Trabajo cerca a las falsas cooperativas del sector c¨¢rnico
La Generalitat regulariza 105 contratos en solo seis meses, mientras que en 2017 fueron 35
La Generalitat ha intensificado las inspecciones en el sector c¨¢rnico, una industria en auge que en muchos casos se sustenta en relaciones laborales precarias. En solo seis meses, Trabajo ha transformado 105 contratos fraudulentos en indefinidos, mientras que en 2017 fueron 35. Desde 2014, la Generalitat ha impuesto sanciones por valor de 2,3 millones de euros, seg¨²n los datos aportados recientemente en el Parlament por el consejero de Trabajo, Asuntos Sociales y Familia, Chakir El Homrani.
En Espa?a ya hay m¨¢s cabezas de cerdo que personas, una proporci¨®n que en Catalu?a, uno de los motores de la industria c¨¢rnica, ya hace tiempo que se super¨®. El sector representa el 2% del PIB, con una producci¨®n que sit¨²a al c¨¢rnico como el cuarto sector productor en Espa?a: cada a?o se sacrifican casi 50 millones de cerdos, seg¨²n los datos de la Federaci¨®n Empresarial de Carnes e Industrias C¨¢rnicas (FECIC). Mientras la industria del cerdo registra un crecimiento continuado, en los mataderos y salas de despiece las condiciones de trabajo son precarias y, muy a menudo, fraudulentas.
En estos centros es frecuente el modelo de las falsas cooperativas, empresas intermediarias que obligan a sus trabajadores a pagar una cuota como socios y a costearse la tasa del r¨¦gimen de aut¨®nomos, aunque no tienen la capacidad de decisi¨®n de un cooperativista y, por su naturaleza, el trabajo que realizan corresponde al de un empleado asalariado. La mayor¨ªa de los trabajadores de estos centros son inmigrantes y provienen de colectivos vulnerables.
A principios de este a?o la Generalitat impuls¨® dos grandes inspecciones de Trabajo en las instalaciones del Grupo Jorge en la Catalu?a central. Esto, seg¨²n el secretario general del departamento de Trabajo, Josep Ginesta, es fruto de un esfuerzo que se remonta a 2016, cuando la Generalitat detect¨® la proliferaci¨®n de falsos aut¨®nomos en esta industria, y a mayo de 2017, cuando se modific¨® la ley de cooperativas catalana para estrechar el cerco a las falsas cooperativas. ¡°Nos dio m¨¢s capacidad de sanci¨®n¡±, explica.
Los datos aportados por El Homrani para responder a una pregunta parlamentaria lo corroboran. En 2017 las multas al sector c¨¢rnico en Catalu?a ascendieron a 670.880 euros, un 82% m¨¢s que el a?o anterior; y solo en los seis primeros meses de 2018 las sanciones fueron de 879.765 euros. Ginesta apunta a que, si todo va seg¨²n lo previsto, a finales de a?o las cifras ser¨¢n mucho mejores: las 39 altas en la Seguridad Social que se han conseguido hasta ahora aumentar¨¢n con el resultado de una inspecci¨®n en Tarragona y con el compromiso de Grupo Jorge de regularizar 1.600 puestos de trabajo.
¡°Somos optimistas con acabar con las falsas cooperativas, porque el concepto cae por su propio peso y porque hay un consenso para actuar compartido entre la Generalitat y el Estado, una coordinaci¨®n que sigui¨® a pesar del 155¡±, afirma Ginesta en referencia a la intervenci¨®n de la Generalitat. El reto para las empresas, seg¨²n diversas fuentes del sector, es asumir las regularizaciones y, ya sin el margen que daban las falsas cooperativas, buscar nuevos modelos de productividad.
Los sindicatos, recelosos
A pesar del cerco administrativo, algunos sindicatos muestran recelos. La raz¨®n: hace demasiado tiempo que dura el fraude de las falsas cooperativas y el abuso a los trabajadores de mataderos y salas de despiece, y las empresas nunca han sido propicias a ceder. Un ejemplo est¨¢ en el ¨²ltimo acuerdo con el Grupo Jorge, alcanzado con la mediaci¨®n de la Generalitat. Solo lo firm¨® el sindicato CCOO, mientras que UGT sali¨® de la mesa de negociaci¨®n. Tampoco particip¨® el sindicato COS, el que ha estado detr¨¢s de todas las huelgas. Los sindicatos ven peligrar el acuerdo por el que se regularizar¨ªan 1.600 personas, ya que una de las condiciones de la empresa era hacer ampliaciones urban¨ªsticas para invertir en productividad, pero el Ayuntamiento de Santa Eug¨¨nia de Berga ha denegado tres permisos. El secretario de Trabajo lo defiende: ¡°La regularizaci¨®n es imparable¡±.
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