El arzobispado pide a la fiscal¨ªa que evite desahucios de personas vulnerables

El arzobispo de Madrid, cardenal Carlos Osoro, da un paso m¨¢s en su empe?o de reclamar ¡°cambios legales¡± para suspender los desahucios de personas vulnerables, adem¨¢s de medidas de promoci¨®n de viviendas sociales y la incentivaci¨®n del alquiler social. A la?severa y detallada denuncia del problema que hizo llegar por carta su vicario de Pastoral Social e Innovaci¨®n, el sacerdote Jos¨¦ Luis Segovia Bernab¨¦, a los grupos parlamentarios, al Ministerio de Fomento, al Ayuntamiento y Comunidad de Madrid y al Defensor del Pueblo, se a?ade ahora la denuncia a la fiscal general del Estado, al fiscal decano de Menores y al fiscal jefe del Tribunal Superior de Justicia de Madrid, exigiendo su intervenci¨®n. ¡°Asistimos a la paradoja de que, por un lado, el sistema judicial expulsa de sus hogares a personas sin alternativa habitacional y, por otro, tanto la Administraci¨®n local como las entidades de intervenci¨®n nos volvemos locos para paliar los estragos de una hemorragia social imparable que requiere un abordaje preventivo. El Ministerio P¨²blico no puede tolerar que haya menores en las duras noches del invierno madrile?o durmiendo al raso¡±, les dice.

El escrito, firmado por Segovia Bernab¨¦, est¨¢ respaldado por entidades y organizaciones de la Iglesia cat¨®lica como Caritas Madrid, Justicia y Paz y la Mesa por la Hospitalidad de la Archidi¨®cesis.

¡°Con frecuencia, distintas entidades de intervenci¨®n social hemos de dar cobertura a personas que est¨¢n siendo lanzadas de sus hogares y que, en no pocos casos, cuentan con hijos e hijas menores, personas ancianas, enfermas o discapacitadas¡±, denuncian despu¨¦s de expresar la consternaci¨®n que les produjo, entre otros casos, el de la mujer que, ¡°presa de la desesperaci¨®n, se arroj¨® por la ventana de su domicilio cuando iba a ser desahuciada¡± de su vivienda en la calle Ramiro II por no poder pagar el alquiler.

Hace dos semanas, el arzobispado ped¨ªa a las autoridades la reforma de la Ley de Arrendamientos Urbanos y un plan de construcci¨®n urgente de un n¨²mero no inferior a 20.000 viviendas sociales, ¡°para que el derecho a la vivienda no sea un derecho desahuciado¡±. Ahora, insiste ante la Fiscal¨ªa que la ausencia de suficientes viviendas sociales ¡°impide un tratamiento preventivo de situaciones que desembocan en un incremento notable de familias que no pueden pagar los alquileres de mercado, estando abocadas a terminar en una situaci¨®n de personas sin hogar por desahucio¡±.

¡°Esto se hace especialmente insoportable cuando los lanzamientos afectan a menores de edad. En templos parroquiales hemos tenido que acoger a familias con ni?os y ni?as. Es inconcebible que en una ciudad del Primer Mundo como Madrid hayamos tenido que abrir puertas a pap¨¢s y mam¨¢s con ni?os en brazos empapaditos y ateridos de frio porque estaban a la intemperie, ayunos de la efectividad del derecho a una vivienda digna y adecuada¡±, a?ade la denuncia.

Partiendo del principio de que el Ministerio Fiscal tiene encomendada ¡°la preciosa tarea¡± de defender a los menores, incapaces y personas v¨ªctimas de la vulnerabilidad, el arzobispado pide, entre otra medidas, que los fiscales de turno ordenen la suspensi¨®n cautelar de la ejecuci¨®n de desahucios que afecten a menores, incapaces o personas vulnerables, hasta que, a la mayor brevedad, se asegure previamente que est¨¢s personas en situaci¨®n de extremada fragilidad cuenten con una alternativa residencial. ¡°As¨ª lo demanda el sentido com¨²n y lo exige la efectividad del conocido principio del inter¨¦s superior del menor, aut¨¦ntico principio rector, norma sustantiva y criterio hermen¨¦utico, que, en otro caso, quedar¨ªa reducido a chatarra ret¨®rica. El Ministerio P¨²blico no puede tolerar que haya menores en las duras noches del invierno madrile?o durmiendo al raso¡±.