Andrea Mu?oz: ¡°Las mujeres tienen mayores barreras para acceder a la Justicia¡±

La Cumbre Judicial Iberoamericana (CJI) re¨²ne a las altas cortes de los poderes judiciales de Iberoam¨¦rica y los consejos de las judicaturas de los pa¨ªses en que existe. En total, 23 pa¨ªses unidos en esta instancia de cooperaci¨®n y articulaci¨®n con el objetivo de lograr un mejor acceso a la Justicia, eficiente y oportuna, acorde a los nuevos desaf¨ªos en tecnolog¨ªas y, en general, a los nuevos retos. Se articula en una presidencia permanente, otra pro tempore y varias comisiones.

Uno de los grupos, nacido en 2014, trabaja en la incorporaci¨®n de las mujeres en los poderes judiciales, sobre todo en las altas cortes. Es la Comisi¨®n Permanente de G¨¦nero y Acceso a la Justicia que est¨¢ presidida desde el a?o pasado y hasta 2023 por la ministra de la Corte Suprema chilena Andrea Mu?oz (Valdivia, 65 a?os). Y tiene por delante misiones tit¨¢nicas.

Pregunta. ?Cu¨¢les son los principales desaf¨ªos?

Respuesta. Profundizar el trabajo que la comisi¨®n est¨¢ haciendo en torno a crear mecanismos y desarrollar estrategias para incorporar una perspectiva de g¨¦nero en la impartici¨®n de Justicia, en el acto mismo de juzgar y dictar sentencia. Un segundo desaf¨ªo importante apunta a lograr que se entienda la necesidad de la paridad en las altas cortes.

P. ?No llegan las juezas a las altas cortes?

R. Por regla general hay m¨¢s mujeres siempre en los tribunales de instancia, pero el techo de cristal indica que es m¨¢s dif¨ªcil que las ministras ejerzan cargos m¨¢s altos.

P. En Chile, de hecho, la Corte Suprema no ha tenido una presidenta.

R. Ser¨ªa una maravilla que hubiera una presidenta mujer y va a llegar el minuto en que eso ocurra. Somos 21 en total y, de ellos, ocho somos mujeres. La primera ministra de la Corte Suprema fue Mar¨ªa Antonia Morales, en 2001. En Chile, como en Latinoam¨¦rica, se produjo un fen¨®meno de feminizaci¨®n de los poderes judiciales. Muchas mujeres empezaron a entrar a los tribunales de instancia, pero se les identificaba m¨¢s con los tribunales de menores o familia. Hoy no, porque las mujeres est¨¢n en los tribunales de garant¨ªa, los tribunales penales. Pero la dificultad se produce cuando quieren acceder a puestos de mayor responsabilidad. Hay barreras evidentes que tienen que ver con el g¨¦nero.

P. ?Por ejemplo?

R. Un traslado a trav¨¦s del pa¨ªs y cambiarse de jurisdicci¨®n resulta dif¨ªcil desde el punto de vista de la familia. A¨²n cuando se diga que los sistemas de selecci¨®n son objetivos y que no tiene discriminaci¨®n, la hay impl¨ªcitamente cuando pides capacitaci¨®n y una mujer que est¨¢ en la etapa de la crianza tiene que compatibilizar su trabajo con el cuidado de los ni?os, que se le ha asignado fundamentalmente a las mujeres. Algunos dicen: se les pide lo mismo. Pero la cancha no es pareja. Con este tema de las labores de cuidado, me pas¨® una an¨¦cdota con una ministra de un tribunal en Espa?a.

P. ?Qu¨¦ le ocurri¨®?

R. Ella estaba tratando de postular a la Corte Suprema, pero en una ocasi¨®n no pudo porque la mam¨¢ se enferm¨®. Es decir, o se tienen hijos chicos o se tienen padres mayores. Siempre, a la larga, adem¨¢s, cuando intervienen distintos poderes del Estado, hay un tema de lobby, de relaci¨®n con el poder pol¨ªtico y las mujeres no forman parte de esas cofrad¨ªas. Les significa un esfuerzo distinto y no est¨¢n dispuestas a manejar c¨®digos o categor¨ªas que son canchas m¨¢s masculinas. Y claramente a la mujer se le exige destacarse y ser la mejor para poder estar en los mejores cargos.

P. En Chile estamos con un ¨®rgano constitucional que propone una regla de la paridad en el Estado. ?Es posible en el Poder Judicial?

