¡°Vomitando¡± al borde del vertedero

"Nadie lo piensa, pero este macrovertedero en la cima del monte est¨¢ a solo 5,9 kil¨®metros de la Catedral de Santiago y a unos cuatro de la residencia oficial del presidente de la Xunta. Nosotros lo tenemos al lado. La casa m¨¢s pr¨®xima est¨¢ a 400 metros, en la aldea de Miramontes. La siguiente aldea es Vilas, a 600. En total somos 900 vecinos con un futuro de mierda, la gente acaba vomitando al paso de los camiones de residuos por este olor nauseabundo que no se parece a nada conocido. Si el viento sopla del sur, lo sufren los del norte. Si sopla del norte, apesta a los del sur. Mi abuela no se atreve a salir de casa. Aqu¨ª los viejos no ven m¨¢s salida que dejar atr¨¢s toda su vida y escapar a vivir con sus hijos a la capital". David Mart¨ªnez, vecino de la parroquia de Grixoa, es miembro de la Plataforma de Afectados polo Vertedoiro de Santiago. La asociaci¨®n empez¨® a luchar hace dos a?os contra el llamado Complejo Ambiental de Miramontes, una vieja cantera de ¨¢ridos que emprendi¨® en 2008 un plan de restauraci¨®n mediante el relleno del cr¨¢ter con toneladas de "residuos industriales no peligrosos" de toda Galicia y la fabricaci¨®n de los llamados "tecnosuelos" como cobertura a partir, sobre todo, de lodos de depuradoras de varias comarcas y de dragados de r¨ªas gallegas. El plan de regeneraci¨®n ha acabado en tormenta pol¨ªtica, pol¨¦mica ecologista, un par de multas derivadas de inspecciones de la Xunta y la clausura, este mes, de una de las empresas que formaban parte del complejo, Tecnosolos Galaicos, SL, a la vista de los resultados de una veintena de catas que sobrepasaban los par¨¢metros permitidos recogidas entre 2016 y 2017.

El debate pol¨ªtico est¨¢ en el Ayuntamiento de Santiago y en el Parlamento gallego, donde el pasado martes, cuestionada por el BNG, la conselleira de Medio Ambiente, Beatriz Mato, hizo un repaso de las continuas inspecciones llevadas a cabo por la Xunta para hacer "cumplir la legalidad". Los vecinos aseguran que si no fuera por su lucha ninguna de estas visitas sorpresa de la Administraci¨®n se habr¨ªa producido. "El sentimiento es de tristeza y de indefensi¨®n frente a una industria abusiva, imparable porque genera mucho dinero", describe Mart¨ªnez, "el tr¨¢fico de camiones es tan intenso que aparecen grietas en las casas".

Los tecnosuelos son un producto derivado de residuos, sometido a tratamiento y madurado, que sirve para reciclar restos org¨¢nicos y debe terminar semej¨¢ndose en textura a la tierra vegetal para la restauraci¨®n de la capa superficial de terrenos degradados como las canteras. Ante el "incumplimiento muy grave y reiterado de la normativa" en la planta de "supuestos tecnosuelos", la Sociedade Galega de Historia Natural ha reclamado a la conseller¨ªa que precinte estas instalaciones; que abra un expediente sancionador "por el vertido no autorizado de residuos mezclados contaminantes en el medio natural"; que obligue a la empresa a "retirar la totalidad" del producto que incumpla la ley y que informe a la fiscal¨ªa de Medio Ambiente por si la actividad constituye delitos contra el entorno y "la salud de las personas".

El grupo ecologista, integrado por cient¨ªficos y presidido por el edaf¨®logo del CSIC Seraf¨ªn Gonz¨¢lez, revisa en su escrito 23 muestras de tecnosuelo recogidas en el lugar por el Ayuntamiento y la Xunta entre abril de 2016 y noviembre de 2017 y concluye que "un 70% sobrepasan entre 2 y 5 veces los valores m¨¢ximos permitidos por la Instrucci¨®n T¨¦cnica de Residuos de Galicia (ITR) en cuesti¨®n de metales y metaloides. Estos incumplimientos se refieren al cadmio, el cobre, el n¨ªquel, el plomo y el zinc. Una de las anal¨ªticas tambi¨¦n tuvo en cuenta el cromo hexavalente, un "peligroso contaminante" recuerda el escrito, y revel¨® niveles "tres veces superiores a lo admisible".

