El nuevo urbanismo para el Cabanyal no convence a todos
Colectivos vecinales critican el nuevo plan urban¨ªstico del barrio por el exceso de edificabilidad, la falta de una v¨ªa verde y los costes de urbanizaci¨®n "confiscatorios" en Eugenia Vi?es
El barrio del Cabanyal-Canyamelar de Valencia sufri¨® durante a?os un urbanismo impuesto por el Ayuntamiento que arramblaba con un mont¨®n de calles y casas y que acab¨® degrad¨¢ndolo. Hace un a?o que sali¨® a exposici¨®n p¨²blica un nuevo plan para el barrio que sustituye al denostado proyecto del PP pero tampoco ha generado unanimidad. Muchos vecinos se quejan del exceso de edificabilidad, de la falta de un espacio verde que vertebre el barrio, y de costes de urbanizaci¨®n desorbitados e inasumibles para los antiguos propietarios.?
Desde que en primavera del a?o pasado acabase el plazo para alegar al nuevo Plan Especial del Cabanyal-Canyamelar (PECC), que rubrican los arquitectos Gerardo Roger y Luis Casado, los vecinos m¨¢s cr¨ªticos esperan a estas alturas con cierta impaciencia una respuesta del Ayuntamiento. "Quieren cuadrar en esta parte del barrio todo lo que nos les cabe en el n¨²cleo antiguo", resume uno de los activistas de Cabanyal Horta, asociaci¨®n que trabaja desde 2015 en un proyecto de huertos urbanos sobre el solar del Clot, de propiedad municipal y situado a espaldas de la avenida del Mediterr¨¢neo.
"Aqu¨ª", dice Silvia S¨¢nchez, portavoz de la asociaci¨®n, se?alando el solar donde al fondo destacan los conocidos bloques portuarios, "quieren construir bloques de viviendas en forma de u, se supone que de protecci¨®n oficial, aunque no est¨¢ del todo claro. Cuando, ahora, esto es un huerto urbano, un jard¨ªn comestible, un centro de reuni¨®n vecinal que podr¨ªan mantener y respetar". Este s¨¢bado han protagonizado una acci¨®n reivindicativa por un urbanismo sostenible en el Clot, al que se unieron decenas de personas.
Cabanyal Horta no est¨¢ sola, le acompa?an en su reivindicaci¨®n las asociaciones Villas de Las Arenas, Pavimar, la plataforma de Bloques Portuarios, Espai Ve?nal o el colectivo Cuidem Cabanyal-Canyamelar; todos exigen mejoras en la planificaci¨®n y contestaci¨®n a sus alegaciones. En unos d¨ªas registrar¨¢n en el Ayuntamiento de Valencia 17 medidas para implementar el PECC.
Estos vecinos consideran una exageraci¨®n las expectativas de crecimiento de poblaci¨®n que prev¨¦ el PECC y piden que se rebajen para as¨ª no justificar la construcci¨®n de tantas viviendas de nueva construcci¨®n. Exigen la rehabilitaci¨®n de la zona cero del Cabanyal -que se iba a demoler para prolongar la avenida de Blasco Ib¨¢?ez hasta el mar-, edificios con un m¨¢ximo de tres alturas -en todo el plan, no solo en un ¨¢mbito del mismo-, pol¨ªticas sociales contra las bolsas de pobreza y exclusi¨®n, y una moratoria para los pisos tur¨ªsticos y que en el 10% de reserva permitida se contabilicen las plazas hoteleras.?
Jaime P¨¦rez y Ana Casta?er, de la asociaci¨®n Villas de las Arenas, est¨¢n entre el medio centenar de afectados por el antiguamente conocido PAI de las Piscinas, que ha pasado desde que se orden¨® en un plan por primera vez en 2001 hasta el momento actual, a casi duplicar su edificabilidad y a centuplicar su coste de urbanizaci¨®n hasta el punto de parecerles "confiscatorio" a los residentes de toda la vida.?
La actuaci¨®n, que en 2001 era conocido como PAI Especial Paseo Mar¨ªtimo y en 2005 se convirti¨® en el PAI de las Piscinas Ol¨ªmpicas, est¨¢ incluido ahora en el PECC, solo que con casi el doble de edificabilidad. Las piscinas se sustituyen por un hotel de 15 alturas, un centro comercial, dos bloques de viviendas y un tercero dotacional.
"El plan de 2001 era asumible para los que somos antiguos propietarios el actual, no. Es un PAI que recoge todos los principios de las politicas especulativas que han traido esta degradaci¨®n al barrio. Por tanto, no puede importarse a un PECC de regeneraci¨®n urbana, de mantenimiento de las edificaciones y de fijacion de la poblaci¨®n."Queremos que nos excluyan de ese PAI", sostiene Jaime.
Esa m¨¢xima de que "el urbanismo paga el urbanismo" no puede aplicarse a rajatabla en este caso despu¨¦s del proceso de degradaci¨®n al que ha sido sometido el Cabanyal en las ¨²ltimas d¨¦cadas, sostiene el arquitecto Tato Herrero, vecino y activista de la disuelta Salvem El Cabanyal. Los residentes ya pagaron porque se reurbanizaran sus calles, "no pueden pedirles ahora que vuelvan a pagar m¨¢s. La degradaci¨®n se produjo por una serie de decisiones adoptadas por el Ayuntamiento [en este caso, durante la etapa del PP] como instituci¨®n y ha de compensarlas", seg¨²n Herrero. ?
La creaci¨®n de una v¨ªa verde que recorra el barrio de norte a sur es otra de las reivindicaciones de todos estos colectivos y asociaciones. Un parque lineal que vaya desde La Marina a Tarongers en lugar de la senda que apenas ocupa un carril y sin conectividad con otras ¨¢reas verdes del entorno a que ha quedado reducido en el PECC, denuncian.
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