Puigdemont se refugia en sus fieles para mantener viva la investidura

La tozudez de Carles Puigdemont para lograr ser investido de nuevo presidente de la Generalitat y mantener as¨ª su ¨®rdago contra el Estado no se explica solo por la tenacidad que le reconocen hasta sus adversarios. A su alrededor tiene un grupo de colaboradores que le hacen de ojos y o¨ªdos para suplir la distancia de 1.300 kil¨®metros que hay entre Barcelona y Bruselas. De or¨ªgenes e intereses diversos, son el ¨²ltimo reducto que jalea al expresident cuando, como el pasado martes, desfallece y expresa lo desesperado de su situaci¨®n. Algunos son diputados de Junts per Catalunya, pero, ante todo, son puigdemonistas.

Pese a que es un hombre avezado en las nuevas tecnolog¨ªas, hiperconectado, la lejan¨ªa con la realidad catalana le pasa factura a Puigdemont. ?l participa v¨ªa Skype en las reuniones del grupo parlamentario de Junts per Catalunya, la llamada lista del president. Pero, como es evidente, carece de margen de maniobra, tal y como qued¨® demostrado en el aplazamiento de la sesi¨®n de investidura del pasado martes, pese a que sus m¨¢s cercanos negociaban con Esquerra.

"El ¨¦xito de la estrategia de Madrid [para desmontar a Puigdemont] depende exclusivamente de que ¨¦l se vaya quedando solo y eso, de momento, no est¨¢ sucediendo¡±, explica una fuente cercana a la lista del president. En los ¡°momentos de debilidad¡± ¡ªcomo los denomin¨® el propio Puigdemont el martes tras conocerse sus mensajes con el exconsejero Toni Com¨ªn¡ª es este grupo el que le ha apoyado e invitado a continuar en su cruzada por la restituci¨®n del ¡°Govern leg¨ªtimo¡±. Tambi¨¦n reciben la complicidad de tertulianos como Pilar Rahola y de directores de digitales independentistas como Vilaweb (Vicent Partal) o El Nacional (Josep Antich), que se encargan de amplificar el discurso del entorno del expresident.

El c¨ªrculo de Puigdemont va m¨¢s all¨¢ del grupo parlamentario de Junts per Catalunya. Pero su origen es precisamente el proyecto tras la confecci¨®n de la lista del president. Tras el fracaso de la candidatura unitaria del independentismo para las elecciones del 21-D, el expresident y sus colaboradores m¨¢s cercanos en el Govern se pusieron a trabajar en un movimiento pol¨ªtico independentista, ciudadano, fuera de la l¨®gica de partidos, al estilo de la confluencia que llev¨® a Ada Colau a conquistar la alcald¨ªa de Barcelona.

A sus promotores les gusta contar que Puigdemont llega a la confluencia por petici¨®n popular. Lo cierto es que desde el principio varias personas cercanas al expresident, y ¨¦l mismo, se dedicaron a promocionar en sus redes sociales el manifiesto que impuls¨® la lista y recibi¨® m¨¢s de medio mill¨®n de firmas.

Elsa Artadi, actual portavoz del grupo de Junts per Catalunya en el Parlament y excoordinadora interdepartamental de la Generalitat, y Jaume Clotet, director de Comunicaci¨®n del Govern, son dos de las personas que est¨¢n desde el minuto uno junto a Puigdemont. Si bien la formaci¨®n reh¨²sa a hablar de planes b respecto a la investidura, Artadi es la mejor posicionada para protagonizar lo que ser¨ªa una ¡°presidencia t¨¦cnica¡±. Sin embargo, el colectivo se decanta m¨¢s por otras elecciones que por otra salida.

