Menos lobos

Entre los peores vicios de las sociedades opulentas figura en lugar estelar el desenga?o fulminante, la decepci¨®n irreprimible, la frustraci¨®n incontenible ante la menor adversidad o contratiempo. Es un s¨ªndrome de sociedades consentidas que no hay que confundir, o en TintaLibre preferimos no hacerlo, con sociedades democr¨¢ticamente m¨¢s exigentes con sus gobernantes y con sus vidas, y de eso hablan Lina G¨¢lvez y Mar¨ªa Eugenia Rodr¨ªguez Palop en v¨ªsperas de las elecciones europeas del 9 de junio en el n¨²mero de junio de TintaLibre, que est¨¢ disponible en quioscos y para suscriptores a partir de este fin de semana.

Cuestionar la poquedad de la pol¨ªtica de la vivienda y la lentitud de la rectificaci¨®n de decisiones profundamente equivocadas del pasado es tan necesario como navegar, pero no lo es mantener una visi¨®n distorsionada de la pluralidad de quehaceres culturales e intelectuales entre los que sobrevivimos. En TintaLibre hemos querido consultar con un pu?ado de escritores sus visiones de cosas tan del d¨ªa como la ficci¨®n narrativa, la pol¨ªtica, las redes sociales y sus submundos o el mism¨ªsimo paciente cr¨®nico que ha sido desde hace trescientos a?os el teatro. Nos cuentan sus miradas Raquel Taranilla y Alba Lafarga, Ignacio S¨¢nchez-Cuenca y Carlos Javier Gonz¨¢lez Serrano, Eva G¨¹imil y M¨®nica Cano. Tirar cohetes es ruidos¨ªsimo y casi de mala educaci¨®n, pero tirarse al r¨ªo de la desesperaci¨®n es peor.

A la ciencia acudimos casi siempre cuando tenemos miedo por una pandemia o por una enfermedad o por una angustia insuperable. Pero en este n¨²mero hemos querido escuchar a dos cient¨ªficos sin causa aparente o simplemente porque s¨ª, para aprender de ellos: qu¨¦ falla en la investigaci¨®n puntera espa?ola es lo que intenta contestar Fernando Maestre y qu¨¦ aporta a la ciencia la dedicaci¨®n lib¨¦rrima y ajena a la academia es lo que contesta Juan Pimentel.

A Lola Larumbe le sigue poniendo estar al frente de la librer¨ªa Alberti, reci¨¦n inaugurada la Feria del Libro de Madrid, y el recorrido europeo del jefe de redacci¨®n de TintaLibre, Ram¨®n Reboiras, por la Europa surrealista es un pretexto ¨®ptimo para explicar por qu¨¦ abrimos y cerramos el n¨²mero con sendas invocaciones a la imaginaci¨®n surrrealista, cien a?os despu¨¦s de su primer manifiesto, gracias a la vitalidad de Chema Madoz y a un hist¨®rico como Eugenio Granell.

Los lectores que deseen suscribirse a EL PA?S conjuntamente con TintaLibre pueden hacerlo a trav¨¦s de este enlace con una oferta que incluye la suscripci¨®n digital al diario, el PDF de la revista y su edici¨®n de papel a domicilio por 1 euro el primer mes y 14 euros el resto de las mensualidades hasta completar el a?o. Las personas que ya son suscriptoras del diario deben consultar la oferta disponible para la inclusi¨®n de la revista en el centro de atenci¨®n al suscriptor (suscripciones@elpais.es o 914 400 135).