Los pr¨®ximos migrantes huir¨¢n de las consecuencias del cambio clim¨¢tico

¡°No hay pol¨ªtica real global sobre migraciones en Europa; lo que s¨ª hay son pol¨ªticas locales de prohibici¨®n, de cerrar puertas y de frenar los movimientos migratorios, como si esto fuera posible; como si se pudiera poner freno a la voluntad del ser humano de huir de la cat¨¢strofe como lleva haciendo desde el origen de los tiempos¡±. Lo dice con preocupaci¨®n y tinte pesimista la jefa de misi¨®n del Proactiva Open Arms, Anabel Montes, que afronta, junto con el capit¨¢n del barco, una investigaci¨®n de la Fiscal¨ªa italiana por un presunto delito de ¡°favorecer la inmigraci¨®n ilegal¡±. O lo que es lo mismo: por salvar vidas en el mar. La investigaci¨®n se produce despu¨¦s de haberse paralizado otra contra ella para la incautaci¨®n del barco despu¨¦s de que tres jueces rechazasen la existencia de indicios de inmigraci¨®n clandestina.

Convencida de que con acciones como esta se pretende criminalizar el trabajo de los activisras, Montes no quiere poner el foco sobre ello. ¡°Al fin y al cabo -sostiene- los voluntarios estamos aqu¨ª porque queremos y porque podemos¡±.

Lejos de ello, la ONG insiste en la promoci¨®n del activismo: Proactiva Open Arms es una de las 60 organizaciones (entre ellas, todas las ONG que trabajan in situ con refugiados) que desde este jueves y hasta el s¨¢bado participan en A Coru?a en la iniciativa Acampa de la Plataforma Coru?a contra la Guerra: tres d¨ªas de aproximaci¨®n a las vivencias de los refugiados a trav¨¦s de un campamento instalado en los c¨¦ntricos jardines de M¨¦ndez N¨²?ez y de numerosas exposiciones, conferencias y talleres.

Se trata de dar visibilidad a la situaci¨®n de las personas que huyen de sus pa¨ªses. Y se trata, tambi¨¦n, de potenciar el papel de las ciudades como puertos de acogida; convertirlas en ¡°ciudades refugio¡±, en palabras del alcalde de A Coru?a, Xulio Ferreiro, que recrimin¨® al Gobierno de Mariano Rajoy que no hubiese cumplido el acuerdo de la Comisi¨®n Europea de acoger a m¨¢s de 17.000 personas.

Acampa pone la mirada en el v¨ªa crucis que atraviesan los m¨¢s de 600 migrantes del Aquarius a los que el l¨ªder de la xen¨®foba Liga y ministro del Interior de Italia, Matteo Salvini, cerr¨® los puertos de su pa¨ªs.

La jefa de misi¨®n del Open Arms afirma, en conversaci¨®n telef¨®nica desde Italia, que a Salvini le ha sido pol¨ªticamente rentable la decisi¨®n. ¡°Aqu¨ª hay mucha gente que celebra como una victoria del ministro haber conseguido que Espa?a se hiciese cargo de los migrantes del Aquarius, de tal forma que el buen gesto del Gobierno espa?ol se diluye frente a la visi¨®n de un Salvini reforzado y legitimado¡±. De otra parte, destaca, en Espa?a, el primer pa¨ªs voluntario en ofrecer refugio, ¡°se pone el ¨¦nfasis en el acierto del Gobierno pero no se cuestiona que Italia haya cerrado sus puertas¡±.

No obstante, Montes cree que el pa¨ªs transalpino acabar¨¢ siendo juzgado por el Tribunal Internacional del Derecho del Mar. ¡°Ya se habla de ello y cada vez m¨¢s en voz alta¡±, apunta la activista. ¡°Solo es necesaria una denuncia de una ONG, de cualquier abogado, de cualquier pa¨ªs¡±,puntualiza.

Pase lo que pase, la alarma se mantiene. La plataforma Acampa alerta en estas jornadas de la irrupci¨®n de nuevos migrantes carentes de derecho a refugio: los afectados por el cambio clim¨¢tico. Informes de Naciones Unidas prev¨¦n que las hambrunas provocadas por sequ¨ªas o inundaciones provocar¨¢n en las pr¨®ximas tres d¨¦cadas nuevas migraciones de entre 250.000 y 1.000 millones de personas, la pr¨¢ctica totalidad procedentes de los pa¨ªses menos desarrollados. Se disparar¨¢n las urgencias humanitarias.

Mientras en el campamento simulado de refugiados de A Coru?a se intenta dejar patente la importancia de una red de ayuda y que la sociedad conozca la realidad de los refugiados, considerando que ¡°es algo que nos afecta a todos¡±, la coordinadora del Open Arms se pregunta c¨®mo se van a solucionar las constantes crisis de refugiados a la vista de que los migrantes econ¨®micos est¨¢n ahora al albur de las decisiones ¡°adoptadas en despachos por personas que no reconocen que un pa¨ªs est¨¢ en guerra¡±.