La danza convierte el Macba en un escenario

Una luz azul brotaba de las vidrieras del vest¨ªbulo del Museo de Arte Contempor¨¢neo de Barcelona (Macba) mientras danzaba con elegancia sobrenatural en el gran espacio geom¨¦trico de pur¨ªsimo blanco Rapha?lle Delaunay. Un p¨²blico absorto en la belleza del momento la admiraba a su alrededor y desde la rampa y las balconadas. Con la danza de Delaunay y otros 19 bailarines el museo y sus colecciones devinieron ayer un grandioso escenario y una experiencia sensacional. El Macba se llen¨® de un p¨²blico con muchos aficionados a la danza y la iniciativa, de Boris Charmatz de la mano del Mercat de les Flors, entusiasm¨® a todos. Un poco menos a los vigilantes de sala, que tuvieron que lidiar con la dificultad de velar por la seguridad de las obras en el nuevo contexto. Y es que no es f¨¢cil organizar actuacioines tan f¨ªsicas y con un p¨²blico pendiente de encontrar la mejor ubicaci¨®n en salas llenas de obras de arte.

El core¨®grafo y bailar¨ªn Charmatz ya ha llevado la iniciativa al MoMA, la Tate Modern y el Reina Sof¨ªa. En el Macba su proyecto 20 bailarines para el siglo XX ha encontrado un marco espl¨¦ndido. Los bailarines, de diferentes estilos, ocuparon individualmente salas y espacios del museo, explicaron las coreograf¨ªas que interpretaban, dialogaron con el p¨²blico y bailaron toda la lluviosa tarde. Jacquelyn Elder una pieza de Martha Graham ante una obra de Ignasi Aball¨ª cuyo t¨ªtulo pod¨ªa dar t¨ªtulo a la jornada: Sense l¨ªmits. Olga Dukhovnaya reprodujo en la sala dedicada al cine y la Guerra Civil la coreograf¨ªa de Chaplin en Tiempos modernos despu¨¦s de.explicar pormenorizadamente la importancia e inter¨¦s de la misma. Delaunay, que ha bailado con Pina Bausch, recorri¨® el hall con la marcha y los gestos tan carcater¨ªsticos de la desaparecida core¨®grafa alemana. ¡°El suelo es muy duro¡±, se?al¨® tras su propia actuaci¨®n,muy entregada y? tambi¨¦n muy did¨¢ctica, el bailar¨ªn Javier Vaquero Ollero, un veterano de los museos que ha bailado asimismo en la T¨¤pies.

Hoy, domingo, de 11 a 15 h., se repite la experiencia. Ayer era gratis, hoy basta con pagar la entrada corriente del museo..