Cuatro ins¨®litas y casi opuestas miradas sobre Don Juan
El Festival de Almagro ofrece varias versiones sobre el mito teatral espa?ol m¨¢s universal
La figura de Don Juan observada por cuatro miradas muy distintas entre s¨ª, pero todas ellas ins¨®litas desde un punto de vista ortodoxo, es protagonista de la 31 edici¨®n del Festival de Almagro. El director de la muestra, Emilio Hern¨¢ndez, quer¨ªa abordar este mito, el m¨¢s universal del teatro espa?ol, despu¨¦s de haberse detenido tanto en torno al Quijote. "Son caras del car¨¢cter espa?ol, una la del idealista, so?ador y ut¨®pico, y ahora la del canalla", dice Hern¨¢ndez, quien ha podido elegir entre muchos donjuanes este a?o.
Inaugur¨® el festival el pasado jueves Don Juan en los ruedos, de La Cuadra de Sevilla, concebido como una ¨®pera popular de caballos, bailes y cantes. Pero el primero que mira hacia Tirso de Molina lo ha puesto en escena el propio director de la muestra bajo el nombre de Don Juan. El burlador de Sevilla (hasta el 6 de julio) y con el actor Fran Perea al frente del reparto. Tambi¨¦n muy versionado llega este lunes el texto de Tirso de la mano del extravagante director brit¨¢nico Dan Jemmett (hasta el 2 de julio), una de las m¨¢s renovadoras e interesantes miradas del teatro europeo contempor¨¢neo, que se ha adentrado por primera vez en una producci¨®n espa?ola (del Teatro de la Abad¨ªa) creando un Don Juan borrachuzo, pendenciero y pel¨ªn guarreras, interpretado por Antonio Gil, un raro (por aquello de que trabaja y triunfa m¨¢s fuera de Espa?a) e interesante fen¨®meno de la escena europea, al que siempre da gusto ver sobre un escenario.
Este domingo se despidi¨® una peque?a joya esc¨¦nica del Teatro Nacional de Sao Joao de Oporto: una versi¨®n de Convidado de piedra para un teatro de papel, como los que se pusieron de moda en la Inglaterra del siglo XVIII entre las clases pudientes y aristocr¨¢ticas, que los introdujeron en sus salones y en los que se representaban obras serias y de adultos, a veces de ¨®pera.
Con m¨²sica
El encargo del montaje de Hern¨¢ndez parte del Ayuntamiento de Sevilla (en la etapa que era responsable de cultura Juan Carlos Marset, actual director del Instituto Nacional de las Artes Esc¨¦nicas y de la M¨²sica), al que se ha sumado la Sociedad Estatal de Conmemoraciones Culturales. El espect¨¢culo forma parte del proyecto Mitos de Sevilla, en el que se explora la figura de Don Juan, a trav¨¦s de ¨®peras, CD, conciertos, montajes y una exposici¨®n que se inaugurar¨¢ en Sevilla en mayo de 2009. A la hora de poner en marcha el proyecto esc¨¦nico se encarg¨® la direcci¨®n del espect¨¢culo a Emilio Hern¨¢ndez y la producci¨®n a la empresa Pentaci¨®n Espect¨¢culos, que cifra el presupuesto en "300.000 euros sin IVA al margen de los gastos de exhibici¨®n".
El montaje se estren¨® el pasado d¨ªa 21 en el I Festival de N¨¢poles, cinco d¨ªas antes de la inauguraci¨®n del Festival de Almagro, al frente del cual tambi¨¦n est¨¢ Hern¨¢ndez, lo que en palabras del doblemente director no ha supuesto ning¨²n problema: "El festival estaba ya cerrado cuando empec¨¦ los ensayos en mayo, s¨®lo faltaba algo de infraestructura, pero tengo un equipo muy grande y gracias a eso he podido abordar el montaje, cuyo estreno absoluto estaba previsto en Almagro, aunque el Festival de N¨¢poles, que se iba a celebrar en octubre, adelant¨® las fechas y yo tuve que precipitar el estreno", se?ala Hern¨¢ndez, que lament¨® ayer que m¨¢s de una veintena de personas abandonaran el teatro durante la representaci¨®n. ?l lo achac¨® al calor, aunque a la salida muchos de los espectadores lo achacaban a que el montaje no interes¨® a parte de los espectadores.
Para Hern¨¢ndez, esta era una buen¨ªsima ocasi¨®n de hablar de la impunidad del poder masculino: "Al margen de que quede patente ese abuso de poder, a trav¨¦s de la imagen de una monarqu¨ªa caduca y corrupta, nosotros hemos hecho una lectura muy comprometida del mito de Don Juan desde el punto de vista de sus v¨ªctimas", se?ala el director, quien ha elegido para representar a sus mujeres enga?adas a las actrices Marina San Jos¨¦, Isabel Pintor, Lluvia Rojo y la cantante Ana Salazar, aunque en realidad todas cantan en un momento u otro. Comparten reparte con Jorge Roelas, Juan Fern¨¢ndez y Enrique Arce y el veterano Manuel Tejada, que en su doble condici¨®n de beodo rey de N¨¢poles y justiciero rey de Castilla, es el ¨²nico actor al que Emilio Hern¨¢ndez no ha hecho cantar alguna melod¨ªa compuesta por David San Jos¨¦, responsable de toda la m¨²sica.
