidad, y a la salud...
Y tambi¨¦n hay huecos para n¨²meros dif¨ªciles de calificar, como uno en el que peque?os trastos y cajas de m¨²sica creadas por Granados toman la batuta del espect¨¢culo, o cuando los dos m¨²sicos se quedan solos en el escenario, o cuando una escena del Mercader de Venecia, del mism¨ªsimo Shakespeare, se embadurna de blues. Todo cabe. En catal¨¢n, en castellano, en italiano o en ingl¨¦s. Y todo desprende buen rollo. "Nos lo pasamos muy bien y creo que esta energ¨ªa que tenemos la traspasamos al p¨²blico", dice la protagonista.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.