La batalla por el control de la droga salta a la calle en Barcelona
J¨®venes a sueldo de mafias paquistan¨ªes resuelven con violencia sus disputas por la venta de hero¨ªna y coca¨ªna
Los hermanos Tanveer estaban cenando en casa cuando recibieron la llamada que iba a cambiarles la vida. Ocurri¨® el pasado domingo por la noche. Un amigo les pidi¨® acudir a Badalona a plantar cara a un grupo de chicos, paquistan¨ªes como ellos, con los que manten¨ªan una disputa. Los Tanveer, que viven en pleno coraz¨®n del Raval, subieron al metro y desembarcaron con otros ¡°20 o 30¡± j¨®venes en la estaci¨®n de Gorg poco antes de las 22.00. No iban armados. S¨ª lo estaban los de la banda rival, que les esperaban con machetes, catanas, un hacha, palos de hierro, patas de cabra (palancas de hierro), una pistola de fogueo y hasta un palo de cr¨ªquet, el deporte por antonomasia de Pakist¨¢n.
La sangrienta batalla, en la que participaron menores, se desat¨® en la rambla del Gorg, donde se construyen nuevos bloques de pisos con vistas al puerto. El lugar escogido para ajustar cuentas no est¨¢ lejos de Sant Roc, Artigues y La Salut, los barrios de Badalona que acogen ¡ªcon el permiso de Ciutat Vella, en Barcelona¡ª a buena parte de los 50.000 paquistan¨ªes que viven en Catalu?a (unos 20.600 solo en Barcelona). Los vecinos grabaron en v¨ªdeo la reyerta, que se desplaz¨® despu¨¦s hasta el interior del metro.
En el and¨¦n de una estaci¨®n apareci¨® muerto Ammad Tanveer, que vest¨ªa un ch¨¢ndal del Bar?a. El cad¨¢ver ten¨ªa ¡°heridas de arma blanca en la parte izquierda de la cara, en la pierna, en el brazo¡± y otras cinco heridas en la espalda, seg¨²n los atestados policiales a los que ha accedido EL PA?S. En la calle fueron encontrados, heridos, sus dos hermanos, Amir (21 a?os) y Saad (de 16) y otro joven. Todos ellos est¨¢n ingresados en el hospital. Tahrir Rafi, de la Asociaci¨®n de familias paquistan¨ªes de Espa?a, insiste en que los hermanos no tienen nada que ver con las drogas y que se vieron envueltos en una pelea que no iba con ellos.
Porque esa es la tesis con la que trabajan los Mossos: la pelea fue concertada y tiene como trasfondo las pugnas entre clanes por el control territorial de la venta de drogas. No es la primera vez que ocurre en Badalona, como confirma el concejal de Seguridad Rub¨¦n Guijarro. Pero nunca hab¨ªan sido de esa virulencia. Adem¨¢s del muerto y los tres heridos, el episodio dej¨® nueve detenidos. El juez ha ordenado el ingreso en prisi¨®n de seis de ellos por el riesgo, entre otras cosas, de que se produzcan nuevos enfrentamientos. Aunque la mayor¨ªa se han acogido a su derecho a no declarar, otros lo han hecho y el juez no les da ninguna credibilidad. Uno de ellos, por ejemplo, dijo que estaba all¨ª ¡°accidentalmente, durmiendo en un banco¡± y que se vio involucrado en la pelea.
En los ¨²ltimos a?os, clanes organizados de origen paquistan¨ª han adquirido un papel relevante en el negocio del narcotr¨¢fico, y especialmente de la hero¨ªna y la coca¨ªna. Los jefes de esas redes trasladan las sustancias desde la frontera entre Pakist¨¢n y Afganist¨¢n a Barcelona a trav¨¦s de mulas, que viajan en avi¨®n y esconden la droga en maletas de doble fondo. Han llegado a desplazar a otros grupos consolidados, como los dominicanos. Pero con el auge han llegado tambi¨¦n las rivalidades. Esa guerra soterrada emerge ante la ciudadan¨ªa cuando los eslabones m¨¢s d¨¦biles de la cadena ¡ªlos j¨®venes que se dedican al menudeo y que est¨¢n a sueldo de las mafias¡ª llevan la violencia a las calles.
