La pareja del pantano de Susqueda fue asesinada

Casi desde el principio, la hip¨®tesis de los Mossos d¡¯Esquadra fue que los cad¨¢veres de Paula Mas y Marc Hern¨¢ndez estaban hundidos en las aguas turbias del pantano de Susqueda (Girona). La pareja sali¨® el 24 de agosto con la intenci¨®n de pasar un d¨ªa all¨ª y hacer una excursi¨®n en kayak. Luego dormir¨ªan en el coche. Pero a media ma?ana se perdi¨® su pista. Tres d¨ªas despu¨¦s, apareci¨® el kayak flotando en el pantano. Al d¨ªa siguiente, el coche de Paula, hundido a siete metros de profundidad. El martes los Mossos encontraron el cad¨¢ver de la joven. El nivel del agua del pantano hab¨ªa bajado entre dos y tres metros, y dejaba entrever el cuerpo atrapado entre unas rocas. No muy lejos, hallaron a Marc, flotando, con una mochila colgada llena de piedras. Ambos estaban desnudos y con signos de violencia, seg¨²n fuentes policiales. Llevaban 33 d¨ªas desaparecidos.

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El cad¨¢ver de Marc ten¨ªa heridas en el t¨®rax y en las manos. La autopsia, que se practicar¨¢ ma?ana, deber¨¢ confirmar si son de arma blanca. Paula presentaba una lesi¨®n en la cabeza, que es compatible con un golpe con un objeto contundente, con un ataque con cuchillo o incluso con un arma de fuego, seg¨²n fuentes judiciales. Los agentes sospechan que la joven tambi¨¦n llevaba colgada una mochila que se desprendi¨® del cad¨¢ver con el paso de los d¨ªas. Los Mossos la buscan bajo el agua.

La pareja, ella de 21 y a?os y el de 23, hac¨ªa unos dos a?os que sal¨ªan. Aquel d¨ªa 24 les dijeron a sus familias y amigos que se iban a pasar un d¨ªa en la naturaleza. El plan era dormir en el coche de Paula, un Opel Zafira, que luego apareci¨® en el pantano, con las llaves en el contacto, la primera marcha puesta, la ventana del conductor abierta y el freno de mano quitado. Los asientos delanteros estaban tirados hacia delante, y los de detr¨¢s, abatidos. Tambi¨¦n hab¨ªa una especie de colchones. Todo estaba dispuesto para pasar la noche en el coche.

Los padres de la joven empezaron a preocuparse al ver que ella no respond¨ªa a los mensajes ni a las llamadas el mismo d¨ªa 24. Paula era, seg¨²n su entorno, una persona muy responsable con su familia y con su trabajo, en la pizzer¨ªa Carpi de Vilassar de Mar (Barcelona), donde no hab¨ªa faltado ni un solo d¨ªa. Los Mossos saben seguro que a las nueve y media de la ma?ana a¨²n estaban vivos porque se les vio a los dos sacando dinero en un cajero de Cellera de Ter. Luego entraron en el restaurante La Parada del Pasteral y tomaron algo. La ¨²ltima conexi¨®n del tel¨¦fono m¨®vil de Marc es a las diez de la ma?ana. El de Paula, dos horas y media m¨¢s tarde.

Tres d¨ªas despu¨¦s de la desaparici¨®n, el 27, varios testigos avisaron a la polic¨ªa de que en el pantano, que tiene m¨¢s de 460 hect¨¢reas de superficie, se ve¨ªa un kayak flotando, boca abajo. Cuando lo recuperaron, los Mossos comprobaron que estaba desinflado, con los tapones quitados y rajados. Al d¨ªa siguiente, no muy lejos, los bomberos encontraron el coche. Estaba a unos siete metros de profundidad, contra unas rocas que impidieron que se hundiese m¨¢s, hasta los 33 metros de profundidad que tiene la zona donde lo hallaron. En el asiento del copiloto hab¨ªa una piedra. Los Mossos no tienen claro si entr¨® o si alguien la puso all¨ª adrede.

El hallazgo del coche confirm¨® la sospecha: el veh¨ªculo no cay¨® por accidente, alguien lo tir¨®. ?Pero qui¨¦n? ?Y por qu¨¦? La polic¨ªa catalana ha escudri?ado durante un mes la vida de los j¨®venes y su entorno en busca de rencillas o cualquier otra cosa que pudiese suponer un m¨®vil que explicase la desaparici¨®n. Encontraron unas notas de Paula personales, sobre su relaci¨®n sentimental, pero no aportaron ninguna pista sobre lo sucedido. El entorno de Marc, que hab¨ªa acabado un grado de t¨¦cnico forestal y que en la actualidad buscaba trabajo, tampoco arroj¨® datos sospechosos. A la vez, rastrearon incansables el pantano. Los buzos palpaban casi a oscuras las revueltas aguas en busca de los cad¨¢veres de la pareja.

La principal hip¨®tesis hasta ahora es que Paula y Marc se encontraron con la persona o las personas no adecuadas, seguramente unos desconocidos, que los mataron y los tiraron al pantano. Adem¨¢s, los cargaron con piedras con la intenci¨®n de que sus cuerpos nunca m¨¢s salieran a la superficie.