Tejada piensa que ¨¦sta es una versi¨®n valiente y de mucho riesgo: "Estamos convencidos de que sorprender¨¢, yo creo que hay que hacer as¨ª las cosas, es interesante que los directores arriesguen al m¨¢ximo y cuando se avanza algo en el teatro es porque el director ha tenido la valent¨ªa de trabajar sin red, porque la red que lleva es la de su equipo", se?ala el actor.
Por su parte Fran Perea, un joven Don Juan con una imagen moderna al tiempo que atemporal, tiene claro que en su trabajo quer¨ªa mostrar un Don Juan que tambi¨¦n se vea que es una v¨ªctima: "De la sociedad en la que ha vivido, y de ah¨ª que reaccione como lo hace, eso me ha preocupado especialmente transmitirlo".
Hern¨¢ndez confiesa que su dramaturgia parte de la obra de Tirso en un 80%. El hecho es que lo trufa con otros donjuanes, incluido el de su propia cosecha: "Hemos recibido la herencia de un texto pre?ado de vida y de pasi¨®n, es uno de los textos del teatro espa?ol m¨¢s poderosos en su lenguaje; no es casual que la dramaturgia universal haya cogido este personaje tan rico y tan complejo para hacerlo crecer por otras miradas, aunque nosotros estamos trabajando con la madre de todos ellos".
Coincidiendo con la tradici¨®n (pr¨¢cticamente perdida en Espa?a, aunque no en algunos pa¨ªses de habla hispana) de representar el Tenorio el 1 de noviembre, el montaje que viajar¨¢ antes y despu¨¦s a numerosas poblaciones, har¨¢ temporada en el Teatro Bellas Artes de Madrid.
Irreverente
Otro Don Juan diametralmente opuesto es el del extravagante y efectista director brit¨¢nico Dan Jemmet. Ha respetado rigurosamente el t¨ªtulo de Tirso: El burlador de Sevilla o El convidado de piedra, y muchos de sus versos, pero eso es todo. Jemmett juega con Don Juan y se r¨ªe de ¨¦l, en complicidad absoluta con los espectadores, y lo convierte en uno de esos personajes que cualquiera puede encontrarse en un bar entrada la madrugada. Esta original producci¨®n es espa?ola y por tanto no es en ingl¨¦s. Por primera vez se puede disfrutar de este sorprendente y original director, que ha contado con su escen¨®grafo de cabecera, Dick Bird, y con uno de sus actores fetiches, Antonio Gil. Tiene la suerte de que es espa?ol y que de alguna manera el extreme?o Gil se est¨¢ preparando su vuelta a Espa?a despu¨¦s de haber anonadado (en ingl¨¦s y franc¨¦s indistintamente) en los escenarios de Par¨ªs, Londres, Nueva York y otras muchas ciudades donde ha trabajado bajo la direcci¨®n de renombrados directores y prestigiadas compa?¨ªas como la brit¨¢nica (a pesar del nombre) el Th¨¨atre de la Complicit¨¦. Gil ha creado junto a Jemmett un personaje pendenciero y realmente falto de atractivos (incluso es cojo), pero al que dota del mayor poder que puede tener un hombre a la hora de seducir a una mujer: la labia. Y ah¨ª radica su poder de seducci¨®n. Gil comparte escenario con Ester Bellver, Lino Ferreira, David Luque, Luis Moreno y Marta Poveda.
Todos ellos se mueven con soltura en el espacio esc¨¦nico convertido en un bar contempor¨¢neo. Es el espacio en que ha situado esta obra un Jemmett, al que en Espa?a hemos visto con sus versiones de Shakespeare, hasta autores como Michael Ondaatje, pasando por el m¨¢s puro teatro jacobino.
Un director que deja las cosas claras: "Cuando le¨ª por primera vez el texto pens¨¦: esto es realmente malo". Luego ley¨® muchas versiones y traducciones y su conclusi¨®n final fue: "Es una mala obra, porque en realidad es una construcci¨®n ca¨®tica de escenas que con suerte se pueden unir de una manera interesante". Como le ocurre cuando aborda teatro isabelino y jacobino: "Hablo de la capacidad de unir algo muy violento, con algo verdaderamente hermoso y en don Juan me interesa mucho m¨¢s ese sugerente contraste entre lo descarnado y la belleza, que lo que hay en la representaci¨®n del mito de Don Juan, hablo de obras que atraviesan la maldad para encontrar la vida, eso es algo que tiene Don Juan, que utiliza situaciones extremas para poder ser consciente y observar la vida en todas sus vertientes".
Por otra parte se?ala que Don Quijote y Don Juan son personajes que habitan un espacio que cada persona puede reinterpretar y analizar desde muy diversos ¨¢ngulos: "Son verdaderos arquetipos, no algo que pueda ser reducido psicol¨®gicamente porque son todo y nada a la vez; Don Juan es un hombre sin nombre, es algo irreducible", dice este director que llega a Almagro con su irreverente y desternillante Don Juan.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.