Una de las primeras huellas visibles de esas disputas ocurri¨® en abril de 2017, cuando medio centenar de paquistan¨ªes se enfrentaron en el paseo Mar¨ªtimo de Barcelona con palos, latas y alg¨²n arma blanca en una pelea que dej¨® un herido de gravedad. Dos meses m¨¢s tarde, los Mossos detuvieron a 15 miembros de la Banda de la Mina, que apaleaba a la competencia para hacerse con el control del territorio. Parte de sus responsables proceden de Italia y viv¨ªan en Badalona; esa es la misma situaci¨®n en la que est¨¢n algunos de los nueve j¨®venes detenidos el domingo. Como Bilal A., que fue arrestado cuando sub¨ªa las escaleras del metro de Gorg. Ten¨ªa las manos llenas de sangre y estaba sacando un machete del pantal¨®n. Sus ¨²nicos documentos legales son italianos.
Los arrestados son muy j¨®venes, llegaron desde Italia hace cuatro a?os
Los arrestados por la pelea de Badalona son muy j¨®venes ¡ªuno de ellos es menor¡ª y se han instalado en Catalu?a en los ¨²ltimos tres o cuatro a?os, seg¨²n fuentes de la investigaci¨®n. ¡°Llegaron de Italia, donde estaban marcados por la polic¨ªa, y se instalaron en Barcelona, donde pronto empezaron a luchar por el territorio¡±, se?alan las mismas fuentes. Est¨¢n en situaci¨®n irregular y la mayor¨ªa de ellos vive en pisos ocupados, sobre todo en el barrio de La Salut. Los autos de prisi¨®n del juez se?alan que no tienen arraigo. En sus declaraciones, algunos han afirmado que viven ¡°en una habitaci¨®n¡±, que trabajan ¡°cuando les sale algo¡± y, en algunos casos, que est¨¢n en Espa?a ¡°desde hace pocos d¨ªas¡±.
¡°Viven al margen de la comunidad, no se integran. Tienen su estilo de vida, de derroche. No tienen familia ni arraigo y ven en la venta de drogas su v¨ªa de escape¡±, explica un destacado miembro de la comunidad en Badalona, que prefiere no dar su nombre por temor a represalias. Raja Babar Nasir, secretario general de Pak Federaci¨®n de Espa?a ¡ªque agrupa a 25 asociaciones y tiene base en Barcelona¡ª se?ala que ¡°los culpables deben ir a la c¨¢rcel para que otros j¨®venes aprendan¡± y lamenta las im¨¢genes de violencia. Pero pide no criminalizar al colectivo: ¡°M¨¢s del 99% de la comunidad es trabajadora, pac¨ªfica y respetuosa con el orden p¨²blico y no tiene nada que ver con la violencia y los grupos mafiosos¡±.
Delincuencia ajena a la comunidad
Tahir Rafi insiste en separar la pura delincuencia de una comunidad extranjera que es la mayor en Barcelona (20.600 personas), tras los italianos y los chinos. Para poner coto a este tipo de situaciones insiste en la importancia de las madres. ¡°La integraci¨®n de la mujer es fundamental. Son un pilar porque son quienes pasan m¨¢s tiempo en casa, con los hijos¡±, explica. La investigadora Berta G¨¹ell, que conoce a fondo la comunidad paquistan¨ª, niega que la violencia sea una herramienta de esta comunidad, caracterizada por un esp¨ªritu emprendedor, para dirimir sus conflictos. ¡°Si no, lo ver¨ªamos tambi¨¦n cuando tienen disputas en la econom¨ªa formal, como los supermercados¡±, indica la experta. G¨¹ell se?ala que las peleas por la territorialidad tienen m¨¢s que ver por las ¡°din¨¢micas del mercado de la droga que por una comunidad? concreta¡±.
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