Una mujer supera una de las peores infecciones conocidas gracias a un tratamiento con virus
Cient¨ªficos y m¨¦dicos describen c¨®mo salvaron a una ciudadana belga herida en un atentado de una bacteria resistente a todos los antibi¨®ticos
El 22 de marzo de 2016 K.N. ¡ªuna mujer belga de 30 a?os¡ª estaba en el aeropuerto de Bruselas cuando estall¨® una bomba a pocos metros. Era un ataque terrorista islamista en el que murieron 35 personas incluidos tres de los suicidas autores de la masacre. Hoy se publica el asombroso relato cient¨ªfico de c¨®mo esa persona consigui¨® salvar la vida. Fue gracias a un tratamiento experimental con virus que permitieron acabar con una infecci¨®n por una bacteria que se hab¨ªa vuelto resistente a todos los antibi¨®ticos, un problema global que cada a?o mata a m¨¢s de un mill¨®n de personas en todo el mundo.
Tras la explosi¨®n, la herida fue trasladada de urgencia al Hospital Erasmo de la capital belga. Su coraz¨®n ya no lat¨ªa. Los m¨¦dicos consiguieron reanimarla. Le amputaron parte de la cadera e hicieron una intervenci¨®n de urgencia para salvarle la pierna. Meses despu¨¦s, cuando la situaci¨®n parec¨ªa estabilizada, empez¨® el verdadero infierno: una bacteria de la especie Klebsiella neumoniae hab¨ªa infectado su muslo izquierdo y no respond¨ªa al tratamiento con ninguno de los antibi¨®ticos existentes. Los m¨¦dicos se dieron cuenta de que aquel microbio podr¨ªa ser m¨¢s peligroso para la vida de esta mujer que la bomba que casi la mata.
La bacteria que hab¨ªa infectado a esta paciente forma parte de ESKAPE, el grupo con las seis especies de microbios resistentes a antibi¨®ticos m¨¢s peligrosas, seg¨²n la definici¨®n de la Organizaci¨®n Mundial de la Salud (OMS). Estos microorganismos suponen una de las principales amenazas para la salud global. La OMS calcula que estas infecciones que se ceban en pacientes hospitalizados matar¨¢n a 10 millones de personas al a?o en 2050. Son tres veces m¨¢s muertes que todas las que caus¨® la covid en 2020.
¡°Yo estaba de guardia en la UCI cuando lleg¨® esta paciente y me encargu¨¦ de ella durante tres a?os, dos de tratamiento y uno de rehabilitaci¨®n¡±, recuerda la m¨¦dico Ana?s Eskenazi, primera autora del estudio en el que se describe al detalle c¨®mo consiguieron curar a la paciente. El relato es escalofriante: cinco operaciones, incluidas la extirpaci¨®n de parte del est¨®mago y el bazo, autotrasplantes de tejido y finalmente esa infecci¨®n que no desapareci¨® durante cuatro meses de tratamiento con todos los antibi¨®ticos existentes.
Dos a?os despu¨¦s del atentado la paciente segu¨ªa sufriendo infecciones. El equipo m¨¦dico decidi¨® recurrir a un tratamiento experimental que suele usarse como ¨²ltimo recurso: usar virus especializados en matar bacterias para combatir la infecci¨®n. Hab¨ªa primero que buscar los mejores virus contra esta bacteria, algo que no es sencillo, pues los virus bacterianos, o fagos, son la entidad biol¨®gica m¨¢s numerosa de la Tierra.
¡°Estos virus est¨¢n en todas partes, en los intestinos, en la garganta, en la piel, hay 10 veces m¨¢s fagos que bacterias¡±, explica Jean-Paul Pirnay, bi¨®logo molecular del Hospital Militar Reina Astrid de B¨¦lgica. Pirnay dirige el grupo m¨¢s avanzado de Europa en el uso de estos para combatir infecciones bacterianas imposibles de vencer solo con antibi¨®ticos. El experto recurri¨® al Instituto Eliava de Georgia, que lleva m¨¢s de un siglo aplicando la terapia de fagos contra infecciones. Es una herencia que se remonta a la Uni¨®n Sovi¨¦tica, donde floreci¨® esta t¨¦cnica en la II Guerra Mundial, en especial durante horribles batallas como la de Stalingrado, recuerda Pirnay.
El equipo analiz¨® el genoma de la bacteria que infectaba a la paciente y comenz¨® a buscar un fago capaz de matarla. Lo encontraron en agua de una alcantarilla. Tras preparar los virus para la terapia se le administraron a la paciente directamente en la zona infectada.
