El ¨²ltimo acorde de Eduardo Bort, pionero del rock progresivo espa?ol
El virtuoso valenciano de la guitarra, que firm¨® un disco de culto en 1974, fallece a los 72 a?os
Eduardo Bort (Valencia, 1948 ¨C 2020) fue uno de los m¨²sicos espa?oles que encarnaron con mayor precisi¨®n el inspirado virtuosismo del mejor rock progresivo de los a?os setenta. Lo hizo rayando a un nivel equiparable al de cualquier figura europea o anglosajona. Tanto en conciertos apabullantes, seg¨²n cuentan las cr¨®nicas del momento ¨C entre ellos, los que ofreci¨® en festivales como Ademuz Rock Country o Canet Rock, antecedentes de nuestros grandes festivales actuales, e incluso el que se dio en un portaaviones norteamericano que repost¨® en Valencia camino de Vietnam ¨C como en discos tan sobresalientes como su ¨¢lbum hom¨®nimo de 1974, Eduardo Bort, un extraordinario trabajo publicado por el sello Gong/Movieplay, reeditado por Warner hace seis a?os, cuya primera edici¨®n en vinilo se ha llegado a cotizar en las webs de coleccionistas de discos a nada menos que 1.700 d¨®lares por una copia.
Es un elep¨¦ hist¨®rico del rock espa?ol, el trabajo por el que siempre ser¨¢ recordado. Bort manten¨ªa estos ¨²ltimos a?os su lucha particular contra un c¨¢ncer de pulm¨®n, y sab¨ªa que cada d¨ªa que pasaba era como un regalo que no hab¨ªa que desaprovechar. Por eso hace casi un a?o se celebr¨® un concierto de homenaje a toda su carrera en el Teatre Principal de Valencia, acompa?ado de un buen pu?ado de m¨²sicos ¨C Julio Galcer¨¢, Max Sunyer, Jorge Pardo o Miguel Gal¨¢n (Medina Zahara) entre ellos ¨C, con los que rescat¨® cl¨¢sicos de toda su trayectoria e incluso empez¨® a rodar material del que deber¨ªa haber sido su nuevo trabajo.
¡°El estilo de Eduardo Bort y su banda entroncaba directamente con la progres¨ªa europea del momento¡±, afirmaba su amigo, el guitarrista Salvador Dom¨ªnguez, en el imprescindible volumen Los hijos del rock. Los grupos hispanos 1975-1989 (SGAE, 2004). ¡°Nadie en Valencia representa mejor que el guitarrista valenciano la esencia de lo que fue el rollo de los 70 en estas benditas tierras, compitiendo seriamente con los mejores del Estado¡±, dec¨ªa de ¨¦l el cronista Vicente Fabuel en el en el libro colectivo Historia del Rock en la Comunidad Valenciana (Avantpress, 2004).
Aquel primer ¨¢lbum hom¨®nimo, la cumbre de su carrera y una de las piedras angulares del rock progresivo europeo, culminaba todo lo aprendido por Bort en sus a?os de fogueo como m¨²sico al frente de formaciones previas como Los Bodgies, Los Exciters o Yann. Se trata de un disco pr¨¢cticamente ¨²nico en el contexto del rock valenciano y espa?ol del momento, un trabajo singular y aventurado, que pod¨ªa permitirse mirar de t¨² a t¨² a sus referentes for¨¢neos. Siempre se ha dicho que sus surcos se situaban en alg¨²n lugar entre entre Pink Floyd y Carlos Santana, con quien el valenciano lleg¨® a tocar. Lo cierto es que, a d¨ªa de hoy, deber¨ªa ser un manjar para cualquier fan de recicladores de sonidos lis¨¦rgicos como Tame Impala, Jacco Gardner o Jonathan Wilson. Su intermitente trayectoria continu¨® m¨¢s tarde por vericuetos m¨¢s c¨¢lidos y convencionales, los del estimable Silvia (Bambule, 1983), dedicado a la memoria de su hija, prematuramente fallecida, y ¨C esta vez, s¨ª ¨C m¨¢s cercano a lo que por aquel entonces propugnaba Carlos Santana, pero acogido con mayor discreci¨®n porque las modas del momento dictaban otras tendencias, con el eco de la new wave y del pop sint¨¦tico resonando por doquier.
Entre los nombres con los que ha colaborado Eduardo Bort a lo largo de su carrera, ya sea como compa?eros creativos o en su menos conocida faceta de productor, figuran Pau Riba, Charly Buffalo, Gualberto, Max Suyer, Denny Laine, Fabio Miano o Geoff Britton (de los Wings de Paul McCartney). Eduardo Bort gir¨® por escenarios de toda Europa, Sudam¨¦rica y Jap¨®n.
Su ¨²ltimo disco hasta el momento era Eduardo Bort con Charly Buffalo (2012), en el que homenajeaba al entonces recientemente fallecido Vicente Ausina ¨C nombre real de Charly Buffalo ¨C, hist¨®rico m¨²sico y t¨¦cnico de sonido que form¨® parte en los a?os setenta de L'Home de cot¨° en p¨¦l, la primera ¨®pera rock escrita en valenciano, estrenada en 1974 en Val¨¨ncia. el cineasta Isaki Lacuesta film¨® el viodeoclip? dela canci¨®n Amar o Julia.
Tras los pasos de Queen
Eduardo Bort estuvo a solo un paso de fichar por la multinacional EMI en Londres. Al no hacerlo, se frustr¨® una oportunidad de oro para que su nombre gozara de proyecci¨®n internacional. Lo cont¨® el periodista valenciano Arturo Blay, en lo que constituye otro de los innumerables eslabones en la cadena de oportunidades perdidas del rock valenciano, eternamente anhelante de una repercusi¨®n que le ha sido especialmente esquiva. Bort hab¨ªa concertado una cita con Joop Visser, el A&R de la compa?¨ªa, a trav¨¦s de su amiga la ejecutiva Judith Wardle. Visser era el hombre que hab¨ªa fichado a Queen, y qued¨® encantado con el resultado de la grabaci¨®n del que ser¨ªa su magn¨ªfico ¨¢lbum hom¨®nimo, en 1975, pero pidi¨® a Bort y al resto de su banda, Yann, que pasaran al menos tres meses viviendo y grabando en Inglaterra para poder lanzarles mundialmente desde all¨ª. Nadie sigui¨® a Bort en el empe?o. Tan solo el bater¨ªa Vicente Alca?iz mostr¨® su disposici¨®n a secundarle. Y el guitarrista valenciano, frustrado, decidi¨® buscar salida al disco a su nombre, sin sello grupal. Qui¨¦n sabe hasta d¨®nde podr¨ªa haber llegado si la banda al completo hubiera encarado aquel desaf¨ªo y se hubiera instalado durante un tiempo en Londres, al abrigo de la discogr¨¢fica que lanz¨® a Freddie Mercury y los suyos a la fama mundial.
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