?Puede una sola enzima explicar por qu¨¦ el coronavirus mata m¨¢s a hombres que a mujeres?
Una prote¨ªna que sirve de entrada al virus tiene tambi¨¦n propiedades antiinflamatorias que protegen frente a las manifestaciones graves de la covid
El sentido com¨²n, con sus atajos para simplificar las complejidades de la vida, puede ser un obst¨¢culo al conocimiento. El presidente de EE UU, Donald Trump, cay¨® hace unos d¨ªas en un fallo t¨ªpico del pensamiento intuitivo cuando se aplica a resolver problemas de salud. Si rociar con desinfectante al virus lo noquea en un minuto, ?por qu¨¦ no tratar de inyect¨¢rselo a los afectados con el nuevo coronavirus? En el extremo opuesto, no parecer¨ªa muy razonable dar sustancias venenosas a un paciente debilitado por un c¨¢ncer, pero d¨¦cadas de estudio han demostrado que hacerlo ralentiza la enfermedad.
Pocas semanas despu¨¦s de la aparici¨®n del nuevo coronavirus ya se hablaba de la ECA2 (enzima convertidora de la angiotensina 2) como una de las puertas de entrada del virus en las c¨¦lulas humanas. Esta enzima, fundamental en la regulaci¨®n de la presi¨®n arterial, tambi¨¦n era utilizada como v¨ªa de asalto por el SARS-CoV, el pariente del actual virus que caus¨® una epidemia en 2003. Aplicando el sentido com¨²n, unos mayores niveles de ECA2 facilitar¨ªan la entrada del virus. Esta idea ha producido momentos de confusi¨®n en las ¨²ltimas semanas. Los medicamentos para la tensi¨®n alta, por ejemplo, incrementan los niveles de esta enzima e hicieron pensar que pod¨ªan agravar el curso de la covid. Y algo similar sucedi¨® con el ibuprofeno. Tambi¨¦n se ha publicado que los hombres mueren m¨¢s por la enfermedad porque tienen m¨¢s ECA2 en su sangre. La historia es m¨¢s complicada.
Letalidad en hombres y mujeres
Fallecidos sobre casos confirmados en %
Mujeres
Hombres
Edad
90 y m¨¢s
18,9
31,1
80−89
16,1
28,0
70−79
10,1
17,7
60−69
3,0
6,7
50−59
0,7
2,4
40−49
0,3
0,9
30-39
0,2
0,5
0%
10%
20%
30%
Fuente: Elaboraci¨®n propia a partir de datos
del Ministerio de Sanidad
EL PA?S
Letalidad en hombres y mujeres
Fallecidos sobre casos confirmados en %
Mujeres
Hombres
Edad
90 y m¨¢s
18,9
31,1
80−89
16,1
28,0
70−79
10,1
17,7
60−69
3,0
6,7
50−59
0,7
2,4
40−49
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Fuente: Elaboraci¨®n propia a partir de datos
del Ministerio de Sanidad
EL PA?S
Letalidad en hombres y mujeres
Fallecidos sobre casos confirmados en %
Mujeres
Hombres
Edad
90 y m¨¢s
18,9
31,1
80−89
16,1
28,0
70−79
10,1
17,7
60−69
3,0
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Fuente: Elaboraci¨®n propia a partir de datos del Ministerio de Sanidad
EL PA?S
Seg¨²n explica Jos¨¦ Luis Labandeira, catedr¨¢tico de Anatom¨ªa Humana de la Universidad de Santiago de Compostela, ¡°el sistema de la angiotensina tiene dos ejes, uno que podr¨ªamos llamar malo, proinflamatorio, que es el que representa la enzima ECA, y uno bueno, antiinflamatorio, el de la ECA2¡±. ¡°Los genes de ECA2 y alg¨²n otro componente del eje antiinflamatorio se expresan en el cromosoma X y como las mujeres tienen dos, tienen una mayor expresi¨®n de esos componentes beneficiosos¡±, a?ade Labandeira.
