El ¨¢rbitro acusado de traicionar al equipo donde jug¨®
Felipe Gonz¨¢lez dirigi¨® el cl¨¢sico que Colo Colo le gan¨® a la Universidad Cat¨®lica este domingo. Su excompa?ero Nicol¨¢s N¨²?ez lo acusa de haberlos perjudicado por ¡°frustraci¨®n o resentimiento¡±. Una historia extra?a e irrepetible
Como pocas veces se ha visto en una cancha de f¨²tbol, el argentino Fernando Zampedri festej¨® euf¨®rico el balonazo que mand¨® a las tribunas cuando el tiempo reglamentario se extingu¨ªa. Era saque de banda, contra Colo Colo, de visitante, con un jugador menos y faltando segundos para que se cumpliera el tiempo reglamentario.
El cl¨¢sico que reun¨ªa a los dos equipos m¨¢s exitosos de la ¨²ltima d¨¦cada en el f¨²tbol chileno estaba uno a cero a favor de la Universidad Cat¨®lica, pero el sabor era m¨¢s intenso: la derrota dejaba a Colo Colo sin opciones de disputar el t¨ªtulo. Los cruzados hab¨ªan hecho un partido mezquino, fingiendo infracciones, reclamando un penal no sancionado y encerr¨¢ndose en su terreno. Por eso, los 11 minutos de tiempo agregado que dio el ¨¢rbitro Felipe Gonz¨¢lez no parec¨ªan exagerados.
Pero los albos lo dieron vuelta. Un gol a los 97 minutos y otro a los 101 les otorgaron los tres puntos, la alegr¨ªa de 40 mil personas y la ilusi¨®n de conquistar la corona. El rival, obviamente, reclam¨® por el arbitraje, como ha ocurrido siempre desde que el juego es juego.
Sin embargo, el joven t¨¦cnico de la Universidad Cat¨®lica rompi¨® el molde. En vestuarios, ya calmado, Nicol¨¢s Nu?ez dijo que ¡°no queremos que Felipe Gonz¨¢lez nos arbitre nunca m¨¢s. Es evidente que hay algo personal de ¨¦l; frustraci¨®n, resentimiento en haber pertenecido a este club y no haber seguido participando¡±.
Efectivamente, Gonz¨¢lez entr¨® a la categor¨ªa sub 10 en la Universidad Cat¨®lica a mediados de los noventa. Era, en sus or¨ªgenes, un volante mixto de buen trato de bal¨®n, al punto que sus compa?eros le dec¨ªan Guille, por su af¨¢n de imitar a Barros Schelotto. Estuvo en el club por una d¨¦cada, donde fue bajando de posiciones en la cancha hasta llegar a ser defensor. Cuando debi¨® definirse su paso al primer equipo le comunicaron que no seguir¨ªa. Nunca estuvo en la categor¨ªa de Nicol¨¢s Nu?ez, pero se cruzaron en vestuarios m¨¢s de una vez.
Gonz¨¢lez prolong¨® su carrera en Hossana, un cuadro evang¨¦lico que militaba en la Tercera Divisi¨®n, y luego salt¨® al profesionalismo en San Luis, el a?o 2004. Su mejor momento lo vivi¨® al a?o siguiente, cuando integr¨® como defensor la planilla de Santiago Morning, coron¨¢ndose campe¨®n de la Primera B, con Esteban Paredes, el goleador hist¨®rico del f¨²tbol chileno como compa?ero.
Pudo seguir escalando, pero una lesi¨®n al ligamento cruzado lo oblig¨® a abandonar a los 27 a?os. Siguiendo los consejos de su padre se transform¨® en ¨¢rbitro, lleg¨® a la divisi¨®n de honor y hoy es el presidente del Sindicato de jueces profesionales, con una ventaja sobre sus pares: maneja el pa?o. En un medio donde se suele reprochar a los refer¨ªs su falta de conocimiento del juego, de empat¨ªa con el jugador y de interpretar criteriosamente el reglamento, Felipe Gonz¨¢lez acumulaba ventajas.
Hasta que expuls¨® a Gary Kagelmacher por hacer tiempo, no sancion¨® un penal contra Clemente Montes y aplic¨® 11 minutos de tiempo agregado en el cl¨¢sico m¨¢s picante de los ¨²ltimos tiempos en canchas nacionales.
?Venganza? ?Rencores guardados? El pasado futbol¨ªstico de Gonz¨¢lez nunca fue tema hasta ahora, ni a favor ni en contra de los clubes donde jug¨® y menos de su casa formativa, la Universidad Cat¨®lica. Pero en un duelo donde la tradici¨®n, la lucha acumulada en los ¨²ltimos a?os y, sobre todo, las disputas personales terminaron, de manera ins¨®lita, provocando un debate in¨¦dito.
Un entrenador y un ¨¢rbitro que compartieron series menores, hoy est¨¢n irremediablemente enfrentados. Como para no volver a cruzarse m¨¢s.
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