La visi¨®n c¨®smica de Ernesto Neto ocupa la Fundaci¨®n Blueproject
El artista brasile?o presenta una instalaci¨®n creada para la instituci¨®n barcelonesa
¡°Cada agresi¨®n al planeta, es una agresi¨®n contra nosotros mismos. A diferencia de los occidentales, los ind¨ªgenas de la Amazonia son conscientes de la continuidad entre el cuerpo y la naturaleza, algo que intento transmitir en toda mis obras¡±. Lo afirma el artista Ernesto Neto (R¨ªo de Janeiro, 1964), autor del Pabell¨®n de los Chamanes en la ¨²ltima Bienal de Venecia, que vuelve a reivindicar las ense?anzas ind¨ªgenas en la gran instalaci¨®n que ha concebido para la Fundaci¨®n Blueproject de Barcelona.
La obra Un d¨ªa todos fuimos peces, que se puede visitar hasta el 25 de marzo, consiste en una estructura envolvente realizadas a crochet con tiras de tela en todos los tonos del azul. El resultado es una gigantesca red que recrea la forma de un pez, gracias a un sistema de contrapesos de gaudiniana memoria. El p¨²blico, convertido en Jon¨¢s, puede entrar en esta colorida ballena y utilizarla como dispositivo para la meditaci¨®n y la sanaci¨®n. Adem¨¢s de disfrutar del embriagador perfume de 80 kilogramos de clavo (utilizados para los contrapesos), puede aprovechar, seg¨²n el artista, el poder tel¨²rico de las piedras ¡ªcristal, cristal negro y amazonita¡ª encerradas en los saquitos que cuelgan en el interior de la estructura. Tal y como mostr¨® Neto durante la presentaci¨®n, el visitante se los puede aplicar sobre la cabeza, el estomago u otras partes del cuerpo que necesitan ser aliviadas y descongestionadas.
Pese a haber recibido los principales reconocimientos y a tener obras en las principales colecciones p¨²blicas y privadas de medio mundo, Neto no es uno de los muchos artistas que trufan sus obras de conceptos que traicionan en la pr¨¢ctica diaria. Por ello ha llegado a Barcelona con su obra repartida en cuatro maletas, sin transportes especiales ni seguros millonarios. ¡°Desde que vi la sala por primera vez supe que ser¨ªa una obra azul, inspirada en el cielo y el mar, en el equilibrio y el movimiento de fuerza que se plasma en la respiraci¨®n humana as¨ª como en el vaiv¨¦n de las olas¡±, ha explicado Neto, que nunca hab¨ªa tenido una muestra monogr¨¢fica en Barcelona. ¡°Cuando llegu¨¦ puse la obra como una piel sobre el suelo y luego fue cuesti¨®n de llenar sacos y hacer nudos. Es como un oc¨¦ano que lo conecta todo, lo bueno y lo malo¡±, contin¨²a el artista, recordando los peces deformados por el desastre de Fukushima, que llegaron hasta las costas de California.
Impacto visual
Neto, que no pierde ocasi¨®n para agradecer las ense?anzas del pueblo Huni Kuin, sustenta el impacto visual de sus obras con una visi¨®n c¨®smica que no se queda en el lado anecd¨®tico o superficial, sino que investiga las contradicciones entre las diversas aproximaciones cient¨ªficas al ser humano y al planeta. ¡°La ciencia occidental tan s¨®lo estudia y comprende el 20% del c¨®digo gen¨¦tico, en cambio chamanes, yoguis y otros sabios est¨¢n trabajando con el 80% que queda, explorando fen¨®menos como la telepat¨ªa, las percepciones del mundo vegetal y sobretodo la conexi¨®n del ser humano con la naturaleza¡±, ha asegurado Neto, recordando que si sumamos los antepasados directos (padres y abuelos), en 11 generaciones cada uno de nosotros re¨²ne 4.000 personas. ?l por su parte, reconoce como abuelos y referentes art¨ªsticos, el c¨¦lebre escultor Constantin Brancusi y la brasile?a Lygia Clark, que centr¨® su trabajo en redefinir la relaci¨®n conceptual y sensorial entre el hombre y el arte, a trav¨¦s de pinturas, esculturas y acciones, pensadas para sanar el cuerpo y el alma.
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