¡°La huelga no va a estropearme la ilusi¨®n de ir a Escocia¡±
Algunos pasajeros llegan con siete horas de antelaci¨®n por miedo a que los parones en los controles de accesos les hagan perder sus vuelos
Lourdes Mal¨¦ y su hija Anna, de 17 a?os, decidieron hace 10 d¨ªas que este mes de agosto se iban a conocer Edimburgo (Escocia). ¡°El a?o pasado fue la primera vez que hicimos un viaje madre e hija. Nos encant¨® y este a?o queremos repetirlo¡±, sonr¨ªe Lourdes. El vuelo part¨ªa ayer del Aeropuerto de Barcelona-El Prat a las 17.40 horas. Las dos viven en Casserres (Barcelona) un peque?o pueblo cerca de Berga, a 107 kil¨®metros del aeropuerto. ¡°Ninguna huelga iba a estropearnos la ilusi¨®n de visitar Escocia y, por eso, a las diez y media hemos emprendido el viaje hacia Barcelona¡±, concreta Lourdes. A las 12.15 horas, madre e hija comienzan a caminar por el entramado de cintas que da acceso a los controles de seguridad. ¡°Yo tambi¨¦n soy empresaria, tengo una peque?a f¨¢brica de muelles, y nunca he pagado 900 euros a mis empleados, ni he obligado a trabajar a alguien 16 horas¡±, se solidariza Lourdes con los vigilantes.
Unos vecinos de Matar¨® y dos de sus hijas miran el control desde lejos. ¡°Mi hijo se va a Chicago a pasar nueve meses para seguir estudiando arquitectura¡±, informa la madre sin perder de vista los arcos de control. El joven recoge sus pertenencias de las bandejas del esc¨¢ner de metales poco despu¨¦s de las 11.00 horas. Deambula por dentro de la terminal hasta las 16.00 horas que es cuando tiene previsto salir su avi¨®n. ¡°Hemos venido con tiempo porque no estamos dispuestos a perder el dineral que cuesta el billete¡±, afirma la madre. ¡°Cada uno tiene derecho a mejorar sus condiciones laborales pero me extra?a que los vigilantes se enroquen despu¨¦s de la propuesta de la Generalitat y Eulen¡±, polemiza el padre de familia.
Miriam Jim¨¦nez tiene 25 a?os y corre por la terminal 1 con la maleta de mano preparada. ¡°Estoy deseando llegar a Ibiza. Llevo todo el a?o ahorrando para estos d¨ªas que s¨®lo har¨¦ playa y fiesta¡±, sostiene. Jim¨¦nez atraviesa el control poco despu¨¦s de las 11.30 horas. Su vuelo no sale de Barcelona hasta las 17.00 horas.
¡°Hoy es el d¨ªa que menos colas se est¨¢n acumulando¡±, explica el azafato de tierra de una compa?¨ªa mientras se queja a las televisiones de que siempre acaba saliendo en los planos de c¨¢mara.
Corriendo por los pasillos se ve llegar a Victoria ?lvarez, la amiga de Jordi Pujol Ferrusola que aparece en las pol¨¦micas grabaciones del restaurante La Camarga. Aunque parezca sorprendente, tiene que coger un vuelo a Suiza e intenta solucionar un problema con la compa?¨ªa. Minutos m¨¢s tarde, atraviesa los arcos de control sin problemas.
Las colas siguen sin acumular demasiada gente. De hecho, hay muchos momentos donde la oficina de devoluci¨®n del impuesto del IVA genera colas mucho m¨¢s largas. Agentes de los Mossos d¡¯Esquadra y de la Guardia Civil intercambiaban saludos por los pasillos.
Por una de las puertas de la terminal 1 aparece un joven vestido con un traje de torero. Un disfraz muy poco conseguido. Tras ¨¦l, una joven ataviada con un ropaje de flamenca. Sus amigos le han ocultado el destino al que se dirijen ataviados de esta guisa. Es la enesima despedida de soltero que atraviesa los arcos. Los controladores ni se inmutan.
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