Exiliados nicarag¨¹enses en una gira por Chile: ¡°Que un mandatario de izquierda como Boric le diga dictador a Ortega tiene mucho peso¡±

Entre los cientos de detractores del r¨¦gimen de Daniel Ortega y su esposa, Rosario Murillo, que han sido forzados al exilio, un grupo de ellos ha aterrizado esta semana en Chile en medio de una gira por el sur de la regi¨®n. Se han conformado en un movimiento pol¨ªtico integrado por voces de centroizquierda y liberales, llamado Concertaci¨®n Democr¨¢tica Nicarag¨¹ense-Monteverde (CDN-M), para buscar apoyos en Am¨¦rica Latina para una salida c¨ªvica.

En Santiago de Chile el grupo cuenta que ha sostenido encuentros con funcionarios de la Canciller¨ªa, dirigentes de partidos pol¨ªticos, acad¨¦micos y activistas, para conseguir respaldo a favor de los 141 presos pol¨ªticos en Nicaragua.

Eliseo N¨²?ez, abogado y secretario ejecutivo del CDN-M, dice a EL P?IS que ¡°una de las intenciones de Ortega es que, a trav¨¦s del desgaste, la comunidad internacional llegue al punto de concluir que en Nicaragua ya no hay nada por hacer. Pero nosotros creemos que existe una salida c¨ªvica, mediante la presi¨®n pol¨ªtica internacional¡±.

N¨²?ez se encuentra en Chile junto a dos exprisioneros pol¨ªticos, Juan Sebasti¨¢n Chamorro ¨Cquien en 2021 fue precandidato presidencial en Nicaragua¨C y a la activista feminista Tamara D¨¢vila. Reconocen al Gobierno chileno como solidario con los exiliados, especialmente por ofrecer residencia y nacionalidad a 94 expatriados, entre ellos los escritores Sergio Ram¨ªrez y Gioconda Belli, en febrero de 2023. ¡°Le agradecemos todo lo que han hecho, especialmente por llamar dictador a Ortega porque, puede sonar trivial, pero que un mandatario de izquierda, como Boric, le diga dictador a Ortega tiene mucho peso, m¨¢s del que tendr¨ªa que lo diga alguien de derecha. Y decir las cosas por su nombre habla mucho de la honestidad¡±, se?ala Chamorro.

Boric se ha pronunciado en reiteradas oportunidades sobre la represi¨®n del r¨¦gimen de Nicaragua, llamando dictador a Ortega, e instando a la comunidad internacional a condenar los abusos cometidos en el pa¨ªs centroamericano. Pero en Am¨¦rica Latina no existe una postura un¨¢nime respecto a la deriva autoritaria de Ortega y Murillo.

Si bien algunos pa¨ªses como Chile han fijado una postura frontal en contra del mandatario sandinista, ¨¦ste tambi¨¦n cuenta con el respaldo de naciones como Venezuela y Cuba. En tanto, otros como M¨¦xico y Brasil permanecen neutrales. Estos ¨²ltimos son clave ¨Ccoinciden N¨²?ez, Chamorro y su compa?era Tamara D¨¢vila¨C, porque podr¨ªan tener un papel como mediadores en una posible salida c¨ªvica.

Pero dentro de este movimiento tambi¨¦n se sienten preocupados por la postura de un sector de la izquierda en Chile, como algunos militantes del Partido Comunista. ¡°Sobre todo la vieja guardia, est¨¢n con una concepci¨®n rom¨¢ntica de Ortega. Queremos que se informen mejor de los delitos [del r¨¦gimen], que abran los ojos y vean que esto no es un asunto ideol¨®gico, porque muchos de los asesinados en nuestro pa¨ªs vienen de familias sandinistas. No se puede apa?ar, proteger, a un totalitarismo. Eso contrasta con la posici¨®n del presidente [Boric], que es m¨¢s informada¡±, indica Chamorro.

Refuerza, en ese aspecto, que los Gobiernos de Boric y Sebasti¨¢n Pi?era (2010-2014, 2018-2022), de la derecha tradicional, especialmente en su segundo mandato, fueron consistentes en su actitud con respecto al r¨¦gimen nicarag¨¹ense.

Prisi¨®n o exilio

Tamara D¨¢vila, una activista pol¨ªtica y feminista que estuvo detenida 20 meses en la Direcci¨®n de Auxilio Judicial, conocida como El Chipote, en Managua, fue desterrada de su naci¨®n en 2023, declarada ap¨¢trida y deportada a Estados Unidos, junto a otros 221 opositores. ¡°Yo habr¨ªa querido quedarme en mi pa¨ªs, pero fuimos expulsados¡±, relata.

Ella pertenec¨ªa a la coalici¨®n opositora Unidad Nacional Azul y Blanco (UNAB), nacida en 2018 para buscar una salida electoral. ¡°Sab¨ªamos que las elecciones iban a ser fraudulentas, pero quer¨ªamos hacer visible ese fraude y la pretensi¨®n de Ortega de anular por completo la v¨ªa electoral¡±, indica.

D¨¢vila fue detenida en junio de 2021, para luego permanecer aislada en una celda con un tragaluz y donde s¨®lo ten¨ªa contacto con sus interrogadores. Adem¨¢s, otras tres mujeres tambi¨¦n estaban privadas de libertad por motivos pol¨ªticos en la ¨¦poca en que ella fue encarcelada.

La activista recuerda que, antes de ser privada de su libertad, fue perseguida durante unos diez meses por agentes policiales, una pr¨¢ctica que, asegura, es com¨²n del r¨¦gimen sandinista. El d¨ªa de su arresto, D¨¢vila fue golpeada por polic¨ªas, mientras su hija de cuatro a?os, entonces, presenciaba la escena.

Al ser liberada, casi dos a?os despu¨¦s, no tuvo otra opci¨®n que salir del pa¨ªs, sin su hija, con quien logr¨® reencontrarse un a?o y ocho meses despu¨¦s de ser separadas. En su exilio, D¨¢vila se ha unido al directorio de la CDN-M bajo la convicci¨®n de que todos los procesos de di¨¢logo para una transici¨®n democr¨¢tica han estado cruzados por la acci¨®n de la comunidad internacional. ¡°Entonces, claro que sigue siendo elemental el apoyo¡±, afirma.

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