Conocer lo que se come sienta mejor

Ser consciente de lo que uno come, de los sabores del plato que tiene delante, de sus componentes y su textura, puede mejorar notablemente la respuesta del organismo a esa comida. As¨ª lo confirma un estudio realizado por investigadores del servicio del aparato digestivo del hospital Vall d'Hebron de Barcelona en colaboraci¨®n con el prestigioso restaurante El Celler de Can Roca. La investigaci¨®n demuestra que una intervenci¨®n educativa previa a la ingesta de un determinado plato hace que la comida siente mejor al organismo.

Comandados por el doctor Fernando Azpiroz, jefe del servicio de aparato digestivo del hospital, y Josep Roca, los investigadores realizaron pruebas a 28 individuos sanos, que dividieron en dos grupos. El primer d¨ªa, los participantes tomaron una sopa de zanahoria, puerro y cebolla elaborada por los hermanos Roca y un poco de pan. Desconocedores de c¨®mo estaba hecha esa comida y los ingredientes que se hab¨ªan empleado, los participantes respondieron tambi¨¦n, antes y despu¨¦s de la ingesta de estos alimentos, a un cuestionario para medir la sensaci¨®n de plenitud, hambre y saciedad y tambi¨¦n el nivel de bienestar digestivo y el estado de ¨¢nimo.

Luego, uno de los grupos recibi¨® una intervenci¨®n educativa sobre los cinco sabores b¨¢sicos (dulce, salado, umami, amargo y ¨¢cido), los componentes de la sopa, las texturas. El otro grupo, sin embargo, realiz¨® tambi¨¦n pruebas de sabores, pero en concentraciones muy dilu¨ªdas que los hac¨ªan casi inapreciables, y no se les explic¨® nada sobre los elementos de la sopa y los ingredientes.

As¨ª, con una intervenci¨®n educativa real y otra ficticia, los investigadores volvieron a servir otro d¨ªa la misma comida a los dos grupos de participantes. El resultado fue que las personas a las que se les hizo una intervenci¨®n educativa real, mejoraron sus sensaciones de bienestar y estado de ¨¢nimo y tambi¨¦n sintieron m¨¢s saciedad y plenitud tras la comida. En el grupo de control, los par¨¢metros analizados apenas variaron.

¡°Estos resultados se podr¨¢n aplicar a pacientes que tienen problemas para comer [como los pacinentes oncol¨®gicos, por ejemplo], porque se le podr¨¢ hacer la comida que les apetezca m¨¢s y mejorar el d¨¦ficit de ingesta; tambi¨¦n a pacientes qcon problemas alimentarios, porque podremos cambiarle la relaci¨®n de saciedad y satisfacci¨®n; y tambi¨¦n a pacientes que tienen molestias al comer sin causa aparente, porque a base del proceso educativo podemos hacerle m¨¢s f¨¢cil la ingesta¡±, valor¨® ayer el doctor Azpiroz.

Los investigadores anunciaron que este es el primero de una serie de estudios que est¨¢ llevando a cabo el servicio del aparato digestivo del hospital y en los que los hermanos Roca est¨¢n dispuestos tambi¨¦n a colaborar. Esta investigaci¨®n, en la que han colaborado como voluntarios la modelo Judith Masc¨® y el meteor¨®logo Tom¨¢s Molina, se ha publicado en la revista cient¨ªfica?Neurogastroenterology & Motility.