18 metros de memoria republicana
El escultor Emili Armengol inaugura una obra en La Barcar¨¨s, en el sur de Francia en recuerdo a los exiliados
Una puerta de hierro de 18 metros de altura que simboliza la angustia de los republicanos espa?oles que cruzaron la frontera en 1939 tras la victoria de Franco. Y a sus pies, las huellas de los zapatos de varios ni?os que han contribuido as¨ª a crear la escultura en memoria de sus antepasados. El municipio franc¨¦s de Le Barcar¨¨s, en la Costa Vermella, en Francia, tiene desde este s¨¢bado el monumento La port de la libert¨¦, del escultor catal¨¢n Emili Armengol, dedicado a la memoria de los exiliados que huyeron del fascismo y que vivieron en los campos de internamiento del municipio.
La poblaci¨®n costera de Le Barcar¨¨s, a un tiro de piedra de Argel¨¨s, era una de las pocas de la zona que carec¨ªa de un memorial y paliarlo ha sido una de las fijaciones de su Ayuntamiento. ¡°La puerta es estrecha para significar el dolor que supone dejar todo lo que ten¨ªan y alta como grande la esperanza de encontrar un pa¨ªs de acogida¡±, cuenta el escultor. La obra es tan alta que parece un faro: cuando est¨¦ iluminado se ver¨¢ a dos millas de la costa.
Bajo un viento helado, el alcalde Alain Ferrand ha subrayado la ¡°inteligencia colectiva¡± que ha hecho posible la inauguraci¨®n de la obra sin omitir que la oposici¨®n le ha ¡°ridiculizado¡± por promoverla. Con su bandera tricolor por banda, el alcalde ha recordado el triste 80 aniversario de la ¡°retirada¡± y ha detallado que la parte superior de la puerta est¨¢ torcida para subrayar el dolor del exilio. El monumento se alza junto a la playa donde se instalaron interminables filas de barracones. En un principio, iba a recibir a 13.000 personas, pero al final acogi¨® a 60.000.
"La puerta es estrecha para significar su dolor: tuvieron que dejar todo lo que ten¨ªan. Y es alta como s¨ªmbolo de la esperanza de encontrar un nuevo pa¨ªs de acogida", dice el escultor
¡°Al principio viv¨ªan y dorm¨ªan en la arena. Imagina el fr¨ªo. Eso me lo contaba mi suegra", cuenta Mari Duffond, consejera de Cultura, en alusi¨®n a Carmen Castro, de Motril, que lleg¨® a Francia caminando con su familia y all¨ª se qued¨®. No fue el caso de Abel Pascual Ventosa, de 81 a?os, presente en la inauguraci¨®n. Sali¨® con tres meses en brazos de su madre, Conxita Ventosa, hija de Joan Ventosa, que fue consejero de Agricultura con Francesc Maci¨¤ y vivi¨® seis meses en Francia hasta que regres¨®.
Armengol, que tiene obras en Barcelona, en Dinamarca e Italia y es el autor de la Porta dels Pa?sos Catalans, de Salses, erigida en 2003, admite que recibi¨® el encargo por casualidad. El Ayuntamiento de Le Barcar¨¨s realiz¨® un concurso de ideas y qued¨® desierto. Fue un amigo del escultor, que reside en la zona y con el que comparte la afici¨®n de la vela latina, el que le sugiri¨® al Consistorio que contactara con ¨¦l.
El alcalde ha lamentado que le hayan querido ridiculizar por apoyar el monumento
Unas 200 personas, muchos de ellos vecinos, descendientes de los republicanos exiliados, afincados ya en la zona, han acudido a la inauguraci¨®n del monumento de Armengol, galardonado en 2016 con la Creu de Sant Jordi y caballero de las Artes y las Letras de la Rep¨²blica Francesa en 2007. Le Barcar¨¨s, inmersa ahora el enorme mercado navide?o que celebra todos los a?os junto al mar, tiene una poblaci¨®n fija de 5.000 personas aunque en verano alcanza las 90.000. Las elecciones municipales son en Francia el pr¨®ximo a?o y algunos inscriben esa cercan¨ªa electoral a las cr¨ªticas que ha recibido el alcalde por apoyar el monumento. Junto a ¨¦l, un panel con el t¨ªtulo La Retirada cuenta, en cuatro idiomas, el drama del exilio, con fotos de los republicanos.
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