El director de la c¨¢rcel de Brians 1 dimite por el acoso de funcionarios

Cuando asumi¨® el mando de la c¨¢rcel barcelonesa de Brians 1, hace solo un a?o y tres meses, Josep Font sustituy¨® a la treintena de funcionarios asignados a las celdas de aislamiento (el pol¨¦mico DERT) e instal¨® c¨¢maras de vigilancia. Esas medidas y el talante ¡°autoritario¡± de Font enojaron a los sindicatos, que desde entonces exigen su dimisi¨®n. Sus deseos se han cumplido este mi¨¦rcoles: la consejera de Justicia, Ester Capella, anunci¨® que Font hab¨ªa presentado su dimisi¨®n irrevocable cansado de recibir ¡°amenazas de muerte¡± de los trabajadores, que est¨¢n siendo investigadas. Los sindicatos replican que es una ¡°destituci¨®n encubierta¡±.

Josep Font es un hist¨®rico de las prisiones catalanas. A sus 58 a?os, ha llevado las riendas de siete centros penitenciarios, como Quatre Camins, Puig de les Basses o Lledoners, y fue el ¨²ltimo director de la Modelo de Barcelona antes de su cierre, en 2017. En oto?o de ese a?o fue asignado a su ¨²ltima misi¨®n: dirigir la c¨¢rcel de Brians 1 y poner orden en el Departamento Especial de R¨¦gimen Cerrado (DERT, por sus siglas en catal¨¢n), unidad con p¨¦sima fama entre las asociaciones que defienden los derechos de los presos por ser el lugar donde se ha registrado un mayor n¨²mero de muertes bajo custodia.

¡°Es como Atila, por donde pasa siembra discordia¡±, opina el responsable del sindicato CSIF, Juan Luis Escudero, que considera la salida de Font ¡°una gran noticia¡±. ¡°Cuando fue nombrado en Brians 1, ya avisamos de que no era buena idea. Es prepotente y act¨²a de forma autoritaria, como un alcaide¡±, a?ade. Una de las primeras medidas de Font fue renovar a los funcionarios del DERT. All¨ª est¨¢n las celdas en las que los internos especialmente peligrosos o que han cometido infracciones graves pasan, en soledad, m¨¢s de 20 horas al d¨ªa.

Asociaciones pro derechos humanos han denunciado en los ¨²ltimos a?os la realidad de las celdas de aislamiento y sus efectos sobre la salud f¨ªsica y mental de los internos. El Parlament acogi¨®, en 2017, un grupo de trabajo sobre el asunto. Las entidades pusieron el acento en la situaci¨®n de Brians 1, donde en los ¨²ltimos a?os se han quitado la vida al menos tres internos: Raquel E., Gina G. o Lewis A. Este ¨²ltimo ten¨ªa 29 a?os cuando ingres¨® como preventivo en Brians 1 y fue llevado al DERT tras enfrentarse a un funcionario. Llevaba cinco d¨ªas all¨ª cuando utiliz¨® las s¨¢banas como soga y se quit¨® la vida.

En una entrevista en TV-3, la consejera Capella anunci¨® la dimisi¨®n de Font, consecuencia de las amenazas de muerte por parte, dijo, de funcionarios de prisiones. ¡°Las personas tienen sus l¨ªmites¡±. Diversas fotograf¨ªas muestran la naturaleza de esa persecuci¨®n: una cruz azul plantada frente a la prisi¨®n, un monigote descabezado atado a una se?al de tr¨¢fico con el cartel ¡°Font fora¡± o unas pintadas en los vestuarios donde se acompa?a el nombre del director con un ¡°descanse en paz¡±. El servicio de inspecci¨®n ¡ªuna suerte de ¡°asuntos internos¡± en prisi¨®n¡ª y los Mossos investigan los hechos.

M¨¢s all¨¢ de la responsabilidad individual por las amenazas, Capella vincula el malestar de los funcionarios con el plan impulsado por Font. Fuentes de Justicia recuerdan que, durante su etapa, se han reducido un 30% de los ingresos en los DERT. Y que el director de Brians 1 instal¨® c¨¢maras para controlar espacios con escasa visibilidad. Capella se pregunt¨® ¡°a qui¨¦n no le puede interesar que un centro penitenciario tenga garant¨ªas¡±. ¡°Cambiar¨¢ la direcci¨®n, pero se mantendr¨¢n las pol¨ªticas¡±, a?aden fuentes de Justicia.

Las afirmaciones de la consejera sublevaron a los sindicatos, que consideran el episodio una mera ¡°cortina de humo¡± para ocultar la ¡°nefasta gesti¨®n¡± de Font. ¡°Las c¨¢maras de videovigilancia ayudan garantizar la seguridad y la integridad f¨ªsica de los internos y los trabajadores¡±, se?al¨® la UGT en un comunicado. Escudero tambi¨¦n se muestra partidario de las c¨¢maras, pero critica que Font instalara algunas ¡°enfocando a los despachos de los funcionarios¡±.

Una gesti¨®n pol¨¦mica

Aunque se muestran ¡°sorprendidos¡± por unas amenazas de las que, aseguran, no ten¨ªan noticias, los sindicatos no creen que ese sea el motivo de la salida de Font. ¡°Es una destituci¨®n encubierta¡±, dice UGT. ¡°Le han ofrecido una salida digna para camuflar toda la conflictividad laboral y presentarlo como v¨ªctima¡±, lamenta Escudero. El director de Servicios Penitenciarios, Armand Calder¨®, tilda ese argumento de ¡°falso¡± y defiende la labor desarrollada por Font para ¡°dar un salto de calidad¡± en Brians. Calder¨® subraya que el director ten¨ªa el respaldo de ¡°la mayor¨ªa de trabajadores¡±, aunque los sindicatos lo niegan y le acusan de ordenar cambios sin consultarlo. Como cuando, en enero, cre¨® un m¨®dulo mixto de mujeres y hombres entre los que hab¨ªa diversos presos condenados por delitos contra la libertad sexual. El reglamento penitenciario proh¨ªbe que en los m¨®dulos mixtos haya agresores sexuales.

En Brians 1 hay 94 funcionarios de baja. Eso supone el 22% de toda la plantilla, el triple de la media de las prisiones catalanas. Los sindicatos defienden que son trabajadores que piden ¡°apoyo psicol¨®gico¡± porque ¡°no aguantan la presi¨®n del director¡±. El Departamento de Justicia esgrime el dato, pero en otra direcci¨®n: como una prueba de la presi¨®n a la que Font estaba sometido por parte del colectivo.