Con estas caracter¨ªsticas, las mujeres estar¨ªan en desventaja con su mayor carga de la prote¨ªna que sirve de v¨ªa de acceso al virus, pero su efecto antiinflamatorio protege de las manifestaciones m¨¢s letales de la enfermedad, como las neumon¨ªas. Un indicio de que en este juego de equilibrios el efecto beneficioso ganar¨ªa al perjudicial, es que la mayor¨ªa de los muertos son personas de edad avanzada y la presencia de la ECA2 desciende con el paso de los a?os. ¡°Por lo que sabemos hasta ahora, parece que ECA2 es una espada de dos filos y tenemos que aprender a manejarla, viendo c¨®mo mantener sus efectos positivos bloqueando solo los fragmentos concretos que sirven de puerta de entrada al virus¡±, concluye Labandeira.
La mayor¨ªa de los muertos son personas de edad avanzada aunque la presencia de la prote¨ªna que sirve al virus de entrada a las c¨¦lulas desciende con el paso de los a?os
Bloquear parte de la enzima, sin anularla es un trabajo de filigrana biotecnol¨®gica que ya est¨¢n desarrollando varios grupos de investigaci¨®n y empresas de todo el mundo con los anticuerpos monoclonales, mol¨¦culas que se pueden adherir a secciones precisas de los virus para incapacitar su secci¨®n de asalto o su proceso de reproducci¨®n. Y hay otras alternativas m¨¢s originales.
En Valencia, en el Instituto de Biomedicina del CSIC, Alberto Marina y Vicente Rubio buscan conservar el anverso positivo de la ECA2 utilizando a su favor el reverso tenebroso de la enzima. Su objetivo es dise?ar variantes artificiales de la prote¨ªna que no influyan, por ejemplo, en la presi¨®n arterial de quien las tome, pero que puedan actuar como se?uelo para que el SARS-CoV-2 se una a ellas y deje en paz al organismo. Cuenta Vicente Rubio, que lidera junto a Marina este proyecto del Ciberer (Centro de Investigaci¨®n Biom¨¦dica en Red de Enfermedades Raras), que uno de los impulsos para iniciar este proyecto fue una muerte cercana, la de su primera t¨¦cnico de laboratorio, con poco m¨¢s de 70 a?os. ¡°Probaron de todo con ella y nada funcionaba, y pens¨¦ que eran necesarias alternativas¡±, recuerda.
La experiencia del equipo del Ciberer viene de la biolog¨ªa estructural. Observan las prote¨ªnas con detalle at¨®mico y ven c¨®mo encajan unas con otras como piezas de un rompecabezas. ¡°Queremos fabricar un s¨²per receptor, que tenga una afinidad aumentada por el virus¡±, apunta Rubio. Junto a este intento de fabricar un f¨¢rmaco, que se encuentra en una fase muy preliminar, quieren comprender mejor el mecanismo que permite al virus infectar a las c¨¦lulas, para poder dise?ar mol¨¦culas espec¨ªficas que lo impidan en lugar de probar muchas y ver cu¨¢l funciona.
Por el camino, para fabricar un mejor se?uelo, quieren estudiar si hay variantes gen¨¦ticas que explican que unas poblaciones sean m¨¢s susceptibles al virus que otras. ¡°La poblaci¨®n afroamericana, por ejemplo, tiene niveles menores de ECA2 y se ha visto que la presi¨®n arterial est¨¢ relacionada con el color de la piel y que los afroamericanos tienen una patolog¨ªa cardiovascular m¨¢s acentuada¡±, explica Marina. ¡°Ahora se est¨¢n buscando correlaciones de este tipo que sean s¨®lidas para luego analizar si existe causalidad¡±, concluye.
Descifrar los mecanismos precisos que explican el funcionamiento de esta enzima y su relaci¨®n con el coronavirus ayudar¨¢ a superar las trampas del sentido com¨²n para empezar a comprender qu¨¦ est¨¢ sucediendo y poder actuar con conocimiento.
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