Las ¡®encerronas¡¯, el temido delito chileno en las autopistas que se comete en menos de un minuto

El delito est¨¢ tipificado como robo con violencia o con intimidaci¨®n de veh¨ªculos. Pero en Chile se le conoce en forma masiva como encerrona, y hoy es el terror de automovilistas que circulan por las autopistas urbanas y avenidas en la Regi¨®n Metropolitana de la capital, donde principalmente se registra este tipo de hechos. Consiste en que, al menos dos autos conducidos en su mayor¨ªa por adolescentes encapuchados, acorralan a los conductores, los apuntan con armas de fuego, los bajan a golpes y luego roban su veh¨ªculo, el tel¨¦fono m¨®vil, la computadora y lo que encuentran de valor. Las v¨ªctimas quedan en estado de impacto, abandonadas en las calles o autopistas, a veces en la oscuridad de la noche. Otras han sufrido un atraco junto a sus hijos.

Banda pira?a le llam¨® el diario argentino Clar¨ªn cuando a comienzos de enero describi¨® al grupo que embosc¨® a una familia oriunda de Mendoza que vacacionaba en Chile y que zaf¨® de una encerrona en la Ruta 5, la principal carretera del pa¨ªs sudamericano. Su camioneta, una Volvo XC90, termin¨® con los vidrios destruidos con el golpe de un fierro.

Los primeros casos se reportaron en 2017 y, seg¨²n el subprefecto ?scar Bakovic, jefe de la Brigada Investigadora de Robos e Intervenci¨®n Criminal¨ªstica de la Polic¨ªa de Investigaciones (PDI), la encerrona es un delito propiamente chileno. ¡°Nosotros tenemos contacto con Interpol y con diferentes polic¨ªas de la regi¨®n y no hemos detectado que sea un fen¨®meno delictual que haya estado en otros pa¨ªses¡±, dice.

Este tipo de robo mut¨® de los llamados portonazos, en los que grupos armados abordan a las personas al momento de abrir los portones el¨¦ctricos de sus casas y se llevan sus autos. Las encerronas ocurren principalmente en los enlaces de las autopistas y carreteras. ¡°Los sujetos ponen un auto adelante y otro atr¨¢s y hacen una especie de s¨¢ndwich entre el veh¨ªculo y la v¨ªctima para atacarla con armas de fuego, cuchillos o elementos contundentes¡±, dice Marcelo Vargas, fiscal jefe de An¨¢lisis Criminal y Focos Investigativos de la Fiscal¨ªa Metropolitana Oriente.

Fiscales y polic¨ªas han establecido cinco motivaciones de las bandas, que pasaron de robar autos de lujo a hacerse de cualquier tipo de veh¨ªculo medianamente nuevo y con marcas de preferencia. De ah¨ª que una encerrona hoy le pueda ocurrir a cualquiera.

Algunos veh¨ªculos de lujo los utilizan para irse de fiesta y los abandonan a los pocos d¨ªas. Otros los usan para cometer nuevos delitos. Pero en la cadena, mucho m¨¢s arriba, hay organizaciones criminales que los compran para vender sus piezas en desarmadur¨ªas. Adem¨¢s, clonan sus patentes, los blanquean y comercializan a trav¨¦s de firmas de fachada abusando de una ley, que fue pensada para fomentar el emprendimiento, y que permite crear en Chile una empresa en 24 horas. Tambi¨¦n hay autom¨®viles que son llevados a la frontera, en el norte del pa¨ªs, para ser intercambiados por armas y drogas.

¡°El fen¨®meno tambi¨¦n lo enfrentamos sobre quienes encargan esos veh¨ªculos. Son las personas que realizan el gemeleo. Es decir, la modificaci¨®n del n¨²mero identificatorio de chasis y de motor, y la reinscripci¨®n en el Registro Civil chileno para darle una vida como un veh¨ªculo nuevo¡± dice el fiscal Vargas.

Precisamente, estas mafias son las que m¨¢s ganan. Para las bandas de adolescentes ¡°el pago es ¨ªnfimo¡±, dice Bakovic. ¡°En el mercado informal, dependiendo de la gama, un veh¨ªculo pagado a las personas que los roban fluct¨²a entre 1.200.000 y 1.400.000 pesos chilenos (unos 1.600 d¨®lares), mientras que por un auto com¨²n pueden recibir 300.000 pesos (unos 370 d¨®lares). Esto, versus quien comercializa, que puede llegar a obtener hasta 5.000.000 de pesos (m¨¢s de seis mil d¨®lares)¡±.

Entre los compradores, en tanto, est¨¢n los incautos y los c¨®mplices.

Ni?os de hasta nueve a?os en las bandas

Una encerrona, dice Bakovic, generalmente ocurre de noche. Y puede durar, incluso, menos un minuto.

