Bonig busca el cara a cara con Puig para liderar el bloque de la derecha
El cuarto y ¨²ltimo debate de las elecciones valencianas mostr¨® un tono menos bronco que el de las dos contiendas estatales
En los dos debates entre los candidatos a la presidencia del Gobierno las acusaciones directas de mentir fueron tan numerosas como el tono abrupto y desabrido. En el ¨²ltimo debate entre los cinco candidatos a la presidencia de la Generalitat, celebrado esta noche en ? Punt, se pidi¨® ¡°no faltar a la verdad¡± y, en todo caso,? ¡°no manipular los datos y las estad¨ªsticas¡±. Y el ambiente discurri¨® por unos derroteros m¨¢s correctos, con interrupciones y enfrentamientos personales fuera del argumentario, pero sin demasiada acritud, sin apenas solaparse las voces. Tal vez los presidenciables valencianos Ximo Puig (PSPV-PSOE), M¨°nica Oltra (Comprom¨ªs), Isabel Bonig (PP), Toni Cant¨® (Ciudadanos) y Rub¨¦n Mart¨ªnez Dalmau (Unides Podem) hab¨ªan aprendido la lecci¨®n o son de otra pasta o en Madrid todo se vive de manera m¨¢s intensa.
El ¨²ltimo de los cuatro debates auton¨®micos volvi¨® a dejar claro que en el flanco izquierdo el PSPV-PSOE y Comprom¨ªs forman un equipo. Las cr¨ªticas de Oltra en los primeros d¨ªas de la campa?a a los socialistas quedaron atr¨¢s. S¨ª que hubo cr¨ªticas de Dalmau a los dos partidos del Gobierno valenciano, pero dentro de un orden, para diferenciarse hacia la izquierda: ¡°El Consell tiene que escuchar m¨¢s¡±. Tambi¨¦n reproch¨® que en la comunidad el tama?o de la econom¨ªa sumergida sea del 25%. Insisti¨® en que hay que hacer mucho m¨¢s. Las encuestas son tozudas y apuntan a que se necesitar¨¢n para volver a gobernar.
En el lado derecho, hubo menos entendimiento, aunque el acuerdo entre ellos tambi¨¦n se da por sentado si los n¨²meros cuadran con el apoyo de Vox, el gran ausente del debate (solo participaron los partidos con representaci¨®n parlamentaria, como marca la Junta Electoral). Cant¨® no dej¨® pasar ocasi¨®n de recordar que ¨¦l quiere pactar con el PP, pero tampoco olvid¨® golpear a su socio potencial por el flanco de la corrupci¨®n cada vez que puede. No entr¨® la candidata del PP a responder esas acusaciones, tampoco a las de Oltra o Dalmau. Bonig eligi¨® un solo rival en el debate. Busc¨® el cara a cara una y otra vez con el presidente Ximo Puig. Y solo le respond¨ªa a ¨¦l. En esta ocasi¨®n dej¨® de lado la letan¨ªa de propuestas aprendidas de d¨ªas anteriores y su tono m¨¢s presidencial. Fue m¨¢s flexible y esta vez reaccion¨® a las cr¨ªticas del socialista, buscando erigirse en la l¨ªder del bloque de la derecha
Tambi¨¦n pas¨® al ataque pertrechada con recortes de peri¨®dico, informes o gr¨¢ficos para reforzar sus argumentos, aunque al espectador le costara distinguir lo que dice en ellos. ¡°Aqu¨ª tenemos el informe que hicieron los expertos en 2013 [nombrados por el Gobierno de Rajoy]. Saben qui¨¦n lo voto, el PP solo. Ahora todos lo comparten¡±.
Para contestarle, Puig recurri¨® a veces a su ¡°falta de credibilidad¡± y a la manipulaci¨®n de los datos. M¨¢s eficaz fue recordarles al PP y a Ciudadanos que su voto negativo a los presupuestos ¡°con los independentistas catalanes¡± les quit¨® ¡°1.400 millones¡± a los valencianos. Se le vio m¨¢s ¨¢gil al actual presidente de la Generalitat en la primera parte del debate, incidiendo en los logros sociales y econ¨®micos del Govern del Bot¨¤nic y en el peligro del pacto con la extrema derecha para la existencia de la propia autonom¨ªa. En al segunda parte, recurri¨® m¨¢s al argumentario.
Tambi¨¦n Cant¨® eligi¨® rival para un cara a cara pero un tanto inesperado, el candidato de Unides Podem. El l¨ªder de Ciudadanos pregunt¨® una y otra vez ¡°por qu¨¦ los vascos tienen m¨¢s recursos¡± que el resto de espa?oles. El profesor de Derecho Constitucional Mart¨ªnez Dalmau le remiti¨® de forma gen¨¦rica a la Carta Magna, sin bajar al detalle y finalmente desisti¨®.
Quien se qued¨® sin pareja para la disputa dial¨¦ctica fue Oltra. Bonig pr¨¢cticamente la ignoraba. Solo Cant¨® busc¨® en alg¨²n momento el choque con ella en el bloque de financiaci¨®n auton¨®mica y de la politica educativa. Ella lo aprovech¨® en el comienzo del debate y eligi¨® a qu¨¦ cr¨ªticas responder o a qu¨¦ propuestas atacar del flanco derecho: ¡°Cuando hablamos de impuestos, hablamos de servicios p¨²blicos. Cuando se bajan impuestos, la otra cara de la moneda son los recortes en la sanidad o la educaci¨®n¡±. Oltra acus¨® a Cant¨® de buscar el beneficio s¨®lo de las clases m¨¢s ricas. Este le respondi¨® que mientras ella est¨¢ ¡°obsesionada con los ricos¡±, Ciudadanos lo est¨¢ con ¡°los pobres¡±.?
Cant¨® insisti¨® en que el Gobierno del Bot¨¤nic no ha acabado con los barracones, y que han aumentado las listas de espera en las intervenciones quir¨²rgicas no urgentes. Puig y Oltra le replicaron que las cosas han mejorado, pero necesitan otra legislatura porque la herencia era nefasta, incluyendo una ocultaci¨®n de datos y de la realidad. Pues en Andaluc¨ªa, mucho m¨¢s, coincidieron Bonig y Cant¨®, cuyos partidos, PP y Ciudadanos, son socios de Gobierno en esa autonom¨ªa, con el apoyo parlamentario de Vox, que ayer se dio un ba?o de multitudes en el Museu de les Ci¨¨ncies en el mitin m¨¢s concurrido de la Comunidad Valenciana.
Poco a poco el discurso de Oltra, y no solo el de ella, fue cayendo en los argumentos y en las frases que se han ido desplegando durante la larga campa?a. El cansancio hizo mella en un debate que super¨® las dos horas de duraci¨®n. Hoy, viernes, es el ¨²ltimo d¨ªa de campa?a.
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