El dilema ¨¦tico de la primera granja comercial de pulpos del mundo proyectada en Canarias

Los pulpos tienen tres corazones, carecen de esqueleto, viven en aguas tropicales y templadas en oc¨¦anos alrededor del mundo. Sus caracter¨ªsticas siguen sorprendiendo a los cient¨ªficos: son capaces de saborear con los tent¨¢culos o de so?ar, y su red neuronal, extremadamente compleja, se expande fuera de los l¨ªmites de su cabeza, abarcando sus tent¨¢culos, ventosas e incluso la piel, haciendo de estos animales de ocho brazos aut¨¦nticos cerebros andantes. Tanto es as¨ª, que est¨¢n considerados los m¨¢s inteligentes de todos los invertebrados (como puso de manifiesto el oscarizado documental Lo que el pulpo me ense?¨®). Pero, adem¨¢s, resultan un manjar para muchos humanos. Tanto, que la pesca de calamares, jibias y pulpos ascendi¨® a 3,74 millones de toneladas en 2019 ¡ª¨²ltimo dato disponible, seg¨²n el informe anual de la Organizaci¨®n de las Naciones Unidas para la Alimentaci¨®n y la Agricultura (FAO, por sus siglas inglesas)¡ª y el valor de sus exportaciones se triplic¨® entre 1999 y 2019 hasta 17.109 millones de d¨®lares.

Este ¨¦xito ha provocado la sobreexplotaci¨®n de los caladeros y ha empujado a buscar formas alternativas de negocio. As¨ª, la pesquera gallega Nueva Pescanova tiene previsto invertir unos 45 millones de euros en construir la que ser¨ªa la primera granja de cr¨ªa de pulpos para uso comercial del mundo, un objetivo perseguido tambi¨¦n por investigadores de la Universidad Nacional Aut¨®noma de M¨¦xico (UNAP), que cuentan con dos patentes que todav¨ªa no han conseguido llevar a esta escala industrial. En el caso espa?ol, la compa?¨ªa prev¨¦ contar con unas instalaciones de 52.000 metros cuadrados en el puerto de Las Palmas de Gran Canaria y generar 300 puestos de trabajo para la producci¨®n de unas 3.000 toneladas de pulpos al a?o a partir de 2023. El Gobierno de Canarias estudia en la actualidad si el proyecto cumple los requisitos de impacto ambiental.

La noticia no ha tardado en causar reacciones airadas en algunos cient¨ªficos y en los defensores de los animales. El pasado s¨¢bado, algunas decenas de personas se manifestaron ante el Ayuntamiento de las Palmas de Gran Canaria, convocadas por el partido animalista Pacma, en nombre de ¡°m¨¢s de 60 organizaciones espa?olas e internacionales¡± para protestar por el proyecto. ¡°Debemos caminar hacia la construcci¨®n de una sociedad m¨¢s justa para los animales, en la que el respeto, la ¨¦tica y la empat¨ªa sean el eje central, pilares que se ver¨ªan fuertemente amenazados por la instalaci¨®n de esta terrible granja de pulpos¡±, han asegurado los organizadores de la protesta. ¡°Hemos condenado a otras especies a vivir esclavizadas, explotadas en granjas de por vida... no condenemos ahora a los pulpos¡±.

Elena Lara, la responsable de investigaci¨®n de la organizaci¨®n internacional Compassion in World Farming, incide en esta idea en conversaci¨®n telef¨®nica. ¡°Los pulpos son animales extremadamente inteligentes y complejos, necesitan mucha estimulaci¨®n en su entorno¡±, subraya. ¡°Son especies solitarias, no adaptadas a las condiciones intensivas en las granjas. Ser¨ªa irresponsable ponerlos en tanques vac¨ªos sin ning¨²n est¨ªmulo¡±.

Lara es la autora de un informe publicado en octubre en el que reclamaban al Gobierno espa?ol que hiciese ¡°lo correcto, lo moral y lo ¨¦tico y no permita que Canarias, ni ning¨²n otro lugar del pa¨ªs, sufra el deshonor de abrir este centro de exterminio de pulpos¡±. Lara ve una gran diferencia entre implantar granjas de animales como pollos o cerdos y una de pulpos. ¡°Estos son animales salvajes, no los hemos domesticado a diferencia de lo que sucede en las granjas tradicionales. Sabemos c¨®mo mejorar las condiciones de vida de los cerdos y a los pollos. Los pulpos, en cambio, son muy fr¨¢giles: no hay forma de sacrificar a un pulpo de manera humanitaria¡±, afirma.

D¨¦cadas de investigaci¨®n

El proyecto de Nueva Pescanova es la conclusi¨®n de d¨¦cadas de investigaci¨®n de organizaciones como el Instituto Espa?ol de Oceanograf¨ªa (IEO), que desarroll¨® un protocolo que mejor¨® dr¨¢sticamente la mortalidad larvaria, ¡°el momento de m¨¢s riesgo¡±, explica Eduardo Almansa, investigador del IEO, del Centro Oceanogr¨¢fico de Canarias y de la Universidad de La Laguna. ¡°El tema es mucho m¨¢s complejo¡±, sostiene Almansa. ¡°?Queremos seguir comiendo pulpo? Porque la demanda est¨¢ aumentando a escala mundial, y a este ritmo las pesquer¨ªas no van a poder cubrirla. Nosotros tratamos de buscar alternativas para producir un alimento del que hay demanda, de una manera viable y sostenible y que se asegure el bienestar animal¡±.

¡°La otra opci¨®n es seguir esquilmando las reservas¡±, comentan fuentes del sector empresarial canario que ha trabajado en el desarrollo de la nueva planta. ¡°La pesca no es el medio m¨¢s sostenible posible. Evidentemente, hay que asegurar unas condiciones de bienestar b¨¢sicas¡±.

Un portavoz de Nueva Pescanova asegura que el ¡°desaf¨ªo cient¨ªfico¡± se concentra ahora, precisamente, en ¡°la optimizaci¨®n y bienestar del pulpo com¨²n bajo condiciones de cultivo¡±, y especifica que est¨¢n trabajando en esa l¨ªnea con ocho centros de investigaci¨®n. Estos grupos de trabajo, detalla el representante de la compa?¨ªa, est¨¢n ¡°desvelando propiedades y comportamientos in¨¦ditos sobre la especie del octopus vulgaris que se compartir¨¢n con la comunidad cient¨ªfica durante los pr¨®ximos meses¡±. La empresa sostiene, adem¨¢s, que los estudios de densidades de poblaci¨®n desarrollados por el IEO, iniciados en el a?o 2005, han demostrado que estos animales se adaptan ¡°con normalidad¡± a los entornos de vida en grupo ¡°sin agresiones por territorialidad¡±.

Su adaptaci¨®n, recalca Nueva Pescanova, se ha logrado aplicando una soluci¨®n avanzada de zootecnia, denominada EcoBiological Production System (EBPS_O), que traslada al cultivo las condiciones naturales propias y espec¨ªficas de la especie en su estado salvaje al cultivo. ¡°Estas condiciones evitan que el pulpo tenga respuestas asociadas a falsas sensaciones de peligro, como la huida ante depredadores, y priorice su movimiento m¨¢s natural y habitual a trav¨¦s de los brazos, evit¨¢ndose as¨ª que sufra da?os por colisi¨®n y reduci¨¦ndose de forma notable el estr¨¦s del animal¡±, asegura la empresa promotora.

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