La Generalitat pone reparos a obligar a los promotores a hacer pisos sociales

No pondr¨¢ f¨¢cil la Generalitat la aprobaci¨®n definitiva de la modificaci¨®n urban¨ªstica del Ayuntamiento de Barcelona para obligara los promotores a destinar a vivienda asequible el 30% de los pisos que hagan. Ayer, tras una reuni¨®n del Consorcio de Vivienda en la que participaron el presidente de la Generalitat, Quim Torra, y la alcaldesa Ada Colau, el consejero de Territorio y Sostenibilidad, Dami¨¤ Calvet, asegur¨® que el gobierno catal¨¢n "observa con simpat¨ªa y ganas de trabajar cualquier iniciativa urban¨ªstica o de pol¨ªticas de vivienda destinada a incrementar el parque de vivienda asequible". Pero a continuaci¨®n, y pese a asegurar que no conoce los detalles de la modificaci¨®n, puso reparos no menores a su aprobaci¨®n.

Habr¨¢ que ver y estudiar, alert¨® Calvet, "si se han resuelto las alegaciones presentadas, que nos consta que las hay potentes" y pedir (y esperar) informes a otros departamentos. A continuaci¨®n, el consejero asegur¨® que hay dos cuestiones que le "preocupan". Una vinculada al ¨¢mbito de aplicaci¨®n de la modificaci¨®n: "Barcelona no se puede separar de su conurbaci¨®n y nos gustar¨ªa que tuviera visi¨®n metropolitana y no solo se circunscribiera a Barcelona". Calvet afirm¨® que la obligatoriedad de que los promotores tengan que destinar un 30% de sus proyectos a vivienda asequible "puede centrifugar realidades", como ha ocurrido con el plan de hoteles de Colau, que solo permite crecimiento hotelero en la periferia.

La otra preocupaci¨®n del consejero son "aspectos t¨¦cnicos entorno a par¨¢metros como la densidad de viviendas por solar". "Al ser la vivienda protegida un r¨¦gimen muy tasado, la superficie de los pisos puede condicionar el n¨²mero que queda para pisos libres, y ver si tiene impacto en el resto del mercado". Un argumento que coincide con los temores que expresan desde la patronal de los promotores inmobiliarios, APCE.

Los argumentos del consejero contrastan con los de la alcaldesa, que entendi¨® "que no habr¨¢ ning¨²n problema". "Es un tr¨¢mite t¨¦cnico, la modificaci¨®n viene acompa?ada de informes jur¨ªdicos y econ¨®micos que avalan su seguridad jur¨ªdica y su viabilidad". Calvet explic¨® que cuando el pleno del Ayuntamiento apruebe la semana que viene la modificaci¨®n del Plan General Metropolitano (PGM) y la Generalitat reciba f¨ªsicamente la carpeta con el expediente, la Subcomisi¨®n de Urbanismo de Barcelona tendr¨¢ cuatro meses para resolverlo. Pese a las reservas, apunt¨®: "Tenemos cuatro meses pero somos conscientes de que es un tema prioritario, urgente y pondremos toda la maquinaria y la capacidad a trabajar. Si se cumple la legalidad y no vemos ninguna punta, las comisiones est¨¢n para aprobar".

Durante la reuni¨®n del Consorcio de la Vivienda, en el que la Generalitat tiene un 60% y el Ayuntamiento un 40%, las dos administraciones pactaron incrementar las aportaciones econ¨®micas en 64 millones de euros para ampliar el parque de alquiler asequible en 500 pisos. Una aportaci¨®n que servir¨¢ para comprar vivienda libre a trav¨¦s de la compra preferente, promover y captar pisos vac¨ªos y que tanto Colau como Calvet celebraron, aunque las cifras que proporcionaron no tienen nada que ver.?

Colau asegur¨® que la aportaci¨®n de la Generalitat supone un salto del 16% al 19% en la participaci¨®n del gobierno catal¨¢n al consorcio (frente al 84%). Un porcentaje que Calvet neg¨®, pero no rebati¨®. Lo que qued¨® claro es que las dos administraciones contabilizan con una f¨®rmula distinta las aportaciones, hasta el punto de mandar dos notas de prensa distintas y no una conjunta como es habitual.