Fantas¨ªa musical de altura en Vic

Un italiano nacido en Alemania tocando con unos catalanes que ingenian y construyen sus propios instrumentos mec¨¢nicos, fruto de una imaginaci¨®n maquinal. Un cuarteto de cuerda que junto a un grupo de electr¨®nica ganan 10.000 euros del Premio Puig Porret para desarrollar un montaje que estrenar¨¢n en 2.019 sobre Le¨®n Theremin, inventor del instrumento que lleva su apellido y que se toca sin tocarlo. Un valenciano de Puerto Sagunto que trajo a Vic la brisa del mediterr¨¢neo en su versi¨®n m¨¢s ¨ªntima.

Vinicio Capossela y Cabo San Roque, el Quartet Brossa y los Pinker Tones y, finalmente, Alberto Montero fueron alguno de los nombres que ayer iluminaron la capital de Osona en la primera jornada completa de la 29? edici¨®n del Mercat de M¨²sica de Vic, que hasta el domingo har¨¢ sonar en la ciudad las m¨²sicas m¨¢s dispares.

Los escenarios del Mercat son nueve: Pla?a Major, Sucre, Pla?a M¨¤rtirs (con programaci¨®n gratuita) y Teatre Atl¨¤ntida, Auditori Atl¨¤ntida, Carpa Vermella, Carpa Negra, Jazz Cava y Pasternak (con entrada de pago).

]Marc Lloret, director del certamen, no quiso apuntarse a la moda de las programaciones de autor para defender las propuestas que acoge el certamen, y llanamente declar¨® que ¡°hemos hecho una programaci¨®n desacomplejada que no reh¨²ye las propuestas m¨¢s comerciales, que no presume de artistas raritos,que por lo tanto no juzga calidades, cosa que corresponde al p¨²blico y que, en definitiva, busca la variedad y la profesionalidad para apoyar y fortalecer unas propuestas musicales que en un mercado musical tan fr¨¢gil como el nuestro necesitan apoyo. Y lo necesitan casi todas¡±. La programaci¨®n, que arranc¨® el mi¨¦rcoles y ma?ana tiene su d¨ªa m¨¢s pleno de actuaciones, se ha establecido, indic¨® Lloret, sobre unas 700 propuestas presentadas al Mercat, y de ellas fue la producci¨®n auspiciada por el propio certamen entre Capossela y Cabo San Roque la que abri¨® oficialmente la muestra.

Y fue fascinante. James Whale no podr¨ªa haber tenido mejor escenograf¨ªa y decorados para construir el laboratorio del doctor Frankenstein en su pel¨ªcula de los a?os treinta. En un escenario iluminado por la penumbra y s¨®lo matizado por puntos de luz dispersos en el claroscuro, una ingente cantidad de instrumentos inventados, m¨¢quinas sonoras con alma de lata y metal construidas con materiales oficialmente innobles que no fueron concebidos para crear m¨²sica, dieron una nueva vida, como de tierno aut¨®mata, al repertorio de Capossela. ?l estaba tan feliz mientras cantaba como un ni?o en la noche de Reyes, rodeado por aquellos ingenios de alma po¨¦tica y huesos rescatados del olvido que le permit¨ªan redescubrir sus canciones, miradas pintorescas a la m¨²sica popular mediterr¨¢nea. En el teatro Atl¨¢ntida no se sab¨ªa que produc¨ªa m¨¢s gozo, si mirar o escuchar.

Poco despu¨¦s Alberto Montero despleg¨® su cancionero de fr¨¢giles paisajes emocionales en el que era su primer concierto con tr¨ªo de cuerda, bater¨ªa, `piano y guitarras, un nuevo formato para explorar sus canciones m¨¢s aptas para tales arreglos. Quedas declaraciones de intimidad y rinc¨®n personal pese a todo nada ensimismado. Para la memoria, Ayer en la tierra, un tierno y soleado pellizco. Y por lo que hace a la jornada de hoy vienes, la programaci¨®n del Mercat ofrece espacio para que artistas como Christina Rosenvinge, Dani Nel¡¤lo o Nuria Graham presentasen, entre otros, sus nuevos trabajos. De igual manera Tita Parra, nieta de Violeta Parra, presentar¨¢ un espect¨¢culo que celebra el centenario del nacimiento de la ilustra cantautora. Todo ello combin¨¢ndose escenarios distribuidos por el casco urbano de Vic, unos de pago y otros de car¨¢cter gratuito donde la fiesta iba a ser protagonista. En una ciudad que desde hace 29 a?os se hace m¨²sica en el quicio entre el verano y el oto?o.