Barcelona elimina por decreto los antidisturbios de la Guardia Urbana
El equipo de Colau ha mantenido decenas de reuniones con los sindicatos sin llegar a un acuerdo
El gobierno de Ada Colau aprobar¨¢ en los pr¨®ximos d¨ªas un decreto de alcald¨ªa con el que elimina, a cuatro meses de las elecciones, la unidad de antidisturbios de la Guardia Urbana. El gobierno cumple as¨ª una de las promesas electorales con las que se present¨® a los comicios de 2015. El comisionado de Seguridad, Amadeu Recasens, junto con su equipo se ha reunido en el ¨²ltimo a?o m¨¢s de una veintena de ocasiones con los delegados sindicales del cuerpo policial para llegar a un acuerdo en la supresi¨®n de la unidad y la creaci¨®n de una nueva secci¨®n. Tras decenas de encuentros, el acuerdo no ha sido posible por lo que Bcom¨² ha decidido poner en marcha la nueva unidad en los pr¨®ximos d¨ªas pese a la negativa sindical.
El programa de Ada Colau en 2015 era claro: ¡°Disolver de manera progresiva las unidades de polic¨ªa administrativa y de seguridad (UPAS)¡±. Un grupo de agentes antidisturbios dise?ado por Joan Clos, perpetuado por Jordi Hereu y transformado en Unidad de Soporte Policial (USP) por Xavier Trias. Una de las unidades que m¨¢s denuncias ha recibido por actuaciones relacionadas con abusos de poder y con casos sonados como el de Ciutat Morta o el desalojo del 15M en plaza Catalunya.
Cuando Colau se hizo con la alcald¨ªa puso al frente de la Urbana a Recasens y ¨¦ste exigi¨® a los agentes que dejaran de realizar funciones de ¡°orden p¨²blico¡±. Pese a ello, la Urbana segu¨ªa teniendo agentes vestidos de antidisturbios pero sin capacidad para dispersar manifestaciones o realizar cargas policiales.
El comisionado puso en marcha el dise?o de un nuevo plan director que ordenara el cuerpo policial bajo tres premisas: ¡°Territorio, proximidad y transparencia¡±. El plan director, finalizado en mayo de 2016, contemplaba no s¨®lo la supresi¨®n de la USP sino la creaci¨®n de la Unidad de Refuerzo a la Proximidad y Emergencia (URPE). Un cuerpo que segu¨ªa vestido de antidisturbios pero que estaba destinado a la gesti¨®n de emergencias protecci¨®n de espacios p¨²blicos, grandes concentraciones, protecci¨®n del medio ambiente¡
Fue entonces cuando empezaron a negociar con los sindicatos: Sapol, CCOO y UGT la supresi¨®n de la USP. Los representantes de los trabajadores pretend¨ªan que el centenar de miembros de USP se convirtieran en URPE. Un cambio de nombre sin m¨¢s. Recasens no cre¨ªa en esa opci¨®n ya que la URPE estaba integrada por m¨¢s agentes, 160, y necesitaba otro tipo de formaci¨®n que no fuese el curso de antidisturbios que hab¨ªan realizado los miembros de la USP.
Las negociaciones segu¨ªan cuando se produjo el atentado de la Rambla en agosto de 2017. La Urbana ya llevaba meses trabajando con los bomberos de Par¨ªs que hab¨ªan gestionado el atentado de la sala Bataclan en noviembre de 2015 en Par¨ªs. A¨²n as¨ª, en la Rambla la USP fue la primera que lleg¨® al lugar de los hechos. Pese a la r¨¢pida intervenci¨®n el cuerpo detect¨® que faltaba cierta formaci¨®n en coordinaci¨®n y tratamiento de emergencias que el curso y proceso de selecci¨®n de URPE hubiera solucionado.
Los sindicatos segu¨ªan defendiendo a los miembros de USP y el equipo de gobierno concluy¨® que todos los agentes de la USP que quisieran formar parte de la URPE deb¨ªan pasar el proceso de selecci¨®n. Pese a ello, el equipo de Colau cedi¨® y mantuvo que aquellos agentes que no hicieran o pasar¨¢n el curso se les conservar¨ªa en la URPE realizando labores complementarias. La respuesta de los sindicatos sigui¨® siendo negativa y Colau ha optado por firmar, en los pr¨®ximos d¨ªas, un decreto de supresi¨®n de la USP y la creaci¨®n de la URPE con un nuevo nombre: Unidad de Refuerzo para las Emergencias y la Proximidad (UREP). En abril los sindicatos se enfrentar¨¢n a elecciones. Colau en mayo.
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