Un 'collage' de dos d¨¦cadas de danza
El Ballet de la Comunidad de Madrid ultima '2 y0u maestro', con la que celebrar¨¢ su 20 aniversario y homenajear¨¢ a su fundador, V¨ªctor Ullate
Todo lo que sobre el escenario ser¨¢ gr¨¢cil y et¨¦reo, ahora es repetici¨®n y trabajo. "Las cabezas, todas juntas", "la espalda, redonda", "uno, dos, tres, cuatro". "Eso es, desde el principio otra vez". Las correcciones y ¨¢nimos constantes de Eduardo Lao (Granada, 1966), el director art¨ªstico de la compa?¨ªa desde 2001, resuenan en la sala de ensayos. Es la ¨²nica voz que se escucha en una estancia di¨¢fana, con un amplio ventanal por donde entra la luz que se refleja en los espejos. El Ballet de la Comunidad de Madrid - Compa?¨ªa de V¨ªctor Ullate ensaya 2 y0u, Maestro, con la que celebrar¨¢n su 20 aniversario y rendir¨¢n homenaje a su fundador.
"?Por qu¨¦ hacerle un homenaje cuando se haya muerto y ya no est¨¦?", comenta Lao cuando se le pregunta por c¨®mo surgi¨® la idea de rendir tributo al que fuera su maestro y con el que empez¨® a bailar en el programa infantil El Kiosko en la d¨¦cada de los 80. "Los agradecimientos hay que hacerlos cuando la persona a la que se le ofrecen los puede ver". El nuevo montaje recoge fragmentos de las obras m¨¢s caracter¨ªsticas de la compa?¨ªa "o que nos marcaron de alguna forma. Todas son piezas muy importantes para nosotros", afirma ilusionado Lao. "Las coreograf¨ªas son exactamente iguales que las que se montaron en su momento. Es lo ¨²nico que se ha mantenido, hemos dise?ado un nuevo vestuario y tambi¨¦n hemos cambiado la escenograf¨ªa". Han quedado fuera, sin embargo, los grandes ballets: Don Quijote, Giselle o, el m¨¢s reciente, Copp¨¦lia. Todas las coreograf¨ªas son neocl¨¢sicas. "La gente conoce m¨¢s nuestros espect¨¢culos cl¨¢sicos y aqu¨ª les mostramos que, adem¨¢s, hacemos tambi¨¦n otro tipo de trabajo". Lao ha seleccionado para construir este collage de danza desde El amor brujo hasta Samsara.
Ocho horas diarias, cinco d¨ªas de la semana
A las once de la ma?ana los 28 bailarines que forman la compa?¨ªa preparados para comenzar el trabajo. Si todo va bien, tendr¨¢n un descanso de media hora para comer a las tres y volver¨¢n al centro cultural Los Pinos, de Alcorc¨®n (Madrid), hasta las seis. "?Qui¨¦nes ser¨¢n?, parecen profesionales", comentan dos se?oras que salen de una las otras clases y pasan junto a la sala donde la las chicas calientan con las zapatillas de punta mientras ellos terminan los estiramientos, antes de entregarse por completo a la directora, que en este caso es Ana Noya. Suelen empezar por las coreograf¨ªas que requieren puntas, "porque as¨ª las chicas est¨¢n m¨¢s frescas", comenta Lao, "pero si es necesario se ponen por la tarde, todo depende de las necesidades del montaje". Tambi¨¦n se intenta que los ensayos en los que participa toda la compa?¨ªa sean los primeros para que nadie espere toda una ma?ana para una hora.
Est¨¢n en ese punto en el que parece que todos los minutos son pocos para que el espect¨¢culo est¨¦ perfecto antes de subir el tel¨®n. Queda una semana para el estreno, que ser¨¢ el d¨ªa 14 en el teatro de Sant Cugat del Vall¨¦s (Barcelona), pero las galas interrumpen el ritmo de los ensayos. Acaban de volver de Egipto, donde durante tres d¨ªas se convirtieron en la sensaci¨®n de El Cairo hasta el punto de que hubo gente que no fue a verlos en la capital egipcia y se desplaz¨® hasta Alejandr¨ªa para disfrutar de S¨¢msara. Tambi¨¦n tienen pendientes a¨²n funciones de Copp¨¦lia, el ¨²ltimo ballet cl¨¢sico que han montado y que llevan trabajando dos a?os.