La terapia combinada de fagos y antibi¨®ticos elimin¨® la infecci¨®n por completo, seg¨²n relata este martes el equipo m¨¦dico en Nature Communications. Tres a?os despu¨¦s del tratamiento esta mujer puede andar de nuevo con la ayuda de muletas e incluso participa en eventos deportivos, aseguran sus m¨¦dicos en el estudio.
¡°Este es uno de los tratamientos m¨¢s prometedores contra las bacterias resistentes¡±, resalta Eskenazi. Estos microbios suelen acumularse en finas capas adheridas a materiales de cirug¨ªa o tratamiento, como las pr¨®tesis coronarias o las sujeciones met¨¢licas fijadas a los huesos rotos. ¡°Un equipo de la Universidad de Leiden, en Holanda, cre¨® esas mismas pel¨ªculas en el laboratorio y demostr¨® que la terapia combinada de fagos y antibi¨®ticos consegu¨ªa eliminar la infecci¨®n mucho mejor que estos tratamientos por separado¡±, detalla Eskenazi.
Parte del ¨¦xito se debe al ¡°entrenamiento de los fagos¡±, explica Pirnay. Esto consiste en dirigir la evoluci¨®n de estos virus cultivando una generaci¨®n tras otra junto a las bacterias que infectan al paciente. En cada ronda se seleccionan los virus que m¨¢s bacterias matan y se pasa a la siguiente. El resultado es una tropa de ¨¦lite contra ese pat¨®geno en concreto. ¡°Los fagos son inofensivos para las personas porque llevamos evolucionando junto a ellos durante millones de a?os. El ¨²nico inconveniente de este tipo de terapia es su especificidad; para cada bacteria hay que encontrar el fago que puede combatirla¡±, detalla Pirnay.
En los ¨²ltimos a?os, el equipo de Pirnay ha tratado con fagos a m¨¢s de 100 pacientes en 12 pa¨ªses, incluido uno en el Hospital Virgen de la Macarena de Sevilla. Era un hombre de 58 a?os que llevaba un a?o con una infecci¨®n sangu¨ªnea causada por Pseudomonas aeruginosa, otra de las bacterias del grupo m¨¢s peligroso.
Los m¨¦dicos solicitaron a Pirnay un preparado de fagos y se lo aplicaron al paciente, que super¨® la infecci¨®n, explica Mar¨ªa del Mar Tom¨¢s, experta en fagos del Hospital Universitario A Coru?a, que particip¨® en el tratamiento de este paciente. ¡°Los fagos consiguen que las bacterias dejen de ser resistentes a antibi¨®ticos¡±, detalla la microbi¨®loga. ¡°Los virus bacterianos atacan las mismas dianas moleculares que usan las bacterias para evitar el efecto de los antibi¨®ticos. Si primero administras fagos y despu¨¦s antibi¨®ticos, bloqueas su resistencia y las infecciones remiten¡±, se?ala.
Pilar Domingo Calap es una cazadora de fagos. ¡°Los encontramos en cualquier sitio, aguas residuales, acequias, suelos, incluso en las plantas del centro de la ciudad¡±, explica esta microbi¨®loga del Instituto de Biolog¨ªa Integrativa de Sistemas de Valencia. Su laboratorio ha encontrado m¨¢s de 200 tipos de fagos capaces de combatir K. pneumoniae. Tambi¨¦n trabaja en casos espec¨ªficos de unos pocos pacientes con infecciones resistentes, por ejemplo un chaval con fibrosis qu¨ªstica que est¨¢ esperando un trasplante doble de pulm¨®n y que sufre una infecci¨®n resistente a antibi¨®ticos, explica.
Estas terapias est¨¢n a¨²n dando sus primeros pasos y su aplicaci¨®n generalizada es complicada, explica Domingo. ¡°En Europa en general, salvo en los pa¨ªses del Este, no est¨¢ regularizado el uso de fagos en cl¨ªnica. Es necesaria una legislaci¨®n concreta para poder utilizarlos de forma rutinaria. En Francia o B¨¦lgica los gobiernos ya est¨¢n invirtiendo en estas terapias experimentales, aunque todav¨ªa queda mucho camino por recorrer para su regularizaci¨®n. En Espa?a solo se permite como tratamiento compasivo. Desde la Red Espa?ola de Bacteri¨®fagos estamos intentando que la Agencia de Medicamentos nos permita regularizar su utilizaci¨®n¡±, detalla.
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