Adem¨¢s, los "supuestos tecnosuelos incumplen en un 45% de las muestras los par¨¢metros establecidos para nitratos, y en dos de las tres muestras recogidas en octubre "se detectaron niveles de nitratos en lixiviados que exceden 43 veces los l¨ªmites permitidos". Esta cantidad de nitratos, explica Serafin Gonz¨¢lez, supone una "sobredosis t¨®xica" que impide la regeneraci¨®n vegetal. Su grupo considera que Medio Ambiente deber¨ªa efectuar tests de toxicidad para las plantas y las lombrices de tierra que de momento no se han llevado a cabo, y recuerda que a la misma distancia que las casas existen tambien terrenos agr¨ªcolas de los vecinos. Entre otros "incumplimientos", la Sociedade de Historia Natural cita los Hidrocarburos Arom¨¢ticos Polic¨ªclicos, supuestos cancer¨ªgenos, superiores "entre 4 y 10 veces a los valores permitidos" en "el 73%" de las muestras. Adem¨¢s, el experto en suelos del Consejo Superior de Investigaciones Cient¨ªficas se?ala que las muestras de la planta de Grixoa presentan gran cantidad de "impropios" que hacen que no parezca tierra: "Desde cuchillas, a bolsas y cepillos de dientes", apunta Gonz¨¢lez.

Pero las empresas se defienden. Un portavoz oficial del Complejo Ambiental Miramontes comenta que, una vez clausurado, Tecnosolos Galaicos ya no forma parte del proyecto que ahora solo integran la cantera de ¨¢ridos y el "vertedero de residuos industriales no peligrosos". Que el gran c¨²mulo de basura que rellena el cr¨¢ter "cumple con todos los par¨¢metros al m¨¢s alto nivel que exige la normativa europea" y que el vaso est¨¢ a punto de llenarse. Es decir, "le queda una vida ¨²til de entre dos y tres a?os, probablemente menos".

Por su parte, Juan Moj¨ªn, director t¨¦cnico y gerente de Tecnosolos Galaicos, SL, insiste en que su trabajo est¨¢ "bien hecho", se declara "ecologista" y afirma que "si tuviera duda" de que est¨¢ haciendo "una actividad contaminante, no la har¨ªa". Reconoce que el suyo es un sector "molesto" y "maloliente" porque trabaja "con basura", "residuos que la sociedad genera y hay que depurar", pero que "nadie quiere al lado". Admite que Grixoa es "una zona rural a la que le supone un incordio el tr¨¢fico diario de 40 camiones entrando y saliendo y produciendo olores". Pero defiende que siempre han tratado de "minimizar los efectos" con medidas de seguridad que "incluso van m¨¢s all¨¢ de la normativa" porque higienizan los veh¨ªculos "antes de salir de la planta", los obligan a ir "con toldo" y someten los lodos de depuradora a "cal viva y cenizas de biomasa" para que no huelan. En su opini¨®n, la "Instrucci¨®n T¨¦cnica de Residuos de Galicia se ha hecho de forma muy restrictiva", un "debate t¨¦cnico" que deber¨ªa reabrirse porque considera que no es posible que los par¨¢metros que valen para fertilizar un terreno agr¨ªcola no sirvan para restaurar una cantera a cielo abierto.

Seg¨²n el vecino David Mart¨ªnez, lo que se estaba aplicando como cobertura "no eran tecnosuelos, sino residuos". "Tal cual vienen, los ponen", afirma, "y luego no se tratan los lixiviados, que bajan con las aguas de escorrent¨ªa, ni se ponen filtros". De tal manera que el Regato da Ra?oa, un afluente de la cuenca del Tambre, "tiene un olor y un color terribles y ya no se ve ni una trucha ni un salm¨®n". "Nos preguntamos qu¨¦ m¨¢s tiene que pasar para que tomen medidas organismos como Augas de Galicia", sigue: "Aqu¨ª todos beb¨ªamos agua de pozo o de manantial, pero ahora no nos atrevemos. Nos parece que empieza a salir con grasa, y compramos de botella".

Los miembros de la Plataforma de Afectados polo Vertedoiro de Santiago-Miramontes creen que la actividad de la empresa de tecnosuelos, que empez¨® a operar a finales de 2015 como una nueva fase del proyecto de regeneraci¨®n, est¨¢ afectando tambi¨¦n a la fauna y la flora. Seg¨²n Mart¨ªnez, aparecen aves y mam¨ªferos muertos, "animales con s¨ªntomas muy peculiares, que han perdido el pelo". Uno de ellos, hace un mes, era un zorro que "se llev¨® el Seprona para analizar". Los vecinos no tienen todav¨ªa los resultados de la Guardia Civil, pero el director de Tecnosolos niega estos da?os: "Las perdices andan por mis prados y los cazadores vienen los fines de semana. El a?o pasado tuvimos patos anidando".