Una compa?¨ªa internacional
"Ya no s¨¦ en que lengua hablaros", bromea Ana Noya, que tambi¨¦n comenz¨® a bailar con la compa?¨ªa cuando s¨®lo era el Ballet de V¨ªctor Ullate y el a?o pasado comenz¨® a dirigir. No fue hasta 1996 cuando se convertir¨ªa en el Ballet de la Comunidad de Madrid. Durante el ensayo, las cuentas y las instrucciones alternan el ingl¨¦s y el castellano de forma constante. La compa?¨ªa cuenta con bailarines tanto espa?oles como japoneses o rusos. Este es uno de los mayores cambios que ha sufrido el Ballet de la Comunidad de Madrid. Hace dos d¨¦cadas, la compa?¨ªa se nutr¨ªa exclusivamente de la gente que sal¨ªa de la escuela de danza de Ullate. De entre ellos surgieron grandes estrellas como Luc¨ªa Lacarra, solista de la ?pera de Munich, Tamara Rojo, solista del Royal Ballet, o ?ngel Corella. Pero la falta de bailarines, sobre todo de chicos, y las exigencias de las nuevas coreograf¨ªas, en cuanto al n¨²mero de integrantes (en 1996 contaban con un cuerpo de baile estable de s¨®lo 20 bailarines y para montar un gran ballet cl¨¢sico son necesarios en torno a 40), hicieron necesarias las audiciones.
"Vamos a probar sin la tela", contin¨²a dirigiendo Lao. En la sala un grupo de seis bailarinas se colocan en sus posiciones. Ensayan Burka, en el que se critica el sometimiento de la mujer. Una fina gasa cubre a las chicas que danzan y con sus movimientos crean ondas en el tejido. Cuatro bailarines la sujetan, apres¨¢ndolas dentro. El ritmo es lento pero constante. En una hora y media se revisa al detalle un fragmento de cinco o diez minutos. Mientras, los que no participan miran la evoluci¨®n de sus compa?eras o disfrutan de alg¨²n tentempi¨¦, en el que no faltan bollos o cereales.
De la parte al todo
Despu¨¦s de trabajar todos juntos, los bailarines se dividen en las diferentes salas de ensayos de que disponen. Mientras una parte ensaya en grupo otros preparan sus solos o se aprenden las coreograf¨ªas. "Los bailarines comenzaron a ensayar en septiembre. Muchos que ya conoc¨ªan las piezas, pero si hay gente nueva, es casi como partir de cero", comenta el director art¨ªstico. Sin embargo, los veteranos, como es el caso de Dorian Acosta, ayudan a los directores para que sus compa?eros evolucionen m¨¢s r¨¢pido. Junto a Ana Noya repasa el coro de Samsara con uno de los chicos que se acaban de incorporar al grupo.
El ritmo del ensayo cambia y ahora se desarrolla a un ritmo bastante m¨¢s r¨¢pido. Acosta y Noya le van marcando los ochos, esbozando los movimientos, para que los asimile lo antes posible. "Aqu¨ª te van a pedir que bajes mucho. Y f¨ªjate en los brazos, que vayan completamente rectos. As¨ª", explica la bailarina que protagoniz¨® El sur de Ullate y que, para ella, siempre ha sido "su ballet". "?Tienes alguna duda... [se queda callada un segundo y luego a?ade con una sonrisa] consciente? Las inconscientes las veremos ahora". Acaban de repasar cuatro frases completas, marcadas s¨®lo por la cuenta del tiempo. Entonces vuelven al principio, esta vez con la m¨²sica. "Desde el c¨ªrculo, para fijar bien las piernas", se?ala Noya, que se une a los dos chicos. En 90 minutos han revisado diez. "Ya la tengo aqu¨ª [en la cabeza, que se se?ala, mientras trata de recuperar el ritmo normal de respiraci¨®n]" comenta el joven al final de la jornada. "Ahora lo que queda es interiorizarlos".
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