Muestra de ello es que en Chile es usual ver v¨ªdeos que han sido grabados por otros conductores, testigos tanto de la rapidez como de la violencia. Existen grabaciones que las propias bandas suben a sus redes sociales mostrando armas y el autom¨®vil que acaban de robar.

Este fue el caso de la banda que se autodenominaba Los malditos de la encerrona, a la que se le atribuyen 40 delitos en contra de automovilistas y que fue detenida hace dos semanas en una investigaci¨®n encabezada por Vargas y Bakovic en la Operaci¨®n Retorno, como se le llama en Chile al regreso a la capital luego de un puente. Compuesta por 13 adolescentes y siete adultos (el mayor de 21 a?os), es representativa de los grupos: entre los l¨ªderes hab¨ªa dos menores de edad, de 13 y 14 a?os, cuyo papel era de conducci¨®n.

¡°El 90% de las bandas que hemos detenido est¨¢ compuesta por menores de edad. Incluso, hemos visto ni?os de nueve a?os participando activamente y que son inimputables. En las m¨¢s de 80 detenciones realizadas en Santiago, hemos detectado que el dinero de las ventas de sus robos es gastado en vestimenta y zapatillas de marcas prestigiosas¡±, dice el polic¨ªa.

Aumento de 111%, seg¨²n la fiscal¨ªa

Aunque han existido diferencias entre las autoridades frente al alza estos delitos por la forma de desglosar las cifras, una alarma la encendi¨® el ¨²ltimo reporte trimestral sobre encerronas de la Fiscal¨ªa Metropolitana Occidente, cuya jurisdicci¨®n abarca parte importante de las autopistas concesionadas, entre ellas la que conduce al Aeropuerto Internacional Arturo Merino Ben¨ªtez en Santiago. Estableci¨® que, a noviembre de 2022, este tipo de atracos tuvo un incremento del 111,8% respecto de 2021.

Para hacerse una idea de su frecuencia, la familia de Sergio Soto, jefe de la Fiscal¨ªa Criminal y Focos Investigativos de esa fiscal¨ªa, que est¨¢ a cargo de elaborar este reporte trimestral, ha sufrido tres intentos de encerronas en dos a?os: una vez ¨¦l; dos, su esposa. Aunque la mayor cantidad de v¨ªctimas son desconocidas, entre ellas choferes de aplicaciones, tambi¨¦n han sido afectados un juez, un entrenador de f¨²tbol, conductores de televisi¨®n y la Miss Universo 1987 Cecilia Bolocco, quien en diciembre de 2020 logr¨® escapar ilesa.

¡°Son sujetos dispuestos a todo. Hemos tenido persecuciones a grandes velocidades y, claramente, est¨¢n dispuestos a correr cualquier riesgo tanto para cometer el delito, disparar a una persona as¨ª como para no ser detenidos¡±, dice Bakovic.

Tambi¨¦n hay v¨ªctimas fatales. En febrero de 2021, Tamara, una ni?a de cinco a?os, fue asesinada de un disparo durante una encerrona (sus homicidas fueron condenados en 2022 a presidio perpetuo). Esto, mientras que en septiembre del a?o pasado un conductor de 62 a?os recibi¨® seis balazos cuando intentaba huir en reversa en su jeep.

¡°M¨¢s que el n¨²mero de delitos, por la experiencia y el relato de las v¨ªctimas, han aumentado las formas de comisi¨®n. Antes eran con un cuchillo o un desatornillador y ahora, lamentablemente, hemos visto m¨¢s armas de fuego¡±, dice el fiscal Vargas. Bakovic a?ade: ¡°Un fen¨®meno delictual no siempre est¨¢ asociado a las cifras. Para nosotros, un fen¨®meno es aquel delito que est¨¢ instaurado en una zona y que provoca una alta sensaci¨®n de inseguridad p¨²blica. Y, dada la violencia con que se cometen [las encerronas], hoy es uno de los delitos principales¡±.

El Gobierno del presidente Gabriel Boric, a trav¨¦s de la Subsecretar¨ªa de Prevenci¨®n del Delito, ha implementado una serie de medidas, entre ellas una mesa de trabajo, un Plan Antiencerronas y coordinaci¨®n con las empresas concesionarias para iluminar las autopistas y dotarlas de m¨¢s c¨¢maras. Adem¨¢s, desde 2020 a?os rige la llamada Ley Antiencerronas.

Chile atraviesa una crisis de seguridad que se ve reflejada en el alza de homicidios, que en 2022 crecieron un 32%. Seg¨²n la encuesta del Centro de Estudios P¨²blicos (CEP) del 4 enero, ante la pregunta sobre cu¨¢les son los tres problemas a los que deber¨ªa dedicar el mayor esfuerzo en solucionar el gobierno, el primer lugar fue para el ¨ªtem delincuencia, asaltos y robos. Una respuesta que estuvo por sobre salud, pensiones y educaci¨®n.

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