Duplicar la vida ¨²til de m¨®viles y port¨¢tiles en Espa?a evitar¨ªa emisiones de CO? equivalentes a las que generan 17.000 coches en un a?o
La obsolescencia de los dispositivos electr¨®nicos supone un desperdicio de materias primas cr¨ªticas, como el litio y el cobalto, seg¨²n un informe de Amigos de la Tierra publicado en v¨ªsperas del Black Friday
La vida ¨²til de un m¨®vil en Espa?a es de tres a?os y medio. El de un port¨¢til, de seis. Si se duplicaran, la atm¨®sfera se ahorrar¨ªa el impacto de 28 millones de toneladas de di¨®xido de carbono: el equivalente a lo que emiten 17.000 coches en un a?o. As¨ª lo calcula el informe Alargascencia: beneficios ambientales de alargar la vida ¨²til de tel¨¦fonos m¨®viles y port¨¢tiles en Espa?a, elaborado por la organizaci¨®n ecologista Amigos de la Tierra junto al Instituto de Energ¨ªa y Eficiencia de los Recursos de la Universidad de Zaragoza, y publicado este jueves, v¨ªspera del Black Friday, la gran cita del consumo antes de las Navidades. Seg¨²n la previsi¨®n de la Asociaci¨®n de Fabricantes y Distribuidores (AECOC), el 51% de los espa?oles aprovechar¨¢ las ofertas para comprar productos de telefon¨ªa, inform¨¢tica y electrodom¨¦sticos.
Sumado a la reducci¨®n de los gases de efecto invernadero, el estudio de Amigos de la Tierra subraya que un modelo de producci¨®n basado en la alargascencia ¡ªprolongar la vida de los objetos de consumo¡ª y no en la obsolescencia, tendr¨ªa, a su vez, un impacto positivo en el ahorro de energ¨ªa y en la reducci¨®n de la miner¨ªa. A cada a?o de vida ¨²til a?adido a un m¨®vil, el consumo energ¨¦tico entre 2024 y 2040 se reducir¨ªa en 1.389 GWh, lo mismo que consume una ciudad como Zaragoza en un a?o.
El estudio analiza el consumo energ¨¦tico durante la producci¨®n de los dispositivos a partir de los datos que ofrec¨ªa la compa?¨ªa Apple antes de su transformaci¨®n hacia las renovables. La extracci¨®n y refinamiento de las materias primas suponen un 30% de las emisiones de gases de efecto invernadero en el ciclo de vida de un m¨®vil. A esto, habr¨ªa que agregar el impacto del consumo durante su utilidad. En la producci¨®n de los port¨¢tiles, el ¡°consumo energ¨¦tico previo a su uso es de 1.250 kWh por aparato¡±, expresa el estudio.
El caso de la miner¨ªa es todav¨ªa m¨¢s significativo. La Uni¨®n Europea califica como materias primas cr¨ªticas el litio y el cobalto, metales fundamentales para la producci¨®n de bater¨ªas, ya sea de un coche el¨¦ctrico, un port¨¢til o un m¨®vil. La bater¨ªa de estos ¨²ltimos lleva menos de un gramo de litio y alrededor de ocho de cobalto. Sin embargo, si se aumentara en un a?o la vida media de los dispositivos nuevos (tan solo de los nuevos) en Espa?a, el consumo de estos elementos qu¨ªmicos caer¨ªa en 29 toneladas para el litio y en 203 para el cobalto de aqu¨ª a 2040. Si cada m¨®vil fuese desechado cada 7 a?os, el impacto ser¨ªa de 68 toneladas y 473 toneladas, respectivamente. En los port¨¢tiles, los efectos se triplicar¨ªan.
El informe tambi¨¦n plantea un escenario ideal en el que no solo se alargue el funcionamiento de los dispositivos nuevos, sino el de los que ya se encuentran en circulaci¨®n. En ese contexto, la reducci¨®n de consumo de litio aumentar¨ªa casi en un 20% y la del cobalto un 16% aproximadamente.
Pero el impacto ecol¨®gico es mucho mayor si se toma en consideraci¨®n todos los dem¨¢s minerales necesarios para la producci¨®n de estos dispositivos. La placa electr¨®nica de un m¨®vil contiene casi la mitad de los elementos de la tabla peri¨®dica. Esto hace que las bater¨ªas sean productos altamente contaminantes, sobre todo en las regiones donde se extraen los metales. El magnesio que se ahorrar¨ªa si se prolongase en un a?o la vida ¨²til de los m¨®viles espa?oles equivale al que necesitan casi 15 molinos de energ¨ªa e¨®lica con los que se abastece a 20.000 familias con energ¨ªa limpia.
Los autores del informe subrayan la importancia de desarrollar un cambio de modelo productivo que permita ¡°ahorrar minerales escasos y necesarios para cubrir otras necesidades relacionadas con el fin de los combustibles f¨®siles¡±. Y apuntan contra la obsolescencia programada. Una de las herramientas que consideran ¨²tiles para desarrollar este modelo es a trav¨¦s de la penalizaci¨®n, y citan el ejemplo franc¨¦s, donde desde 2015 se ¡°penaliza esta pr¨¢ctica con hasta dos a?os de prisi¨®n y multas de 300.000¡± euros.
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