¡°Tras el 21 de diciembre hay que resta?ar las heridas¡±

Jos¨¦ Rosi?ol (Ripollet, Barcelona, 1970) es el nuevo presidente de Societat Civil Catalana (SCC) en sustituci¨®n de Mariano Gom¨¤. Rosi?ol es miembro de SCC desde su fundaci¨®n en 2013.

Pregunta. ?Por qu¨¦ ha habido un cambio en la presidencia justo cuando han hecho las manifestaciones m¨¢s masivas?

Respuesta. Somos voluntarios y en principio estamos un a?o en el cargo. Gom¨¤ me dijo que estaba un poco cansado y me propuso sucederlo. Ha sido un relevo muy tranquilo y natural.

No somos un partido y no participaremos en m¨ªtines.? Pero s¨ª haremos un gran acto en favor de la convivencia antes de la campa?a"

P. ?Van a participar en la campa?a electoral?

R. No, no somos un partido. No iremos a ning¨²n m¨ªtin, pero llamaremos a participar. Pero antes de la campa?a haremos un acto en favor de la convivencia. El 21-D no se acaba todo: a partir de ah¨ª hay que resta?ar heridas. El escenario es complejo, pero hay que dar el primer paso. Debemos ser protagonistas en el acercamiento y la reconciliaci¨®n. Hay que apostar por escenarios de convivencia y reconstrucci¨®n.

P. El vicepresidente de la entidad ?lex Ramos, militante socialista, va, sin embargo, en las listas del PSC. ?Eso no es entrar en campa?a?

R. Va en un puesto simb¨®lico de la candidatura. Si fuera en los de salida deber¨ªa darse de baja. Lo que queremos es que el Parlament visualice la foto real de la sociedad catalana. El h¨¢ndicap es que Catalu?a no tiene ley electoral propia y el resultado se decanta a postulados m¨¢s nacionalistas. El 27-S (las ¨²ltimas auton¨®micas) el 47% depar¨® una mayor¨ªa parlamentaria.

Hay casos lacerantes y se ha construido una cosmovisi¨®n alejada de la realidad de Espa?a en la escuela"

P. Pero la LOREG rige en toda Espa?a.

R. S¨ª, tambi¨¦n perjudic¨® en su d¨ªa a Izquierda Unida: tuvo dos millones de votos y solo logr¨® entre 5 y 10 diputados. No digo que vayamos a cuestionar una eventual mayor¨ªa independentista. Lo que queremos es que si gana act¨²e bajo el marco constitucional.

P. En la ¨²ltima campa?a reclamaron ante la Junta electoral la retirada de esteladas en los Ayuntamientos por vulnerar, a su juicio, la neutralidad institucional. ?Lo van a repetir?

R. Lo hemos aparcado. Nuestro objetivo es fomentar la convivencia y eso no contribuy¨® porque tension¨® a¨²n m¨¢s las cosas. Son las instituciones p¨²blicas las que tienen que corregir esas disonancias de poner banderas partidistas. Son ellos los que tienen que hacerlo y no nosotros. En nuestra primera manifestaci¨®n (el d¨ªa 8 de octubre) hablamos de seny y en la segunda (el 29) de convivencia. Nos preocupa la reconciliaci¨®n: debemos asumir que todos somos catalanes con los mismos derechos y libertades piensen lo que piensen.

P. ?Contribuye a la convivencia que Societat Civil facilite formularios para que se denuncien casos de adoctrinamiento en los colegios?

R. Recogemos quejas de gente que no saben d¨®nde vehicularlas. Hay casos aislados que son lacerantes y denunciables como poner una estelada en un colegio. Eso est¨¢ fuera de lugar. Y despu¨¦s existe la construcci¨®n de una cosmovisi¨®n, de un marco mental, muy de espaldas a la realidad espa?ola y favorable al independentismo. Solo hace falta coger los libros de texto. Es as¨ª. No estamos descubriendo la p¨®lvora.

P. Si el 21-D vuelve a ganar el independentismo por mayor¨ªa absoluta ?Qu¨¦ soluci¨®n hay?

R. Si ganan, deben ser conscientes de que el presidente elegido lo debe ser de todos. La clave no es el qu¨¦ sino el c¨®mo. Volveremos al punto de partida, pero dentro del marco constitucional se puede hacer de todo. El Tribunal Constitucional ya lo estableci¨® as¨ª. ?Un refer¨¦ndum como en Escocia? No somos un partido. Nuestro objetivo es resta?ar heridas. La crisis econ¨®mica que se puede generar es tremenda y equiparable por ejemplo a Lehman Brothers.

P. ?Dan por acabado el proc¨¦s? Hay dos millones de independentistas.

R. S¨ª, del todo. Eso de saltar al precipicio cambiar¨¢. No pido que nadie deje de pensar c¨®mo piensa. Digo que se haga en el marco establecido porque si no se entra en la arbitrariedad.

P. ?Se puede resta?ar heridas con medio gobierno en la c¨¢rcel y la mitad en Bruselas?

R. Habr¨¢ un d¨ªa en que se estudiar¨¢ en los libros de historia c¨®mo una regi¨®n europea como Catalu?a con niveles culturales y nivel de vida elevado ha llegado hasta aqu¨ª. No estoy contento con ver a nadie en la c¨¢rcel. A m¨ª me incomoda que se pida en nuestras manifestaciones prisi¨®n para Puigdemont. No me motiva para nada. Josep Borrell dijo en el escenario que eso lo deciden los jueces. Nuestras manifestaciones no tienen consignas. Pero cuando Puigdemont se hace una foto con los cinco requerimientos del Constitucional ?En serio estamos jugando a esto? Se han pervertido los conceptos de la democracia.

P. ?Qu¨¦ le parece que el papel de Puigdemont en Bruselas?

R. No sabemos qu¨¦ est¨¢ haciendo, pero est¨¢ da?ando a la sociedad que dice amar y defender. Barcelona construy¨® a ra¨ªz de 1992 un prestigio de gran ciudad abierta, plural, inclusiva, abierta, moderna. Esa imagen es dif¨ªcil ganarla y f¨¢cil perderla. Hay que reconstruir la imagen de los catalanes en el conjunto de Europa.

P. ?Van a seguir convocando m¨¢s manifestaciones?

R. No, a no ser que sea estrictamente necesario. Necesitamos normalidad pol¨ªtica e institucional. Pero los dos d¨ªas de las manifestaciones me qued¨¦ maravillado. Fueron memorables. Me gust¨® mucho que la espontaneidad de la gente, que hiciera lo que le diera la gana y cantara lo que quisiera. Hubo gente que no hab¨ªa ido nunca a una manifestaci¨®n. Muchos decidieron ir los d¨ªas 6 y 7 de septiembre (cuando se aprobaron las leyes del refer¨¦ndum y de transitoriedad jur¨ªdica). Ah¨ª se fractur¨® algo muy profundo en Catalu?a.

P. Esas manifestaciones han ido seguidas, en algunos casos, de incidentes o agresiones como el 12 de octubre o en Sabadell. ?No les preocupa que sus actos atraigan o se sumen a ellos grupos de extrema derecha?

R. Claro que nos preocupan los incidentes pero la mayor¨ªa han sido aislados y al acabar las manifestaciones. Solo queremos a constitucionalistas y dem¨®cratas. Todo lo que vaya m¨¢s all¨¢ de eso lo condenamos absoluta y radicalmente. Condenamos cualquier acto de violencia y coacci¨®n y presi¨®n sea de quien sea. Eso est¨¢ fuera de nuestra ADN. Si no estaremos fuera de juego.

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