¡°Me qued¨¦ sin contrato y ah¨ª empez¨® mi calvario¡±
La boliviana Carmen Leigue, a punto de ser expulsada del pa¨ªs, consigue que le reconozcan el arraigo tras 17 a?os de residencia en Espa?a
Carmen Leigue, boliviana de 63 a?os llegada a Espa?a en 2001, se qued¨® hace dos a?os sin contrato de trabajo. "No logr¨¦ completar el cupo para renovar mi permiso de residencia y ah¨ª empez¨® mi calvario", explica despu¨¦s de que el Gobierno espa?ol la detuviese y ordenase a finales de enero su expulsi¨®n porque carec¨ªa de papeles. Una decisi¨®n que el Ejecutivo revoc¨® este lunes tras un recurso de la abogada de Leigue que acredita el arraigo que un juzgado le neg¨® recientemente.
Esta mujer, que se dedicaba en Bolivia al comercio, aterriz¨® en Valencia 17 a?os atr¨¢s con su hija de ocho a?os y se qued¨®. A los pocos meses comenz¨® a cuidar de un hombre de 84 a?os enfermo y consigui¨® regularizar su situaci¨®n. Hasta que, despu¨¦s de la crisis econ¨®mica, con m¨¢s de 60 a?os y dedic¨¢ndose a la limpieza o al cuidado de mayores y ni?os [sectores muy afectados por la precariedad] se qued¨® sin trabajo y cay¨® en una irregularidad sobrevenida, una situaci¨®n en la que los inmigrantes pierden su tarjeta de residencia porque no pueden aportar la cotizaci¨®n m¨ªnima exigida a la Seguridad Social.
"Antes de la crisis no hab¨ªa tantas dificultades, le hac¨ªan contrato aunque ella se pagaba la Seguridad Social", relata su hijo Erick, que tiene la residencia permanente en Espa?a e hijos nacidos en el pa¨ªs. Carmen consult¨® cuando se qued¨® sin contrato y le aconsejaron que solicitase la tarjeta porque llevaba muchos a?os en el pa¨ªs y ten¨ªa posibilidades de conseguirla pero se la denegaron. Luego le lleg¨® una carta donde le ped¨ªan que regularizase su situaci¨®n o la expulsaban. "Ah¨ª es cuando me movilic¨¦ pero no consegu¨ªa un contrato, la gente me ofrec¨ªa trabajo pero no un contrato", dice echando la vista atr¨¢s.
El 21 de enero todo se precipit¨®. "Iba con mi hija a una tienda de m¨®viles para arreglar el tel¨¦fono y cuando fuimos a entrar una pareja de paisano nos cerr¨® el paso, me mostraron su identificaci¨®n de polic¨ªa y me pidieron la documentaci¨®n. Les dije que ten¨ªa el NIE caducado y me detuvieron porque no ten¨ªa papeles", rememora. La llevaron a una comisar¨ªa de Paterna (Valencia), donde le quitaron sus efectos personales, las gafas, el cintur¨®n, los cordones y la metieron en un calabozo. Fue la abogada de oficio quien la sac¨® horas despu¨¦s.
Leigue acudi¨® confiada la semana pasada a la comisaria al control de firma y ya no la dejaron salir. En 72 horas saldr¨ªa expulsada de Espa?a en un vuelo hacia Bolivia y si no hab¨ªa plaza ir¨ªa a un Centro de Internamiento de Extranjeros (CIE), cuenta Carmen que le informaron. "Ni me lo pod¨ªa creer, me sent¨ª fatal. No he hecho nada malo, no soy una criminal, les dije.? Fue duro estar all¨¢ abajo",? dice de su estancia en la celda.
La plataforma CIEs No de Valencia alert¨® sobre su caso y despu¨¦s de casi tres d¨ªas retenida, la delegaci¨®n del Gobierno en la Comunidad Valenciana paraliz¨® la expulsi¨®n tras el recurso de la abogada de la mujer. El desenlace lleg¨® este lunes cuando el Ejecutivo asegur¨® que reconoc¨ªa el arraigo de Leigue y revocaba su deportaci¨®n.
El calvario de Carmen queda atr¨¢s.? "Cuando sal¨ª del calabozo [el jueves 14 de febrero] me sent¨ª contenta, feliz. Me di cuenta de que mucha gente se hab¨ªa interesado por mi. Gracias a ellos, estoy aqu¨ª ahora", reconoce. No se han separado de su lado ni su hijo Erick ni Txema Toribio, de la ONG Psc¨®logos sin Fronteras, organizaci¨®n a la que Carmen est¨¢ ligada desde hace a?os.
"La burocracia es brutal", afirma su hijo Erick tratando de explicar c¨®mo su madre se ha visto en una situaci¨®n as¨ª. "Cuando has iniciado un procedimiento para solicitar la residencia y te lo deniegan, no puedes abrir otro hasta pasado un tiempo", agrega. Cuando la detuvieron, lo intentaron de nuevo: "Buscamos un abogado pero nos dijo que hasta que no llegara la carta de expulsi¨®n no pod¨ªamos volver a solicitar el arraigo. Es todo muy complicado".
Toribio no entiende la decisi¨®n del juzgado de Valencia que neg¨® el arraigo a Leigue en plena crisis. "Pueden decir que Carmen no ten¨ªa los documentos suficientes pero la ley [de Extranjer¨ªa] recomienda para personas que residen de forma continuada en Espa?a m¨¢s de cinco a?os, y ese es el caso de Carmen, una multa pero no la expulsi¨®n", concluye.
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