Biden frente a la covid

Hasta ahora no hemos obtenido ninguna inspiraci¨®n de la Casa Blanca sobre c¨®mo abordar la pandemia de covid-19. Un Gobierno dirigido por un negacionista, anticient¨ªfico, irracional y mendaz solo puede servir como un ejemplo de lo que no hay que hacer. La principal estrategia de Donald Trump contra el SARS-CoV-2 ha consistido en intentar librarse de Anthony Fauci, el inmun¨®logo de referencia que lleva diez meses dici¨¦ndole la verdad a la cara. El antiguo estratega de Trump, el ejecutivo de medios Steve Bannon, ha llegado a proponer decapitar a Fauci y exhibir su cabeza pinchada en una pica a las puertas de la Casa Blanca, junto a la del director del FBI. Espero que lo dijera en broma, aunque sea una broma macabra con 10 millones de estadounidenses contagiados y 240.000 muertos.

Pero el caso que Trump, por m¨¢s que pretenda enquistarse en el Gobierno como un nematelminto parasitario, es un pato cojo que tendr¨¢ que dejar la Casa Blanca el 20 de enero, as¨ª tenga que arrastrarle una reata de mulas muy fuertes. Es cierto que un jabal¨ª herido puede hacer mucho da?o en los dos meses y pico que faltan para eso, pero ahora sabemos que la irracionalidad tiene fecha de caducidad, y que a partir de entonces Estados Unidos volver¨¢ a la senda de la raz¨®n cient¨ªfica. Biden ya ha presentado su plan anticovid, y los investigadores que lo han examinado piensan que va por el buen camino. Dos meses es un mont¨®n de tiempo en una pandemia, y nadie va a devolver la vida a todos esos muertos evitables, pero m¨¢s vale tarde que nunca.

Biden y su vicepresidenta Kamala Harris han anunciado un panel asesor formado por cient¨ªficos especializados. El tipo de gente a la que Trump no se digna a escuchar

Biden y su vicepresidenta Kamala Harris han anunciado un panel asesor formado por cient¨ªficos especializados en enfermedades infecciosas y antiguos asesores de salud p¨²blica con todas las referencias en regla. El tipo de gente a la que Trump no se digna a escuchar, por la sencilla raz¨®n de que representan la mejor ciencia disponible. Tambi¨¦n han presentado un nuevo plan contra la covid que ha sido recibido con alivio por los expertos independientes que lo han examinado. Una opini¨®n generalizada es que los cient¨ªficos del comit¨¦ Biden son de primera l¨ªnea, y que el plan revela que la lucha contra la pandemia es una de las m¨¢ximas prioridades de la nueva Administraci¨®n. En un plano m¨¢s subjetivo, hablan de alivio, y seguramente lo sienten de veras.

Una de las prioridades del plan Biden es generalizar las pruebas de covid y reforzar el rastreo de contactos con los consiguientes aislamientos de los positivos. Habr¨¢ un panel de control pand¨¦mico federal para unificar la toma de datos y su seguimiento diario con criterios homologables. Los CDC (centros de control de enfermedades de Atlanta) recuperar¨¢n la funci¨®n para la que fueron creados, y que hab¨ªa cumplido a la perfecci¨®n hasta que Trump meti¨® all¨ª sus zarpas. Ahora que podemos inspirarnos por fin en la pol¨ªtica de salud p¨²blica de la mayor potencia cient¨ªfica del mundo, tal vez deber¨ªamos hacerlo. Biden y Harris nos pueden dejar en evidencia.

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