El PDeCAT aguarda al movimiento que Puigdemont quiere fundar en oto?o

El PDeCAT celebrar¨¢ hoy su primera ejecutiva tras la asamblea en la que Carles Puigdemont y su entorno se impusieron a la v¨ªa m¨¢s posibilista que defend¨ªa la ya excoordinadora de la formaci¨®n Marta Pascal. Ser¨¢ una reuni¨®n en la que se esbozar¨¢ el futuro de este partido hist¨®ricamente hegem¨®nico en Catalu?a, muy condicionado por el desenlace del movimiento panindependentista que quiere fundar el expresident, la Crida Nacional, que ver¨¢ la luz este oto?o.

¡°Recoser¡±, ¡°curar¡±, ¡°tender puentes¡±, son algunas de las expresiones m¨¢s repetidas cuando se pregunta a algunos de los cuadros del partido sobre los deberes de la nueva ejecutiva. Nadie duda del liderazgo de Puigdemont, ¡ªahora en Waterloo (B¨¦lgica)¡ª pero la manera en que se impuso su tesis de alinear el PDeCAT y la Crida ha dejado una herida de complicado tratamiento. Y mucho m¨¢s, a menos de un a?o para las elecciones municipales, en las que la formaci¨®n heredera de Converg¨¨ncia quiere revalidar sus 440 alcald¨ªas.

¡°Pascal ha preferido retirarse antes que partir el partido¡±, dice un alto cargo. La excoordinadora, tan independentista como Puigdemont, no ve¨ªa claro que el partido terminara diluy¨¦ndose completamente en la Crida, como defienden los fieles al expresident. Muchos sectores cr¨ªticos con Pascal ven con malos ojos que el PDeCAT quede reducido a un NIF que le permita al entorno de Puigdemont gozar de los derechos electorales que ostenta. El nuevo presidente, David Bonveh¨ª, un hombre que conoce a las bases, es de este parecer. La vicepresidenta, M¨ªriam Nogueras, comparte el punto de vista de Puigdemont.

¡°Puigdemont tiene el poder, pero nadie ha ganado¡±, tercia otro miembro de la ejecutiva. El expresident tiene ascendencia sobre Bonveh¨ª pero la militancia se uni¨® para impedir que pesos pesados como los consejeros Dami¨¤ Calvet y Miquel Buch, las manos ejecutoras de la l¨ªnea que desde la c¨¢rcel tracen Josep Rull y Jordi Turull, respectivamente, estuvieran en la direcci¨®n. ¡°Se han cargado el centroderecha de Catalu?a¡±, a?ade otra persona cercana a la c¨²pula. En la Crida est¨¢ todo por construir y su ¨²nico contenido program¨¢tico, por ahora, es alcanzar la rep¨²blica catalana. La preocupaci¨®n es qu¨¦ pasar¨¢ con el corpus ideol¨®gico convergente.

Ese tercio de personas que se opuso a la lista de consenso dise?ada por Bonveh¨ª para intentar que el partido no se partiera, rechaza, por un lado, las formas de la asamblea y que todo se cerrara con un pacto de despacho en lugar de democracia interna. Y, por otro, expresan su miedo a qu¨¦ pasar¨¢ de cara a las municipales. ¡°Muchos candidatos ya designados por el PDeCAT no saben si empezar a hacer campa?a o qu¨¦ esperar de la Crida. Tambi¨¦n temen que haya primarias en sus municipios y se impongan otras personas¡±, explica un alcalde neoconvergente.

El orgullo de partido es uno de los temas que el puigdemontismo tendr¨¢ que gestionar. Bonveh¨ª insiste en que la propuesta program¨¢tica del PDeCAT no se perder¨¢ aunque colabore con la Crida, donde las adhesiones son personales. La experiencia de Junts per Catalunya, la lista hecha a medida de Puigdemont para el 21-D con los recursos del PDeCAT, no ha sido muy satisfactoria. La formaci¨®n heredera de Conv¨¨rgencia se sinti¨® ninguneada.

En la ejecutiva se aprobar¨¢ si hay un nuevo portavoz del partido y el del subgrupo en el Congreso. Si no hay cambios, continuar¨¢ el veterano Carles Campuzano si bien Nogueras o Lourdes Ciur¨® se encargar¨ªan de coordinar la actividad parlamentaria. Con todo, las miradas est¨¢n puestas en el oto?o, cuando se funde la Crida y se fije qu¨¦ tipo de instrumento pol¨ªtico ser¨¢. Esa ser¨¢ la hora de la verdad del PDeCAT y de quienes defienden sus siglas. Antes de marcharse, Pascal dej¨® algo bien atado: la ¨²ltima palabra sobre c¨®mo debe ser el apoyo al movimiento debe votarlo la militancia. S¨®lo el 15% de los 14.000 asociados del partido particip¨® en la votaci¨®n que llev¨® a Bonveh¨ª y su lista a la c¨²pula de la formaci¨®n.