Rajoy decidir¨¢ el calendario pol¨ªtico catal¨¢n tras el 21-D

Las elecciones del 21-D no implicar¨¢n la desaparici¨®n inmediata del art¨ªculo 155 porque el d¨ªa despu¨¦s Mariano Rajoy tendr¨¢ la competencia de decidir el calendario para constituir el nuevo Parlament. En su mano estar¨¢ acelerar o demorar el escenario pol¨ªtico. Si se da un resultado ajustado entre independentistas y constitucionalistas, la elecci¨®n como diputados de los cinco exmiembros del Govern que est¨¢n en Bruselas perjudicar¨ªa a sus grupos al no poder participar en las votaciones.

El reglamento de la C¨¢mara catalana establece que corresponde al presidente de la Generalitat convocar la sesi¨®n constitutiva del Parlament en el plazo de 20 d¨ªas h¨¢biles desde la celebraci¨®n de las elecciones. Carles Puigdemont fue destituido de su cargo de president el pasado 28 de octubre, por lo que ser¨¢ el presidente del Gobierno central, Mariano Rajoy, quien decida cu¨¢ndo se celebra ese Pleno, en el que se han de elegir tambi¨¦n a los miembros de la Mesa. El plazo expira el 23 de enero, pero la elecci¨®n del d¨ªa tendr¨¢ un efecto domin¨®.

Y es que, una vez constituido el Parlament, se ha de celebrar la primera sesi¨®n de investidura en los 10 d¨ªas h¨¢biles posteriores, que requerir¨¢ mayor¨ªa absoluta (68 de 135 diputados). De no ser as¨ª, bastar¨¢ con mayor¨ªa simple (m¨¢s votos a favor que en contra) en una sesi¨®n que se celebrar¨¢ dos d¨ªas despu¨¦s. Si tampoco saliera elegido, habr¨¢ tiempo hasta cumplir los dos meses de la primera votaci¨®n y, si no, se disolver¨ªa el Parlament y Rajoy convocar¨ªa nuevas elecciones.

En condiciones normales, la constituci¨®n del Parlament no tendr¨ªa mayor trascendencia, pero s¨ª la tiene si se recuerda que se puede producir un resultado electoral ajustado entre el bloque constitucionalista y el independentista, adem¨¢s de las circunstancias que afectan al expresidente de la Generalitat y a su Gobierno destituidos.

Todos ellos, excepto la exconsejera Meritxell Borr¨¤s, se presentan a las elecciones en puestos altos de sus respectivas listas para resultar elegidos sin problemas. Sin embargo, de estos 12 futuros diputados, cinco est¨¢n huidos en Bruselas y el resto en prisi¨®n, de manera que, si no pueden ejercer sus funciones como parlamentarios, condicionar¨ªa la formaci¨®n de las mayor¨ªas necesarias para la elecci¨®n del presidente del Parlament y la votaci¨®n de la sesi¨®n de investidura del president. 12 de los 13 miembros del destituido Govern, adem¨¢s del presidente de la Asamblea Nacional Catalana, Jordi S¨¤nchez, saldr¨¢n elegidos diputados pero queda por ver si finalmente podr¨¢n ejercer sus funciones.

El reglamento del Parlament permitir¨ªa que tomaran posesi¨®n de su acta, incluso estando en prisi¨®n o en Bruselas, porque solo se exigen dos condiciones que se pueden cumplir que podr¨ªan cumplir por escrito y no de manera presencial: que presenten la credencial de que han sido elegidos y prometan o juren la Constituci¨®n o el Estatuto de Autonom¨ªa, as¨ª como la presentaci¨®n de la declaraci¨®n de actividades o bienes.

Si el Tribunal Supremo pusiera en libertad el pr¨®ximo lunes a Oriol Junqueras, los otros siete exconsejeros, adem¨¢s de a Jordi S¨¤nchez, se despejar¨ªa parte del problema para el independentismo porque podr¨ªan ejercer sus funciones como diputados, pero no as¨ª los cinco huidos a Bruselas: Puigdemont, Clara Ponsat¨ª y Llu¨ªs Puig (Junts per Catalunya), y Toni Com¨ªn y Meritxell Serret (Esquerra Republicana). Si regresaran a Espa?a ser¨ªan detenidos y encarcelados, un escenario que se empieza a barajar ya en algunos c¨ªrculos para provocar un efecto sorpresa al final de la campa?a electoral.

Si estos no regresaran de Bruselas o no quedasen en libertad los que ahora est¨¢n encarcelados, sus grupos parlamentarios quedar¨ªan menguados, por lo que se deber¨ªan plantear la renuncia al acta de diputado. En el caso de Puigdemont, resultar¨ªa su final pol¨ªtico, porque para ser candidato a presidente de la Generalitat se ha de ser diputado. En menor medida afectar¨ªa a Oriol Junqueras, que ya ha anunciado su intenci¨®n de que Marta Rovira sea la candidata a presidenta despu¨¦s de las elecciones.

El reglamento de Parlament tiene unas causas muy tasadas para delegar el voto y ninguna de ellas encaja en estos casos. Solo est¨¢ justificado por baja maternal o paternal, hospitalizaci¨®n, enfermedad grave o incapacidad.

Solo existe un precedente de un diputado electo que se encontraba en prisi¨®n en el momento de ser elegido. Fue el de Juan Carlos Yoldi, que present¨® Herri Batasuna en 1987 como candidato a lehendakari. La justicia le autoriz¨® a abandonar la prisi¨®n para acudir a la sesi¨®n de investidura con el argumento de que, de no hacerlo, se ¡°lesionar¨ªan los derechos pol¨ªticos de sus electores¡±.