La Fundaci¨® T¨¤pies, pendiente de que nazca una mariposa

La Fundaci¨® T¨¤pi¨¨s est¨¢ pendiente del nacimiento de una mariposa. Suceso que podr¨ªa tener lugar en cualquier momento del fin de semana. Se palpa la emoci¨®n.

El insecto es una hermos¨ªsima morpho helenor (Cramer, 1776), una de las 80 especies del g¨¦nero Morpho, entre las que se cuentan algunas de las mariposas m¨¢s bellas del mundo. Son mariposas neotropicales, principalmente de Am¨¦rica del Sur y central, grandes y que se caracterizan por tener los machos en la parte externa de las alas un espectacular color azul met¨¢lico iridiscente. En las Morpho, la naturaleza se ha hecho sin duda arte del bueno.

La cris¨¢lida, de color verde jade y que emite un ultrasonido al tocarla, puede verse colgada de la barandilla del segundo piso de la fundaci¨®n, frente a la biblioteca (para localizarla desde abajo hay que tener buena vista).

La idea de instalar una mariposa en la T¨¤pies es del artista barcelon¨¦s residente en Brasil Daniel Steegmann Mangran¨¦, que ayer present¨® el proyecto, denominado con el impronunciable grafismo .'... ..'., y tambi¨¦n la publicaci¨®n The spiral forest, que recoge varios de sus trabajos. ¡°Es una discret¨ªsima intervenci¨®n, pero el museo ha tenido que adaptarse a su peque?o h¨²esped¡±, se?al¨® ayer el artista.

Una vez nacida, la mariposa podr¨¢ volar libremente por los m¨¢s de 4.500 metros cuadrados del espacio de la fundaci¨®n durante las tres semanas aproximadamente que constituyen la media de vida de la especie. Tendr¨¢ alimento (frutas dulces), luz y la temperatura adecuada: el centro se mantendr¨¢ entre 22 ? y 24 ?. La acci¨®n juega con aspectos como el desviamiento de la atenci¨®n del visitante, ya sea por la s¨²bita aparici¨®n de la mariposa o por estar busc¨¢ndola, e invita a reflexionar sobre el encuentro entre naturaleza y cultura. La mariposa se convierte asimismo en una mezcla de animal, obra de arte y signo.

Con la instalaci¨®n de abejas en la Fundaci¨®n Mir¨® y ahora la mariposa azul de la T¨¤pies, el arte barcelon¨¦s se vuelca en la entomolog¨ªa.

Observar una Morpho volando en la Fundaci¨® T¨¤pies puede ser una experiencia maravillosa. Las Morpho no solo son apreciad¨ªsimas comercialmente (una pena para ellas) sino que han entrado en la literatura: A. S. Byatt las hizo protagonistas de su novela corta Morpho Eugenia, parte del libro ?ngeles e insectos y llevada al cine con ese t¨ªtulo en 1995.