Granizada en el supermercado, lodo en el ultramarinos

Tras una tormentosa noche, Arganda del Rey amaneci¨® el martes atareada. Los comerciantes se afanaban por sacar granizo de sus locales: unos con cubos, otros a paladas, algunos con carretillas. Muchos vecinos valoraban los da?os en sus hogares. Decenas de operarios limpiaban las calles. Y los funcionarios municipales recog¨ªan datos de los vecinos afectados por la explosiva tormenta que el pasado lunes pas¨® por la Comunidad de Madrid. El agua dej¨® huella, sobre todo en el sur. No ha habido da?os personales, solo materiales. Cuantiosos, eso s¨ª. [Fotogaler¨ªa: Las inundaciones en Madrid / Previsi¨®n del tiempo]

Si el sur fue el epicentro de las precipitaciones ¡ªhubo inundaciones y da?os en Valdemoro, Pinto, Rivas Vaciamadrid, Getafe, Fuenlabrada y Madrid¡ª, Arganda se convirti¨® en la zona cero de las mismas. ¡°El centro est¨¢ muy afectado¡±, contaba el alcalde, el socialista Guillermo Hita. El rastro de da?os en la localidad sigue el eje de las calles Real, Juan de la Cierva y Misericordia. Una l¨ªnea que atraviesa el municipio de 55.000 habitantes y cruza la plaza de la Constituci¨®n. A esa v¨ªa la llaman la arroy¨¢ ¡ª¡°de toda la vida¡±¡ª, porque en ella se concentran los arroyos de la zona y escurren ladera abajo. ¡°La orograf¨ªa de Arganda hace que esto sea el barranco, el cauce normal de las aguas, que es donde se ha producido la riada importante¡±, se?al¨® el alcalde. ¡°A lo largo de la historia del municipio, se han hecho esfuerzos important¨ªsimos para controlar esas avenidas de agua, pero es imposible t¨¦cnicamente hacer una infraestructura que recoja la precipitaci¨®n que cayeron el lunes¡±, continuaba Hita. Ese d¨ªa, en menos de 20 minutos, precipitaron 57 litros de agua por metro cuadrado en Arganda. Solo Tielmes super¨® ese registro (65,4). En la capital cayeron entre los 32,5 y 36,6 litros por metro cuadrado.

La tormenta empez¨® poco antes de las 18.00 con truenos y rel¨¢mpagos. Luego lleg¨® el granizo, tama?o pelota de golf. Despu¨¦s, la lluvia y el caos. La Agencia Estatal de Meteorolog¨ªa (Aemet) hab¨ªa avisado horas antes de la virulencia de la tormenta, asociada a una depresi¨®n aislada en niveles altos (DANA). Es decir, una masa de aire muy fr¨ªo que se separa de una corriente de aire principal y empieza a moverse de manera err¨¢tica en la atm¨®sfera. Cuando esa DANA se encontr¨® con una masa de aire caliente, se produjo una convulsi¨®n.

En escasos minutos, las alcantarillas colapsaron llenas de granizo; el agua borboteaba por ellas. Salt¨® la luz en varios locales. M¨¢s y m¨¢s agua llegaba a la arroy¨¢. El torrente empez¨® a arrastrar coches, bancos, maquinaria de obra. Todos los argande?os y argande?as recuerdan ver el agua correr impetuosamente por esta calle, ¡°pero nunca as¨ª de fuerte¡±, repet¨ªan muchos vecinos. ¡°En 1972 hubo una que fue muy fuerte. Falleci¨® un hombre. Me lo ha contado mi madre: era uno de sus amigos¡±, contaba Patricia, de 36 a?os.

¡°Cuando empez¨® a llover, estaba en el coche. Aguant¨¦ un poco para salir, pero al ver la riada que se estaba formando, me baj¨¦. El coche fue arrastrado y ha quedado siniestro¡±, contaba un vecino en la Oficina de Atenci¨®n a la Ciudadan¨ªa, en el Ayuntamiento, en la plaza de la Constituci¨®n; uno de los dos puntos que el Consistorio ha habilitado para apoyar a los vecinos afectados por el agua (el otro est¨¢ en el barrio de La Poveda).

A Patricia, de 36 a?os, se le hab¨ªa inundado el trastero: ¡°A mis vecinos de enfrente les subieron las aguas residuales por el v¨¢ter. Muy desagradable¡±. El granizo se hab¨ªa colado en el garaje de otro vecino convirti¨¦ndolo en una gigantesca c¨¢mara de congelaci¨®n con su coche dentro. El hielo tambi¨¦n trep¨® por los inodoros de la sede del PP local. Y por las puertas de decenas de comercios, abiertos cuando sucedi¨® todo. A escasas dos horas de abrir, ya hab¨ªan pasado por la oficia de damnificados un centenar de personas: ¡°Esperamos que haya muchas m¨¢s seg¨²n avancen los d¨ªas¡±, explicaba Alicia Ferreiro, coordinadora municipal de Atenci¨®n a la Ciudadan¨ªa, ¡°hoy [por ayer] la gente est¨¢ limpiando sus negocios y casas¡±.

La tormenta del lunes dur¨® 20 minutos. Cuando pas¨®, Irene Blesa, de 20 a?os, se acerc¨® al local de Hern¨¢ndez fot¨®grafos. Estuvo hasta las cuatro de la ma?ana achicando agua. ¡°Los due?os son amigos de la familia de toda la vida y yo estuve trabajando con ellos el verano pasado¡±, contaba ayer a media ma?ana sin soltar la pala con la que llevaba m¨¢s de tres horas sacando granizo del establecimiento. En la puerta del local se acumulaban kilos y kilos de bolas de hielo.

Un poco m¨¢s abajo, en la tienda de moda Sharrey no se pod¨ªa entrar: la ropa, las perchas y los bolsos destacaban en un manto blanco de m¨¢s de medio metro de altura. Con un mono y una pala, Rosa sacaba hielo junto a otros tres operarios. Les hab¨ªan llamado para ayudar a paliar los da?os: ¡°En total seremos unos 200 operarios y estaremos aqu¨ª hasta que nos digan¡±.

Muy cerca, la familia de Yon Phin Chin limpiaba el Mini Market, un peque?o supermercado que regentan. ¡°El agua entr¨® por una de las puertas y arrastr¨® todo hacia la otra. Parte de la mercanc¨ªa apareci¨® en la calle, cubierta de barro¡±, explicaba la mujer. A las puertas del Mini Market se escucha a un ni?o gritar: ¡°?Hay chupachups!¡±. Lanza a sus amigos una mirada mientras hunde sus manos en un mont¨ªculo de lodo. ¡°Tambi¨¦n, pipas¡±, informa. Sus tres amigos se acercan raudos y empiezan a hacer acopio de golosinas. ¡°Ahora las lavamos en la fuente y ya est¨¢¡±, dice otro sin disimular una sonrisa. "Calculo que hemos perdido m¨¢s de 10.000 euros¡±, continuaba Yon Phin Chin, "porque ten¨ªamos mucha mercanc¨ªa ya que vienen las fiestas". El municipio celebra sus festejos del 8 al 16 de septiembre y los vecinos esperan que la granizada no afecte a las celebraciones. "Para entonces, habremos recobrado la normalidad", afirmaba el alcalde.