Una suerte dispar
Los sindicatos denuncian que las rebajas fiscales no repercuten en el sueldo de los trabajadores de los bingos
El bingo ha cambiado mucho desde que se legaliz¨® en 1977 en Espa?a. El desarrollo tecnol¨®gico ha favorecido la aparici¨®n de nuevas f¨®rmulas de juego, lo que ha hecho caer en picado el negocio en las salas. En la Comunidad de Madrid hoy existen un 59% menos de locales que en 1995. Para evitar m¨¢s cierres, el Gobierno regional ha puesto en marcha diferentes medidas en los ¨²ltimos a?os. Los sindicatos sostienen que esas actuaciones han servido para aumentar los beneficios de las empresas, pero que los trabajadores sufren cada vez una mayor precariedad. Los empresarios niegan haber ampliado m¨¢rgenes, pero reconocen que sus empleados ¡°han podido perder poder adquisitivo¡±.
El 12 de septiembre se reunir¨¢ la comisi¨®n paritaria para iniciar las negociaciones del nuevo convenio laboral, en ultraactividad desde enero. El bingo es el ¨²nico subsector del juego que lo tiene. Los trabajadores demandan recuperar poder adquisitivo. Juan Mart¨ªnez, de CC. OO., confirma que este ha ca¨ªdo un 6,7% en la ¨²ltima d¨¦cada. ¡°El salario base medio de un empleado de bingo es de 832 euros. Con los complementos, la nocturnidad entre ellos, alcanza los mil¡±. No es su ¨²nica queja. Seg¨²n un informe elaborado por UGT y CC. OO., los bingos han aumentado los m¨¢rgenes empresariales un 63% desde 2008 gracias a varias razones, principalmente por la bajada de impuestos.
¡°No ganamos un 63% m¨¢s. De hecho, en los ¨²ltimos diez a?os los bingos han perdido un tercio de su facturaci¨®n¡±, especifica Jos¨¦ Luis Merino, secretario general de la Asociaci¨®n de Empresarios de Juegos Autorizados (Aseju). Reconoce que los trabajadores han podido perder poder adquisitivo, pero asegura que la rebaja fiscal no ha mejorado los m¨¢rgenes empresariales. ¡°Se ha aumentado la cuant¨ªa de los premios (hasta el 75% de las ventas, cinco puntos m¨¢s) y hemos tenido que realizar una gran inversi¨®n en equipos por la implantaci¨®n del bingo din¨¢mico¡±, explica Merino. En su opini¨®n, esta modalidad del juego en la que se alternan los tradicionales cartones con otros de soporte electr¨®nico, ¡°puede paliar la crisis que sufre el sector¡±. La medida fue aprobada en febrero de 2016, aunque entr¨® en vigor el pasado mayo.
Cierre de salas
Los sindicatos explican que el aumento de los beneficios empresariales tiene varias causas. Una de ellas es la incorporaci¨®n de juegos online y el cierre de salas, que ha repartido los clientes entre el resto de establecimientos. El Bingo Canoe, el m¨¢s importante de la capital, confirma que en 2016 recibi¨® 450.000 visitas, un 12% m¨¢s que el a?o anterior. En 2008, la regi¨®n contaba con 61 bingos y 2.000 empleados; hoy son 43 y 1.196 trabajadores seg¨²n datos de los sindicatos. Estos critican que las salas que permanecen abiertas cuentan con un 18% menos de personal, por lo que es necesario doblar esfuerzos con jornadas de hasta 12 horas.
En su informe, sin embargo, UGT y CC. OO. atribuyen al aumento de las ganancias empresariales a la rebaja fiscal. Tradicionalmente las tasas eran del 22%. Esto quiere decir que, por cada 100 euros jugados, la normativa exig¨ªa destinar 22 a impuestos y 63 a premios. Los 15 euros restantes eran ingresos brutos, de los que el empresario deb¨ªa detraer gastos. En 1995, cuando se transfiere la competencia del juego a las comunidades aut¨®nomas, Madrid subi¨® la tasa al 24%, pero volvi¨® a situarla dos puntos por debajo en 2008. La medida no solucion¨® el problema, as¨ª que se tomaron otras alternativas, como aumentar el porcentaje destinado a premios hasta el 70% y rebajar gradualmente la carga impositiva. Ahora, aquellos locales que cumplan el objetivo de vender un 10% de cartones virtuales del nuevo bingo din¨¢mico cada trimestre solo tendr¨¢n que pagar un 6% en impuestos.
¡°Un cart¨®n vale dos euros. El cambio fiscal significa que ahora el empresario ganar¨¢ m¨¢s por cada juego¡±, insiste Mart¨ªnez, de CC. OO. Explica que el porcentaje destinado a premios contin¨²a siendo del 70% (1,40 euros por cart¨®n), pero que el 30% restante se reparte diferente. Si antes hab¨ªa que pagar 24 c¨¦ntimos a la Administraci¨®n por cada cart¨®n, ahora solo hay que abonar 12, por lo que los beneficios por cada juego pasan de 36 a 48 c¨¦ntimos. ¡°Los trabajadores hemos estado de acuerdo en bajar los impuestos, lo que sucede es que los empresarios no han trasladado al empleado el aumento de sus beneficios¡±, lamenta Enrique Cavada, de UGT. La rebaja fiscal tambi¨¦n ha supuesto una merma para la Administraci¨®n. Si en 2007 la Comunidad recaud¨® 175 millones de euros por esta tasa, en 2016 el montante descendi¨® hasta los 43 millones (un 75% menos).
Contratos por horas y propinas de 700 euros
Los empleados de los bingos madrile?os se quejan de que cada vez trabajan m¨¢s debido al aumento de alternativas en el juego, pero que no ven recompensado su esfuerzo. "La crisis nos oblig¨® a rebajarnos el sueldo un 30%", revela Francisco Javier Pecharrom¨¢n, empleado del Bingo Canoe. Y a?ade: "Los nuevos contratos se est¨¢n realizando por horas, lo que aumenta la precariedad laboral". La Direcci¨®n General de Trabajo de la Comunidad ha tramitado desde 2009 un total de 19 expedientes sancionadores. Ha impuesto 15 sanciones, 12 de ellas por vulnerar obligaciones en materia laboral. Pecharrom¨¢n denuncia que la mayor¨ªa de bingos no respeta los horarios: se aumenta la jornada y no se sustituye por libranzas. "Recibo cada mes unos 700 euros extras en propinas, aunque en la mayor¨ªa de bingos no llegan a los 300. Los empresarios lo quieren usar como una compensaci¨®n, pero las propinas no tienen nada que ver con la retribuci¨®n".
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