Los manteros piden pactar un horario con Colau en el frente mar¨ªtimo

M¨¢s de un centenar de manteros se presentaron este mi¨¦rcoles en el Ayuntamiento de Barcelona para pedir una cita con la alcaldesa, Ada Colau. Buscan llegar un acuerdo despu¨¦s de verse asfixiados por el nuevo dispositivo policial dise?ado por el Consistorio que les impide colocarse en el frente mar¨ªtimo y el resto de puntos tur¨ªsticos de la ciudad. Una portavoz confirm¨® que la alcaldesa ha recibido la petici¨®n, pero declin¨® detallar si recibir¨¢ a los vendedores. Colau se ha mantenido alejada de la nueva acci¨®n contra el top manta, que ha liderado el socialista Albert Batlle.

Cerca de un millar de manteros deambulan desde el lunes por la ciudad buscando un hueco en el colocar sus productos y venderlos de manera clandestina a los turistas. Pero la Guardia Urbana y los Mossos tienen la orden de no dejar extender ni una sola manta. Donde se han aplicado con m¨¢s ¨¦nfasis es en el frente mar¨ªtimo, el lugar predilecto de los vendedores ambulantes. Un centenar de polic¨ªas saturan la calle de diez de la ma?ana a diez de la noche, sin que los manteros osen ni siquiera acercarse.

¡°As¨ª no podemos comer ni pagar el alquiler ni nada¡±, lamenta uno de los muchos vendedores que despu¨¦s de una peque?a asamblea al lado del metro de la Barceloneta, han decidido subir hasta la plaza de Sant Jaume para pedir una reuni¨®n con la alcaldesa. Al¨ª, de 36 a?os y originario de Senegal, lo ha hecho por el resto: ha acudido a la oficina de atenci¨®n al ciudadano y ha solicitado una cita.

¡°Nos gustar¨ªa que nos recibiera antes del viernes¡±, explica Ali a los medios, una vez ya ha dado cuenta a sus compatriotas de las gestiones que ha hecho. Uno de sus objetivos es pactar un horario. ¡°Podemos reducir las horas¡±, explica. Sergio, de 38 a?os, propone una jornada reducida, ¡°de seis a doce, por ejemplo¡±, dice. El Ayuntamiento no confirma si Colau les recibir¨¢, mucho menos si lo har¨¢ esta misma semana, como reclaman.

Mientras tanto, los manteros juegan al gato y al rat¨®n con la polic¨ªa. Cuando los agentes levantan el dispositivo, a las diez de la noche, algunos de ellos intentan vender algo en el Moll de la fusta. ¡°Pero a esa hora ya no quedan casi turistas¡±, se queja uno de los vendedores.

El nuevo concejal socialista, Albert Batlle, fue el responsable de anunciar el nuevo plan contra el top manta. Saturando el espacio con polic¨ªa espera que los vendedores se vayan. El consejero de Interior, Miquel Buch, celebr¨® el cambio de ¡°actitud¡± del Ayuntamiento. Y la alcaldesa tach¨® de ¡°impropias¡± las palabras de Buch.