La primera cama de la humanidad fue construida con hierba y ceniza hace 200.000 a?os
Los habitantes de la Edad de Piedra del sur de ?frica utilizaron esa mezcla para crear lechos c¨®modos y protegerse de los insectos
Cerca de Border Cave, en Sud¨¢frica, solo hay una aldea. Esta cueva, explorada desde el principio del siglo XX por su riqueza arqueol¨®gica, ha arrojado una nueva evidencia de que las primeras sociedades humanas tuvieron un comportamiento complejo antes de lo que se pensaba. Este jueves, un estudio publicado en Science describe la primera cama de la humanidad conocida hasta ahora, de hace 227.000 a?os. Este hallazgo indica que las comunidades de la Edad de Piedra (Middle Stone Age) ya buscaban comodidad, ordenaban su espacio y se proteg¨ªan de posibles plagas. El lecho est¨¢ constituido por una capa de cenizas que juega un papel de aislante sobre la que se a?adieron gavillas de hierba. ¡°La preservaci¨®n org¨¢nica es excepcional¡±, reitera Paloma de la Pe?a, autora del estudio e investigadora de la Universidad de Witwatersrand (Sud¨¢frica).
Las primeras sociedades modernas ya hab¨ªan entendido las virtudes de los elementos del ambiente y c¨®mo defenderse de las posibles amenazas que les rodeaban. La ceniza asfixia a los insectos y bloquea las partes bucales de garrapatas y otras plagas. Ese elemento, clave en las pr¨¢cticas culturales para evitar picaduras de insectos, a menudo eran restos de ropa de cama quemada para mantener el sitio limpio. En el lugar tambi¨¦n se hallaron restos del arbusto arom¨¢tico sudafricano Tarchonanthus (el alcanfor africano) en la parte superior del lecho de hierbas. Esta planta todav¨ªa se usa en zonas rurales del Este de ?frica para repeler insectos y es probable que, junto con cenizas de hogueras, tambi¨¦n se usara para ahuyentar a los insectos voladores en Border Cave.
Los restos bot¨¢nicos son poco comunes debido a su fragilidad. Estos restos se conocen como fitolitos (fito-planta y lito-piedra) y son restos microsc¨®picos de s¨ªlice que reproducen la estructura celular de ciertas plantas. Debido a su composici¨®n inorg¨¢nica, los fitolitos pueden conservarse en condiciones en las que materia vegetal no carbonizada no se preserva. Estos restos se han podido identificar gracias a microscop¨ªa de grandes aumentos y anal¨ªticas de componentes minerales y org¨¢nicos. ¡°En Border Cave, hemos encontrado la mayor concentraci¨®n de fitolitos documentada en el registro arqueol¨®gico hasta el momento¡±, asegura Irene Esteban, paleobot¨¢nica en la misma universidad y autora del estudio. La experta advierte que hay escasos datos arqueol¨®gicos del tipo de plantas y los diferentes usos por parte que poblaciones de cazadores-recolectores durante la Prehistoria.
Hasta ahora, este tipo de lechos se hab¨ªan encontrado en Sibudu, en el norte del pa¨ªs y databa de hace 77.000 a?os, seg¨²n se public¨® hace cinco a?os en Science . ¡°La mayor sorpresa fue descubrir algo a¨²n m¨¢s antiguo que eso¡±, precisa Lyn Wadley, autora de ambos estudios e investigadora en la Escuela de Geograf¨ªa, Arqueolog¨ªa y Estudios Ambientales de la Universidad de Witwatersrand (Sud¨¢frica).
Comportamiento complejo y perspicacia
Todo indica que, hace m¨¢s de 200.000 a?os, el ser humano ya era capaz de crear una tecnolog¨ªa para facilitarle la vida. La cama de hierba era un elemento clave y precursor para su bienestar. Hasta ahora, la comunidad cient¨ªfica ten¨ªa un debate: ?cu¨¢ndo naci¨® la complejidad de nuestro comportamiento? Muchos expertos no cre¨ªan que el l¨ªmite se situaba en hace 40.000 a?os. ¡°Nosotros creemos que fue antes y con este trabajo sumamos una evidencia. Ten¨ªan ya un razonamiento, acomodaban su espacio y pensaban en astucias para mantenerlo¡±, confirma De la Pe?a. Los primeros restos de Homo sapiens encontrados hasta ahora se remontan a hace 300.000 a?os, lo que supone que desde el primer momento ya eran capaces de planificar y encontrar soluciones.
