Un Gris diverso y una Blanchard fundamental dialogan en el Thyssen de M¨¢laga

Un Juan Gris m¨¢s diverso, plural y polimorfo de lo que se suele considerar y una Mar¨ªa Blanchard que se revela como figura fundamental de la segunda etapa del cubismo surgida a partir de 1914 dialogan desde hoy en la nueva exposici¨®n temporal del Museo Carmen Thyssen de M¨¢laga.

M¨¢s de 60 piezas procedentes de una veintena de colecciones p¨²blicas y privadas dan idea de este cruce de miradas entre Gris y Blanchard, adem¨¢s de mostrar la difusi¨®n internacional de este segundo cubismo y, en un tercer apartado, recoger c¨®mo fue recibido por artistas espa?oles.

"Blanchard fue una gran pintora, pero trabaj¨® con grandes dificultades", e incluso tuvo que superar serias dudas sobre su obra del marchante Kahnweiler, "que lleg¨® a acusarle de plagiar a Gris", ha resaltado hoy Lourdes Moreno, directora art¨ªstica del Museo Carmen Thyssen y comisaria de la exposici¨®n junto a Eugenio Carmona.

Por ello, en la muestra se descubre a una pintora "de gran calidad y audacia" que "sostiene la mirada de la obra de Gris al mismo nivel", aunque en un periodo muy corto, desde que en 1916 se instala en Par¨ªs hasta principios de los a?os 20, cuando evoluciona hacia otro estilo.

Tambi¨¦n se observa un Juan Gris "menos compacto y m¨¢s polimorfo, que permite distintas interpretaciones en su obra", ha a?adido Moreno.

Este cubismo internacional sigue teniendo a Picasso como referente, "pero ya no es tan activo en esta segunda familia cubista", a la que pertenecen nombres como los de Albert Gleizes, Jean Metzinger o el escultor Jacques Lipchitz.

El recorrido se completa por la interpretaci¨®n de este cubismo por autores espa?oles como Salvador Dal¨ª, Moreno Villa, Benjam¨ªn Palencia, Joaqu¨ªn Peinado o Manuel Angeles Ortiz.

Eugenio Carmona ha destacado el momento hist¨®rico en el que se crean estas obras, en plena Primera Guerra Mundial, en cuyas batallas est¨¢n muriendo cientos de miles de j¨®venes, pero estos artistas, en condiciones absolutamente precarias, deciden seguir adelante con este cubismo, "que era el futuro".

"?sta es una exposici¨®n con la que se genera conocimiento, en un momento en el que se est¨¢ hablando mucho de este segundo cubismo en numerosos museos europeos", ha se?alado Carmona, que se ha felicitado de que, cuando el Museo Carmen Thyssen "llama a la puerta de grandes museos, ¨¦stos responden y prestan obras".

As¨ª se ha reunido una n¨®mina de prestadores en la que est¨¢n el Centro Pompidou y el Museo Picasso de Par¨ªs, el Kunstmuseum de Basilea, el Centro de Arte Reina Sof¨ªa, el Museo Thyssen-Bornemisza, el IVAM de Valencia, la Fundaci¨®n Gala-Salvador Dal¨ª, los Museos de Bellas Artes de Asturias y de Bilbao o el Museo Patio Herreriano de Valladolid, entre otros.

Para Carmona, Mar¨ªa Blanchard "necesitaba ser situada justo en medio de donde estaba", porque a veces cuando se le dedica una retrospectiva "se le presenta sola y se le a¨ªsla, cuando hay que confrontarla con gente de su tiempo".

"Severini contaba que los artistas empezaban todas sus discusiones en un bistrot de Montparnasse, cerca de la casa de Lipchitz, pero terminaban todas las noches en el estudio de Mar¨ªa Blanchard. ?se era el lugar donde se acrisolaba todo", ha a?adido el comisario.