Una pareja reci¨¦n casada volv¨ªa de su boda, fue asaltada y acuchillada: ¡°Espero alg¨²n d¨ªa vencer este miedo¡±

La crisis de seguridad en Chile ha sumado un nuevo cap¨ªtulo, con delitos perpetrados en los momentos y lugares m¨¢s inesperados. En la madrugada del pasado domingo 5 de mayo, el pa¨ªs sudamericano qued¨® at¨®nito frente a un violento intento de asalto sufrido por una pareja de reci¨¦n casados que volv¨ªa desde su fiesta de bodas en el municipio de Pe?alol¨¦n, en el sector oriente de Santiago de Chile. Casi una semana despu¨¦s del ataque, el novio afectado por el ataque ha publicado una dram¨¢tica carta en donde llama a los legisladores a alcanzar un acuerdo transversal para implementar las medidas que permitan combatir la delincuencia con una mayor eficacia.

La v¨ªctima, identificada como Carlos Pinola, ha sacado la voz en un texto publicado en el diario local El Mercurio, el que titul¨® Espero, alguna vez, vencer este miedo. ¡°No quer¨ªa dar declaraciones por el asalto del que fuimos v¨ªctima despu¨¦s de mi matrimonio. No quer¨ªa hablar. Por muchas razones. Una de las principales es que este pa¨ªs ya habla lo suficiente de delincuencia, y aun as¨ª sigue escalando la violencia. Cuando se vive el horror de poder perder al n¨²cleo familiar, y uno busca respuestas, solo se escucha el eco de otras personas que han pasado por lo mismo, y uno se pregunta sin esperanza, ?por qu¨¦ siguen creciendo los casos y la magnitud?¡±, ha escrito.

El novio mencion¨® que los avances legislativos logrados durante los ¨²ltimos a?os han sido bautizados con los nombres de las v¨ªctimas, lo que mostrar¨ªa su car¨¢cter reactivo frente a los hechos consumados. ¡°La legislaci¨®n en temas de seguridad en Chile se siente que avanza a punta de leyes con nombres propios. Yo no quiero ver la ley con nombre de mi esposa, hermana o mam¨¢, de mis conocidos o no conocidos, que impulse una agenda que proteja la vida de inocentes. Los nombres de leyes no pueden avanzar en funci¨®n de muertos; no es un cementerio ni una morgue, Me da miedo pensar que el pa¨ªs lleg¨® al punto donde los muertos impulsen m¨¢s ideas que los vivos¡±, ha se?alado.

Pinola ha expresado su preocupaci¨®n por la actitud de las autoridades ante la crisis. ¡°Siempre he sido optimista, pero despu¨¦s de este asalto me preocupa que seamos un pa¨ªs de m¨¢rtires circunstanciales, y que mi potencial muerte sea solo una excusa pol¨ªtica. Me da miedo pensar que como pa¨ªs estamos tan polarizados que las personas que deber¨ªan hacer algo en seguridad no se puedan poner de acuerdo en un terror tan com¨²n y transversal¡±, ha expresado.

Al cierre de su carta, la v¨ªctima ha hablado sobre el complejo proceso de recuperaci¨®n que deber¨¢ enfrentar con su esposa y su familia. ¡°Espero alg¨²n d¨ªa vencer este miedo y recuperar la esperanza. De momento, me enfocar¨¦ en cuidar a mi familia, que se mejoren las tres mujeres m¨¢s importantes de mi vida con las que pas¨¦ esto, y sanar las pu?aladas que sufrimos¡±, ha dicho.

El violento robo tras una boda

El robo ocurrido durante el fin de semana pasado fue grabado por las c¨¢maras de seguridad del edificio hasta donde los reci¨¦n casados y dos de sus familiares llegaban tras la fiesta de bodas. Apenas dejaron el coche en donde se transportaban, el clan fue abordado por al menos tres individuos que se transportaban en otro veh¨ªculo. La intenci¨®n de los desconocidos era evidente: intimidar¨ªan a los novios para robar su autom¨®vil bajo el violento m¨¦todo de la encerrona.

Los delincuentes atacaron directamente a los esposos e intentaron llevar el veh¨ªculo, fracasando en su intento. Con dos de las v¨ªctimas en el piso y con el resto del grupo familiares tratando de entrar al edificio, los ladrones aprovecharon de sustraer otros elementos de valor, escapando r¨¢pidamente del lugar. La v¨ªctima m¨¢s perjudicada con el robo fue la novia, que fue acuchillada en una de sus manos. La mujer fue trasladada hasta la Cl¨ªnica Santa Mar¨ªa, en el municipio de Providencia, donde fue operada y hospitalizada fuera de riesgo vital.

El Congreso chileno ha avanzado con rapidez con el despacho de leyes sobre seguridad p¨²blica, aunque las discusiones entre el oficialismo y la oposici¨®n han estancado el debate. Uno de los puntos que ha distanciado a los bloques predominantes en el parlamento ha sido un art¨ªculo propuesto por la derecha para la ley de Reglas del Uso de la Fuerza (RUF) para los polic¨ªas y las Fuerzas Armadas, que busca reponer la participaci¨®n de los tribunales militares en los delitos que cometan los uniformados en el cumplimiento de sus funciones.

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