Colau negocia contrarreloj el presupuesto de este a?o

El gobierno de la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, ha retomado esta semana las negociaciones con los grupos de la oposici¨®n para conseguir aprobar el presupuesto de 2018 en el pleno de finales de mes. Para cumplir este calendario deber¨ªa llevar, el martes de la semana que viene, a la comisi¨®n de Econom¨ªa, la respuesta a las alegaciones de los grupos. Con todo, Colau podr¨ªa recurrir por segundo a?o consecutivo a la cuesti¨®n de confianza para aprobar las cuentas.

El frenes¨ª en el que vive instalada la pol¨ªtica desde comienzos de curso, marcada por el refer¨¦ndum del 1 de octubre, sus consecuencias, la campa?a electoral y las elecciones del 21-D, han relegado a un segundo plano la vida municipal. Y la endiablada situaci¨®n pol¨ªtica, todav¨ªa sin mesa del Parlament ni gobierno en la Generalitat, no facilita llegar a acuerdos.

El equipo econ¨®mico de Colau present¨® el presupuesto el pasado 10 de octubre: 2.643 millones de euros, 62,4 m¨¢s que en 2017, y con 482 millones para inversiones, con una aportaci¨®n de 50 millones por parte del Patronato Municipal de la Vivienda. Unas cuentas que prev¨¦n un crecimiento del gasto corriente de 58,7 millones para servicios sociales, transporte p¨²blico y vivienda y urbanismo.

Pero desde entonces ¡ªy a parte de la abstenci¨®n de ERC y PDeCAT que facilitaron la aprobaci¨®n inicial de las cuentas en noviembre¡ª el gobierno apenas ha negociado con los grupos. Ayer la alcaldesa asegur¨® que est¨¢ realizando el ¡°m¨¢ximo esfuerzo¡± para negociar, y en la agenda de esta semana del portavoz, Gerardo Pisarello, figuran encuentros con PSC, PDeCAT y ERC. No constan con Ciutadans, PP ni CUP. Pero de las palabras de la alcaldesa ayer ¡ª¡°se aprobar¨¢n por una v¨ªa o por otra¡±¡ª se desprendi¨® que no descartan recurrir a la cuesti¨®n de confianza.

Esta f¨®rmula, a la que Barcelona en com¨² ya recurri¨® el a?o pasado, supone que el gobierno presenta unas cuentas que en el plazo de un mes se aprueban de forma autom¨¢tica si los grupos no consiguen armar un gobierno alternativo. Una opci¨®n imposible en el Ayuntamiento de Barcelona, porque exigir¨ªa un pacto entre partidos independentistas y no independentistas.

Pero a Colau tampoco le conviene la imagen de aislamiento aprobando las cuentas en solitario. En las ¨²ltimas semanas ha sufrido dos batacazos: primero los malos resultados de su partido en las elecciones del 21-D en Barcelona; y la semana pasada un bar¨®metro que sit¨²a a ERC como ganador de las municipales.

ERC y el PSC

El escenario ideal para el ejecutivo municipal ser¨ªa aprobar las cuentas con los votos de ERC y PSC. Pero los republicanos no lo pondr¨¢n f¨¢cil, y menos con la perspectiva de dar el sorpasso en Barcelona. Y el PSC tampoco est¨¢ por la labor, despu¨¦s de romper con Colau su alianza de Gobierno el pasado oto?o.

El l¨ªder de ERC en el Ayuntamiento, Alfred Bosch, se mostr¨® el lunes partidario de hablar de las cuentas, pero record¨® que no ha tenido contactos con el gobierno desde noviembre.

Fuentes socialistas explicaron ayer que afrontan con ¡°decepci¨®n las negociaciones despu¨¦s de que Colau haya subido el precio de la T-10 por encima de los diez euros¡± y condicionaron la negociaci¨®n de su apoyo a una ¡°rectificaci¨®n inmediata¡±. Los socialistas calificaron los contactos de ¡°pol¨ªtica de maquillaje para justificar aprobarlos por la puerta de atr¨¢s¡±.

El PSC no es el ¨²nico grupo que reprocha al gobierno la falta de voluntad negociadora. De hecho, todos los grupos presentaron alegaciones al presupuesto antes de las elecciones, a mediados de diciembre. Y todos aseguran que no han tenido respuesta. Tampoco el PDeCAT, que incluso solicit¨® aclaraciones a las cuentas, como el detalle de gastos en 2018 de partidas que son plurianuales, explica la concejal S¨°nia Recasens.