¡°El cine solo puede ser disidente¡±, defiende Costa-Gavras

Ante la imposibilidad de rodar en una Am¨¦rica Latina infestada de reg¨ªmenes totalitarios una pel¨ªcula que denunciaba la dictadura de Chile y sus desaparecidos, Constantin Costa-Gavras propuso a la Universal rodar la pel¨ªcula en Barcelona. Un equipo de la productora norteamericana se desplaz¨® a la capital catalana. Era febrero de 1981 y su estancia coincidi¨® con una inopinada entrada en el Congreso de los Diputados de un teniente coronel de la Guardia Civil, Antonio Tejero, proclamando un golpe de Estado. P¨¢nico de la Universal y decisi¨®n de llevar el rodaje de la futura Desaparecidos, uno de los filmes m¨¢s populares del director franco-griego, a M¨¦xico.

La an¨¦cdota la desvel¨® el propio Costa-Gavras (Atenas, 1933), firme creyente de que ¡°el cine s¨®lo puede ser disidente¡±, durante sus palabras de agradecimiento por el XXIX Premio Internacional Catalu?a, que ayer por la tarde recibi¨® de manos del presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont. ?ste, con sutileza, aprovech¨® el acto en el Sal¨® Sant Jordi del Palau de la Generalitat para resaltar de las virtudes del cineasta su compromiso en denunciar ¡°los abusos de los Estados¡±, a veces ¡°t¨¦cnicamente democr¨¢ticos, pero que se burlan de las libertades¡±, en lo que podr¨ªan ser veladas referencias a las actuales tensiones de su gobierno con el Estado espa?ol.

Padre de algunas de las mejores pel¨ªculas pol¨ªticas de todos los tiempos (Z, La confesi¨®n, Estado de sitio¡­), Costa-Gavras hizo, coherente, un discurso comprometido y combativo. ¡°Me ha ense?ado la cr¨ªtica profunda y la mirada de la experiencia compleja¡±, reconoci¨® el soci¨®logo norteamericano Richard Sennett, que glos¨® su figura como miembro del jurado que le otorg¨® los 80.000 euros y una escultura de Antoni T¨¤pies.

El director de La caja de m¨²sica y El capital volvi¨® a demostrarlo. El punto de mira de su discurso de aceptaci¨®n fue esa Europa que a pesar de ¡°la condici¨®n modesta de mi pa¨ªs y mi familia que hac¨ªa que no tuviera ninguna posibilidad de llevar a cabo mi ilusi¨®n¡±, refiri¨¦ndose a su Grecia natal, le acab¨® permiti¨¦ndoselo en Francia. Una Europa, sin embargo, ¡°capaz de crear lo mejor y perpetuar lo peor¡± y que est¨¢ gestando su unidad ¡°amamantada con un esp¨ªritu mercantilista¡±. Am¨¦n de los dominadores pol¨ªticos y econ¨®micos, alert¨® de la presencia de ¡°estos nuevos depredadores digitales que se aprovechan de la vulnerabilidad de una Europa en manos de los funcionarios¡±. Sin tapujos, Costa-Gravas cit¨® a Netflix, Amazon y Google, que gozan de ¡°total libertad para controlar e imponer criterios culturales¡±. Bajo la premisa de que ¡°las obras del esp¨ªritu no son como las dem¨¢s¡±, Costa-Gravas hizo un llamamiento a la revuelta por la excepci¨®n cultural en Europa ante las negociaciones comerciales con Estados Unidos: ¡°La cat¨¢strofe est¨¢ en marcha, por eso la guerra debe continuar¡±.

Capital en una sociedad cada vez m¨¢s audiovisual donde ¡°cada media hora te muestran la evoluci¨®n de la bolsa y se crea un personaje medi¨¢tico¡±, el cine (el suyo, declar¨®, busca ¡°emocionar¡±) ¡°s¨®lo puede ser disidente¡± y pidi¨® que se ense?e en las escuelas, ¡°como la filosof¨ªa o el arte, para aprender a interpretarlo y escogerlo¡±.

¡°Su mirada cr¨ªtica del mundo y su compromiso social, esa c¨®lera por la injusticia y su admiraci¨®n por los hombres justos, nos interpela, conmueve y sacude¡±, dijo Puigdemont, que a partir de ah¨ª fue dejando mensajes casi subliminales: ¡°Costa-Gavras nos habla del abuso del Estado, de esa mal invocada muchas veces raz¨®n de Estado¡±, que se apoya en ¡°farsas judiciales, regresiones de las libertades o golpes de Estado... Y nadie puede decir que eso sean cosas del pasado o de pa¨ªses en v¨ªas de desarrollo¡±. En su opini¨®n, esos marcos pol¨ªticos ¡°est¨¢n m¨¢s cerca de lo que uno se pueda imaginar, reg¨ªmenes totalitarios que se han refinado mucho¡±. Y estrech¨® m¨¢s el cerco: en algunos casos son ¡°Estados t¨¦cnicamente democr¨¢ticos pero que se burlan de las libertades¡±. En esa l¨ªnea, Puigdemont le agradeci¨® su ¡°compromiso social y pol¨ªtico para desenmascarar los Estados y los sistemas que los amparan¡±. Por la ma?ana, en declaraciones a TV-3, Costa-Gavras afirm¨® que ¡°la situaci¨®n catalana es complicada, pero Madrid deber¨ªa permitir votar¡±.