R. Creo en la necesidad de que haya paridad. Depende de lo que se apruebe en la Constituci¨®n, pero, en general, uno deber¨ªa tender a que la Corte estuviera representada por mujeres en la misma forma que estamos representadas en la sociedad. Ahora, soy de las que pienso que el hecho que haya m¨¢s mujeres no asegura que haya perspectiva de g¨¦nero, porque las mujeres somos diversas. Pero las mujeres s¨ª comparten experiencias comunes y es muy potente. Ante delitos de violencia sexual, acoso o cosas de esa naturaleza, las mujeres tienen experiencias similares y van a poder enfrentarlas de una manera parecida.

P. ?Por qu¨¦ es importante la paridad en la integraci¨®n de los tribunales??No ser¨ªa igual de justa si estuviera compuesta solo por hombres?

R. Porque estamos en una sociedad donde hay hombres y mujeres. Y obviamente es una mejor Justicia la que est¨¢ impartida por hombres y mujeres y no solamente por un solo sexo.

P. ?Qu¨¦ ocurre con delitos como los feminicidios?

R. Tenemos la necesidad de seguir generando informaci¨®n en temas de g¨¦nero que nos permitan conocer mejor los fen¨®menos, como el feminicidio, justamente. Nos interesa volver a actualizar el registro que hicimos en el per¨ªodo anterior (2019-2021). Nuestro objetivo en este per¨ªodo es posicionar a la comisi¨®n como la instancia que tiene la palabra en materia de incorporar perspectiva de g¨¦nero en la impartici¨®n de Justicia.

P. ?En qu¨¦ consiste espec¨ªficamente el registro de feminicidios?

R. Fue una iniciativa que lider¨® la oficina de la mujer de la Corte Suprema de Argentina y la idea es levantar informaci¨®n acerca de las muertes violentas de mujeres. Se trata de buscar informaci¨®n sobre la edad de las v¨ªctimas, la ligaz¨®n familiar o no con el victimario o en cu¨¢ntas causas se logra o no una condena. Nos interesa seguirle el pulso al tema del feminicidio, porque es uno de los problemas m¨¢s acuciantes en la regi¨®n.

P. ?En qu¨¦ sentido?

R. Es muy impresionante ver el nivel de impunidad que existen en otros pa¨ªses en los que mueren mujeres cada cinco minutos y no se investiga o se investiga poco.

P. ?Qu¨¦ ocurre con las mujeres iberoamericanas y su acceso a la Justicia?

R. Entendemos que las mujeres, por la desigualdad estructural que las afecta, tienen mayores barreras para acceder a la Justicia, por lo que el objetivo de incorporar perspectiva de g¨¦nero busca que esas barreras se vayan levantando.

P. ?La Justicia a nivel iberoamericano no es tan justa respecto de las mujeres?

R. La idea es que las personas, al conocer un caso y al juzgarlo, sean capaces de visibilizar determinadas barreras que, a la larga, est¨¢n dificultando el acceso a la Justicia de las mujeres. Lo que me parece central es tomar conciencia de lo que significan los estereotipos o roles que le atribuimos a una persona por pertenecer a determinado grupo social. ¡°Las mujeres son sensibles, mientras que los hombres son racionales¡±.

P. ?Podr¨ªa ejemplificar?

R. Se entiende, por ejemplo, que la mujer debe responder a determinados patrones. Eso muchas veces impide ver el caso sin prejuicios. A veces se cree que el enfoque de g¨¦nero va a impedir que la Justicia sea imparcial y al contrario: para que la Justicia sea justa e igualitaria hay que ver a las personas sin sesgos ni prejuicios. El tema de los estereotipos es central y nos persigue. En violencia sexual, por ejemplo, est¨¢ el estereotipo de la llamada v¨ªctima ideal.

P. ?A qu¨¦ se refiere ese estereotipo?

R. A la creencia de que una mujer no puede andar en ese lugar, vestida de esa forma ni a esa hora. Las mujeres deben ser castas y puras, seg¨²n este estereotipo. ?Por qu¨¦ se fue a tomar un trago en la noche con ese individuo? ¡°Se la busc¨®¡±. Pero los estereotipos a veces pueden ser benignos: las mujeres cuidamos mejor a los ni?os. Entonces la mujer queda con el papel de cuidadora y el hombre de proveedor.

P. ?Hay o no resistencia de los poderes judiciales a incorporar estos conceptos?

R. Todo pasa por promover m¨¢s la formaci¨®n y la capacitaci¨®n. Cuando hay desconocimiento e ignorancia de lo que significa, es m¨¢s dif¨ªcil. Pero la comisi¨®n de g¨¦nero ha socializado los resultados y los pa¨ªses, en general, han ido abri¨¦ndose.

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