Artadi fue pupila del exconsejero de Econom¨ªa, Andreu Mas-Collel. Rompi¨® el carnet del PDeCAT antes de la campa?a del 21-D. Tuvo un papel central en el Govern destituido pero no est¨¢ siendo investigada y eso le da margen de maniobra. Una ventaja que no tienen, por ejemplo, los exconsejeros Jordi Turull y Josep Rull, que ya estuvieron en prisi¨®n preventiva por la causa contra el independentismo. Esto condiciona sus posibilidades para encabezar el Ejecutivo, pero los dos son piezas clave dentro del relato de Puigdemont: la restituci¨®n del Govern.

Clotet, junto con el historiador Agust¨ª Colomines, son dos de los padres del relato de Junts per Catalunya. Las l¨ªneas por las que se mover¨¢ el expresident se pueden leer en los art¨ªculos de Colomines, que tambi¨¦n es alto cargo de la Generalitat. El hagi¨®grafo del proc¨¦s estuvo al lado de Artur Mas (dirigi¨® la fundaci¨®n convergente CatDem entre 2007 y 2013), despu¨¦s intent¨® acercarse a la l¨ªder del PDeCAT, Marta Pascal, y ahora encuentra sombra con Puigdemont.

Los hermanos Piqu¨¦ tambi¨¦n juegan un papel clave dentro del c¨ªrculo del expresident, en un punto tan trascendente (y hasta ahora exitoso) como es el de la comunicaci¨®n. Joan Mar¨ªa, exjefe de prensa de Artur Mas, es el portavoz del ¡°Govern en el exilio¡± y se encarga de las relaciones p¨²blicas internacionales del proc¨¦s. Fue relevado en el marco de la aplicaci¨®n del art¨ªculo 155 de la Constituci¨®n. Ram¨®n Mar¨ªa fue el padre de la imagen de la campa?a de Junts per Catalunya.

Los independientes

La confecci¨®n de la lista, que el PDeCAT se vio obligado a aceptar para evitar una debacle electoral, permiti¨® que Puigdemont tuviera carta blanca para rodearse de quien quisiera, sin los t¨ªpicos equilibrios partidistas. Eso garantiza una entrega total a las tesis del expresident. En el fondo no hay fisura alguna, pero las formas empiezan a mostrar que la convivencia de las diferentes sensibilidades puede generar altibajos.

Entre los independientes, ahora diputados, figuran, por ejemplo, la historiadora Aurora Madaula o Francesc de Dalmases, exmiembro del comit¨¦ ejecutivo del Pacto Nacional por el Refer¨¦ndum. Ambos fueron promotores del manifiesto que dio origen a la candidatura y sus posicionamientos est¨¢n m¨¢s cerca de una plataforma que de un partido. Una muestra de ello es que, junto con los diputados Quim Torra (exl¨ªder de ?mnium) y Laura Borr¨¤s, exdirectora de la Instituci¨® de les Lletres Catalanes, hicieron el amago de apoyar a la CUP en su protesta en el hemiciclo por la decisi¨®n del presidente del Parlament, Roger Torrent, de suspender la sesi¨®n de investidura. Despu¨¦s, todos fueron a saludar a la gente concentrada alrededor del Parlament.

La libertad de Puigdemont para dise?ar la lista tambi¨¦n explica la preponderancia de diputados como Eduard Pujol (exdirector de RAC-1) o el alcalde de Valls, Albert Batet. Pujol ejerci¨® de portavoz durante la campa?a. Batet, de gran ascendencia dentro del mundo municipalista del PDeCAT, es uno de los principales apoyos del expresident. Otra ayuda, menos cercana, es que la CUP nunca ha vetado su nombre y lo ve como el candidato leg¨ªtimo. Pero m¨¢s all¨¢ del plano estrictamente pol¨ªtico, Puigdemont cuenta con respaldos m¨¢s fraternales. Tal es el caso del empresario gerundense Josep Maria Matamala. La red de apoyo parece soportar a un Puigdemont que coge su tel¨¦fono para desahogarse y darse por acabado pol¨ªticamente.