Ainoha Arteta y Lucero Tena triunfan en la noche madrile?a
Zarzuela selecta en la Plaza Mayor para un Madrid en las fiestas patronales de San Isidro
Este domingo, antev¨ªspera de San Isidro, patr¨®n local, vio llenarse la Plaza Mayor de Madrid con varios miles de personas que, devotamente, acudieron a su monumental enclave para asistir a una singular y musical velada. La cita fue protagonizada por la Orquesta del Teatro de la Zarzuela, bajo la batuta de ?liver D¨ªaz, con un elenco vocal y un programa de lujo: la soprano Ainoha Arteta, el tenor Jos¨¦ Luis Sola y el bar¨ªtono Jos¨¦ Antonio L¨®pez, m¨¢s la colaboraci¨®n estelar de Lucero Tena que, con sus casta?uelas, levant¨® varias veces de sus asientos al p¨²blico. Provistos de sus mejores voces y de su arte, interpretaron una cuidada selecci¨®n de temas de Chap¨ª, Barbieri, Chueca, Ger¨®nimo Gim¨¦nez, Guridi, Vives, Alonso y Penella, entre otros compositores de zarzuelas y habaneras, dos g¨¦neros de enorme arraigo en la memoria musical de Madrid.
La orquesta madrile?a bord¨® con pericia las partituras elegidas bajo la gr¨¢cil direcci¨®n de ?liver D¨ªaz, se?aladamente durante la interpretaci¨®n de La leyenda del beso. Supo imprimir a su batuta ora la solemne hechura -de inspiraci¨®n a juicio de algunos, otomana- de tal pieza, ora el alegre temple vien¨¦s que otras obras, tan elegantemente seleccionadas, exig¨ªan. Violines, viento, percusi¨®n y arpa cumplieron sus cometidos con desenvuelta soltura. El tenor Jos¨¦ Luis Sola acometi¨® con br¨ªo un arranque conmovedor, que dej¨® anonadado al p¨²blico, mientras Ainoha Arteta supo te?ir de emoci¨®n la noche toda. Su prodigioso timbre alcanzaba los corazones m¨¢s distantes y gracias a ¨¦l, y a las tablas del bar¨ªtono Jos¨¦ Antonio L¨®pez, el frescor creciente de la noche fue casi olvidado por el p¨²blico que abarrotaba con unci¨®n la Plaza.
Momentos singularmente emotivos fueron cuando las tres voces acometieron el Canta y no llores, del maestro Penella, culminada con un excelso agud¨ªsimo de Arteta; tambi¨¦n, al entonar la soprano tolosana el De Espa?a vengo, soy espa?ola; o cuando la veterana Lucero Tena siluete¨® con sus casta?uelas el Intermedio del baile de las Bodas de Luis Alonso. Aires de Murcia, Extremadura, Granada, Andaluc¨ªa o el Pa¨ªs Vasco subieron al ¨¦ter madrile?o desde la hist¨®rica Plaza que se apresta a cumplir cuatro siglos, edad que la convierte en coraz¨®n m¨¢s veterano de una ciudad que encuentra en su latir las se?as m¨¢s caracter¨ªsticas de su personalidad. En su marco, un Madrid en fiestas isidriles goz¨® de su m¨²sica de siempre, innovada por la interpretaci¨®n de sus m¨²sicos y emotivos cantantes, que bordaron el g¨¦nero can¨®nico de la madrile?idad, la zarzuela; ya desde la misma ma?ana del domingo, muchos madrile?os hab¨ªan visto recreada su mejor m¨²sica por la banda Sinf¨®nica Municipal desde el templete del parque del Retiro. Y ello en medio del estallido de una ins¨®lita y esplendorosa primavera, fruto de las nieves y las lluvias que han jarreado sobre Madrid y su regi¨®n durante el a¨²n cercano -y no del todo despedido- invierno.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.