Wadley asegura que poner cenizas debajo de la ropa de cama demuestra ambos puntos. ¡°Una vez que la ropa de cama se ensucia, quemarla muestra una mayor capacidad para resolver problemas. Tambi¨¦n pudieron hacer fuego a voluntad (tal vez golpeando piedras juntas) y esta t¨¦cnica fue clave para todas las innovaciones m¨¢s complejas que vemos en sitios arqueol¨®gicos m¨¢s recientes (como el tratamiento t¨¦rmico de rocas para tallarlas)¡±, relata.
Wadley lleva muchos a?os trabajando en esto, pero esta investigaci¨®n le ha ense?ado cosas nuevas, como por ejemplo que la gente de la ¨¦poca ten¨ªa conocimientos medicinales, que limpiaba sus campamentos en lugar de simplemente mudarse a otro. ¡°Border Cave est¨¢ protegido y es agradable, por lo que la gente probablemente quer¨ªa quedarse m¨¢s tiempo¡±. Por eso, la experta supone que para estar en condiciones saludables, quemaron ropa de cama sucia e hicieron camas limpias. A su vez, cree que no se quedaban en la cueva m¨¢s de unas pocas semanas, pues eran grupos de cazadores-recolectores que fueron probablemente muy m¨®viles y que utilizaron cuevas, abrigos rocosos o espacios abiertos como campamentos base.
Dudas y pasos a seguir
No se puede saber a ciencia cierta para qu¨¦ utilizaban estas construcciones, pero s¨ª que entre 200.000 a?os y 40.000 a?os la cueva tuvo varias ocupaciones. Este uso que se hac¨ªa de ella no era continuo, pues en cada estrato del registro no se ve gran cantidad de restos l¨ªticos (herramientas de piedra). ¡°Vemos una densidad de ocupaci¨®n baja. No creo que vivieran ah¨ª durante largos periodos de tiempo. Adem¨¢s, parece que todo est¨¢ tal y como lo dejaron. Es fascinante. Es como si fuese un instante capturado en el tiempo¡±, cuenta De La Pe?a, experta en l¨ªtica en armon¨ªa con el discurso de Wandley. Entre las fibras de hierba silicificadas, la arque¨®loga percibi¨® peque?os trozos de piedra tallada y de ocre. ¡°Eso indica que trabajaron y que hac¨ªan adornos corporales u objetos¡±, a?ade. Otra de las hip¨®tesis de los investigadores es que tambi¨¦n los utilizaban para dormir.
Al principio del siglo XX y en la historia de la investigaci¨®n de esta cueva, los expertos iban a pico y pala. ¡°Iban demasiado r¨¢pido¡±, asegura De la Pe?a. En los a?os 40, sacaron los sedimentos y encontraron restos humanos. A Wandley, le gustar¨ªa examinar los patrones espaciales en Border Cave para ver c¨®mo la gente organizaba sus espacios. ¡°Me intrigan los sitios que fueron ocupados por personas cercanas al origen de nuestra especie. Me gusta tratar de averiguar c¨®mo pensaban, c¨®mo planificaron y compartieron sus vidas con otros miembros del grupo¡±, concluye.
Hay unanimidad en que lo que m¨¢s llama la atenci¨®n de este yacimiento es la calidad de preservaci¨®n de los restos que aguarda m¨¢s de 200.000 a?os de historia. Por esta raz¨®n, la idea de la comunidad cient¨ªfica es seguir excavando para desvelar m¨¢s evidencias y dibujar la evoluci¨®n m¨¢s completa posible del principio de la humanidad y de su complejidad.
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