Barcelona lleva a la Fiscal¨ªa un caso de acoso a inquilinos

El Ayuntamiento de Barcelona llevar¨¢ a la Fiscal¨ªa un caso de acoso inmobiliario de la propiedad de un edificio a sus inquilinos para que se marchen. Por la v¨ªa administrativa, el consistorio ya ha resuelto imponer a la propiedad una multa de 90.000 euros por no conservar el edificio. El caso afecta a una finca del barrio de Sant Antoni, y es la primera vez que el gobierno municipal demanda un caso de mobbing inmobiliario acogi¨¦ndose a la Ley del Derecho a la Vivienda de 2007.

Fueron, simult¨¢neamente, el gobierno de la alcaldesa Ada Colau y las entidades que luchan por el derecho a la vivienda ¡ªel Sindicato de Inquilinos, el Observatorio DESC y la PAH¡ª quienes en verano pasado presentaron un formulario para demandar por la v¨ªa administrativa los casos de acoso: cuando un propietario abandona el mantenimiento de un edificio o incluso presiona a sus inquilinos con el objetivo de echarles.

La pr¨¢ctica es frecuente actualmente en la ciudad en edificios que han sido comprados enteros por inversores que pretenden vaciarlos de vecinos para reformarlos y alquilarlos por un precio m¨¢s elevado. Entre las entidades y el Ayuntamiento, anunciaron demandas por una docena de casos detectados en las 70 fincas de la ciudad compradas por sociedades de inversi¨®n. Por la v¨ªa administrativa, las multas por acoso oscilan entre 90.000 y 900.000 euros.

Y uno de los casos que presentaron ese d¨ªa las entidades es precisamente el de la finca cuya propiedad ser¨¢ denunciada a la Fiscal¨ªa, la del n¨²mero 92 de la calle de Floridablanca, que tiene 21 pisos. Los inquilinos Alpha Mikeliunas y Fran Ortega, treinta?eros, demandaron en verano a la propiedad con el apoyo del Sindicato de Inquilinos.

Mikeliunas lleva en el piso desde 2010 ¡ªcuando el mercado de Sant Antoni no estaba reformado y el barrio no estaba de moda como ahora¡ª y encaden¨® varios contratos hasta que en verano pasado recibi¨® un burofax, como el resto de vecinos, avisando de que no les renovaban. Relata que llevan a?os soportando acoso por parte de la propiedad, ¡°la familia Fradera Bes, due?a del famoso Instituto Francis de belleza¡±, se?ala.

Termitas y aver¨ªas

La inquilina relata una sucesi¨®n de irregularidades: ¡°Abuso en los contratos, falta de mantenimiento, termitas en la carpinter¨ªa, tuber¨ªas tan viejas que la presencia de plomo en el agua que sale por el grifo es diez veces superior a lo permitido, bajantes de Uralita rotos...¡±. O que ¡°cuando se estropea la iluminaci¨®n de la escalera, las antenas de tele o el ascensor pasan d¨ªas hasta que se reparan¡±. Del aviso por burofax y la finalizaci¨®n del contrato, han pasado ocho meses, pero la pareja se niega a marcharse y pagan el alquiler tras un rosario burocr¨¢tico: burofax, un giro postal, acudir cada vez al juzgado...

El primer teniente de alcalde, Gerardo Pisarello, celebr¨® ayer lo que calific¨® de ¡°una nueva conquista del movimiento vecinal y del Sindicato de Inquilinos en defensa del derecho a la ciudad¡± y record¨® que el Ayuntamiento tambi¨¦n ha multado a grandes propietarios por mantener vac¨ªos edificios enteros en el Eixample.

En verano, al anunciar que comenzaban las demandas por acoso a propietarios, el teniente de alcalde de Derechos de Ciudadan¨ªa, Jaume Asens, habl¨® de ¡°pr¨¢cticas mafiosas¡± y alert¨®: ¡°Queremos mandar un mensaje a los fondos que asedian esta ciudad de que no permitiremos sus pr¨¢cticas¡±. Asens tambi¨¦n apunt¨® que el consistorio no renunciaba a la v¨ªa penal. El consistorio inform¨® ayer ha detectado que el anuncio en julio ha tenido un ¡°efecto disuasorio de pr¨¢cticas discriminatorias y abusivas¡±. Actualmente el Ayuntamiento trabaja en otros 14 casos en los distritos del Eixample y Ciutat Vella.