Colau crea 2.000 plazas de funcionario para reducir un 70% los interinos
El Ayuntamiento de Barcelona no convoca oposiciones desde 2012
El gobierno de la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, ha aprobado este jueves convocar oposiciones para crear 2.000 plazas de funcionario en el Ayuntamiento. Una oferta p¨²blica de empleo que el concejal de Presidencia, Eloi Badia, ha calificado de "hist¨®rica" y que permitir¨¢ "mejorar y estabilizar la plantilla municipal", porque las plazas se destinar¨¢n a cubrir jubilaciones que no se han sustituido y a reducir los interinos, que ahora son un 30% de la plantilla del consistorio.
2.421 empleos p¨²blicos en total
En total, durante el actual mandato se han aprobado plazas de oferta p¨²blica de empleo.
1.911 son las plazas de funcionario aprobadas ayer para reponer jubilaciones y reducir el peso de los interinos en un 70%.
Las ¨¢reas donde m¨¢s plazas se crear¨¢n son las de educaci¨®n; bomberos; servicios sociales; gesti¨®n y derecho y administraci¨®n; arquitectura e ingenier¨ªa, y salud.
Este a?o ya se han aprobado 41 plazas en Parcs i Jardins y 70 de Guardia Urbana.
El a?o pasado se aprobaron 293 plazas, adem¨¢s de 106 que estaban disponibles en 2015 y no se convocaron
Estas convocatorias se suman a las 1.003 incorporaciones procedentes de 23 bolsas de trabajo convocadas desde 2016, de las que 700 personas ya est¨¢n trabajando en ¨¢reas y distritos.
Con la creaci¨®n de las 2.000 plazas de funcionarios, los interinos ser¨¢n solo un 9% del total de la plantilla, de manera que su peso se reducir¨¢ en un 70%. Los interinos son personal que ocupa una plaza de funcionario sin tener esta condici¨®n, y el principal problema de esta figura, adem¨¢s de la precariedad, es que no pueden promocionar, aunque el consistorio tenga necesidad de cubrir plazas. "Es una debilidad para la organizaci¨®n no poder mover a tu plantilla", ha se?alado Badia.
En conjunto, el Ayuntamiento de Barcelona y sus empresas suman 12.000 trabajadores y las ¨²ltimas oposiciones se celebraron en 2012 (90 administrativos y una docena de psic¨®logos). Pero en los ¨²ltimos a?os la plantilla hab¨ªa adelgazado como consecuencia de la falta de convocatoria de plazas y de la Ley de Estabilidad Presupuestaria (conocida como Ley Montoro) que no permit¨ªa contratar a nuevo personal, salvo si se trataba de servicios esenciales (polic¨ªas, bomberos, maestros, por ejemplo). Una limitaci¨®n que el gobierno central fij¨® independientemente de la situaci¨®n financiera de los Ayuntamientos, tanto si est¨¢n saneados (como es el caso de Barcelona) como si no.
"La ley limit¨® la reposici¨®n de personal y adelgaz¨® a los ayuntamientos, que solo pod¨ªan recurrir a la convocatoria de bolsas de interinos para aumentar sus plantillas", ha recordado Badia. En el caso del consistorio barcelon¨¦s, con tantos interinos, ha habido casos de situaciones tan cronificadas que ha habido trabajadores que se han jubilado con esta condici¨®n. De hecho, el 70% de los interinos tienen una antig¨¹edad de entre tres y 12 a?os.
Las f¨®rmulas para poder convocar tantas plazas son dos. Una, gracias a un decreto que se ha podido hacer por la Carta Municipal que permitir¨¢ reponer las jubilaciones del a?o en curso. Y dos, la negociaci¨®n que se ha producido a nivel estatal entre el gobierno y los sindicatos que permitir¨¢ reponer a todos los interinos cr¨®nicos (contratados antes de 2005) y a la mitad de los contratados antes de 2014 que prestan servicios esenciales. Las oposiciones (que en el caso de bomberos y Guardia Urbana ya han salido) se convocar¨¢n a partir del primer trimestre de 2018 y hasta final de mandato, en 2019.
Las 2.000 nuevas plazas de funcionario no supondr¨¢n un gasto extra para el Ayuntamiento en personal, porque son empleos que ya existen. S¨ª lo ser¨¢n las mil personas que ya se han comenzado a incorporar procedentes de las 23 bolsas de trabajo que se han convocado en los ¨²ltimos dos a?os. En total, las plazas que saldr¨¢n, las ya convocadas y 106 que estaban aprobadas y no se convocaron, suman 2.421 empleos p¨²blicos.
Dos carreras en una misma administraci¨®n
Jordi Aguilar y Lorena Tella trabajan en el distrito de Sarri¨¤-Sant Gervasi y representan perfiles bien distintos dentro de la plantilla del Ayuntamiento de Barcelona. Aguilar entr¨® en el Ayuntamiento en 1982 y actualmente dirige el Departamento de Recursos Internos. Tella se incorpor¨® en enero al departamento de Comunicaci¨®n en el marco de una de las bolsas de trabajo convocadas y se plantea optar a las plazas de nuevos funcionarios si alguna encaja en su perfil.
Los dos rechazan el t¨®pico del funcionario que trabaja poco. Aguilar admite que "en cualquier gran organizaci¨®n, p¨²blica o privada, puede haber un porcentaje peque?o de gente que d¨¦ mala fama al resto", pero lanza una pregunta para desmentir el estereotipo: "?Alguien se cree que con todo lo que hace un Ayuntamiento, el presupuesto que maneja y todos los frentes que tiene... funcionar¨ªa si la gente trabajara poco?". Tella, que lleg¨® a la administraci¨®n procedente del sector privado, asegura que le sorprendi¨® "el elevado nivel de rigor" que hay en la administraci¨®n.
Aguilar empez¨® a trabajar en el Ayuntamiento cuando Tella no hab¨ªa nacido. Por raz¨®n de edad, pues, sus trayectorias son bien distintas. ?l (hijo y nieto de matarifes del matadero municipal y bisnieto de un burot en las puertas de la ciudad en el siglo XIX) ha pasado por ¨¢reas tan variopintas como Juventud (con la efervescencia de los primeros a?os de ayuntamientos democr¨¢ticos), el Distrito 11 de Sarajevo, el Consorcio de Educaci¨®n, el Icub o el Museu Blau. Ha visto pasar a seis alcaldes (Serra, Maragall, Clos, Hereu, Trias y Colau) y ha asistido "a la profesionalizaci¨®n, gerencializaci¨®n e informatizaci¨®n" de la administraci¨®n. "Ninguna ciudad podr¨ªa hacer tantas cosas con los medios de antes", reflexiona. Tella, en cambio, es nativa digital y entre sus tareas est¨¢ llevar las redes sociales del distrito. Asegura que lo suyo es el contacto de proximidad con la gente y que tiene vocaci¨®n de servicio p¨²blico.
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